Once Upon A Time

Trust me

-Storybrooke, presente.-

-Puede que si averiguaramos quién te arrancó el corazón en Camelot...- Sugirió la morena.

-¿Crees que está relacionado?- Preguntó Robin.

-Solo sé que cuanto más sepamos sobre lo que paso...antes encontraremos a mí hermana...-

-¿Emma?- Pensó. -Ella debe de saber algo.-

-No quiere contarmelo...- Explicó. -Dice que eso interferiría en su misión...-

-¿Qué hacemos?-

-No sé si hay algo que podamos hacer...-

-Vamos, no digas eso...- Pidió intentando animarla.

-No lo sé, Robin...todo va de mal en peor...- Lamentó. -No puedo ni siquera encontrar a mí hermana y luego están Emma, y Emily, y ese hechizo...-

El móvil de la alcaldesa sonó y ella respondió al tono.
-¿Como que lo habéis soltado?- Se mostró cansada. -Tengo que irme...-

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-¿Qué diablos está pasando aquí?- Entró a la comisaría. -¿Vas a explicarme por qué has dejado suelto a un preso?-

-No era un preso, Regina.- Rectificó David. -Y lamento decirlo, pero solo el sheriff tiene autoridad para detener a...-

-Soy la alcaldesa.-

-Solo el sheriff puede...-

-¿Emma?- Recordó.

-Ella no puede ejercer su cargo porque la oscuridad la está consumiendo, no es consciente de sus acciones.- Aclaró. -Mientras tanto yo me encargaré de sus asuntos.-

-¿Dejando libre a un perturbado?-

-Es un rey, ¿pero qué te pasa?-

-Me atacó y me desveló su plan maligno, David.- Explicó. -Posee unos polvos mágicos...-

-Si todo eso fuera verdad, ¿no crees que Emma se habría dado cuenta?-

-Por eso me guió hasta él.- Rebatió.

-Espera...¿has hablado con Emma y no nos lo has contado?- Se rebotó. -Sabía que no podíamos fiarnos de alguien como tu para esto...-

-¿Como quién, principe?-

-Sabes mejor que nadie lo que es ser malvado, no tener a nadie a tu lado...¡parece mentira, Regina!- Culpó. -¡Lo que Emma necesita ahora es a su família!-

-Entonces encargaos vosotros del asunto.- Rió. -Haber como os salís de esta sin mi ayuda...-

La alcaldesa salió por la puerta de la sala, pero aún no había abandonado el edificio, cuando escuchó un ruido justo detrás suyo.

Se exaltó al encontrar a la rubia de ropa negra.
-¡Swan!-

-¿Qué ha sido eso?- Preguntó Emma con su nueva costumbre de '0 expresión facial'.

-No voy a discutir contigo, Emma.- Le dió la espalda para salir por la puerta, pero la otra se lo impidió con su magia.

-¿Emma? Así solía llamarme la antigua Regina.- Bromeó. -Pero parece que ahora ha sido sustituida por una blanda que permite que liberen a un preso sin hacer nada al respeto.-

-...¿Quieres que me pelee con tu padre?- Dudó. -No veo a dónde va a parar esta conversación.-

-No pasa nada, la culpa es mia por pensar que alguien sería capaz de ayudarme.-