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***Escuchar 'Ours — Taylor Swift.'***

Julissa suspiró y cerró los ojos, para después cubirse la cara con sus manos. — Estará de vuelta pronto.— susurró a sí misma con una sonrisa en su cara.

Su novio, Niall, había estado ausente en casa, para irse a la guerra por un año completo y  ahora no quería nada más que tener su presencia alegre en la casa, (que se había mantenido tranquila y sin brillo). Habían estado juntos durante 5 años; desde que comenzaron a salir a la edad de 18.

Se levantó de la cama vacía, ansiando pronto despertar con Niall a su lado.— No más soledad.— suspiró feliz y se vistió.

Recogió las llaves del coche y salió a la calle, subiendo con simpatía en el coche. A medida que manejó a la estación de tren, que no podía dejar de sentir cómo la emoción se apoderaba de su cuerpo. Julissa todavía no ha podido procesar la idea de que en realidad estaba volviendo a casa.

Detuvo el auto en la estación de tren correspondiente, se aproximó a ella;  se sentó en un banco y esperó. La única persona que había era otra dama. Ella la vio y se acercó, sentadose en el mismo banco. Ambas se saludaron y la dama le preguntó lo que estaba haciendo ahí.

— Estoy esperando a mi novio. Está en el ejército y él va a volver de la guerra.— Ha respondido a su pregunta.

Ella respondió diciendo que su marido volvía de la guerra también. Se sonrió y miró hacia abajo, pensando en lo maravilloso que sería tener a Niall como esposo. No sería diferente, pero seguro le encantaría.

Las mujeres en el banco charlaron, contando historias sobre su marido y su novio al tiempo que muchas familias comenzaron a aparecer.

Estaba muy llena la estación, pero después de una hora pasó.... — ¡Me parece oír el tren!— La mujer con la que Julissa había mantenido plática exclamó. Y ella rápidamente se levantó y sonrió de oreja a oreja. Entonces observó cómo todo el mundo empezó a animar, esperando con impaciencia a sus seres queridos.

El tren hizo su camino a la estación. Se detuvo y se abrieron las puertas, permitiendo que todos los hombres bajaran y saludaran a sus familias. Lo estaba buscado a través de la multitud y luego vio más hombres salir del tren, con la esperanza de que apareciera Niall.

Su corazón dejó caer cuando todavía no lo podía encontrar. Y había detectado a la dama con la que estuvo hablado anteriormente, besando a su marido con lágrimas en su rostro.

Julissa comenzó a preocuparse. Así mismo intentaba tranquilizarse mencionando que estaba vivo. Se hizo su camino a través de la multitud, buscando a su alrededor. Las lágrimas caían por sus mejillas mientras seguía mirando. Deseaba que no fuera tan pequeña, (porque pararse de puntillas, no le servía).

Se encontró buscándolo a su izquierda, y de repente se vio una cuerpo juvenil al inicio del tren. Sus ojos recorrieron el cuerpo y no podía creer lo que veía.

Era el.  Era su novio, Niall.

— ¡Niall!—  gritó apenas la figura tocaba el piso de la estación, ganando algunas miradas de la gente que ya se estaba retirando.

El rubio giró en su dirección, con una gran sonrisa mientras la vio. Dejó caer las maletas y abrió los brazos para que sostenerla.

A medida que finalmente llegó a él, saltó a sus brazos, envolviendo sus piernas alrededor de su torso mientras sus brazos se adueñaban alrededor de su cuello, sosteniéndose a él cómo si de eso dependiera salvar su vida. Niall, después de dar tantas vueltas (cómo en las típicas películas) y le dio un beso  repetido en los labios.— Te extrañé tanto princesa.— Él susurró mientras que lloraba en el hueco de su cuello.

— Yo también te extrañé Niall. No sabes cuánto.— dejó escapar un sollozo mientras que  ambos se aferraban uno al otro por un prolongado momento.

Y entones Niall la establece suavemente en el suelo, pasando una mano por su suave cabello. Recorrió con su mano su rostro, y limpió los restos de lagrimas.

Él sacó algo de su bolsillo y se arrodilló sobre una rodilla. Sus ojos se abrieron cuándo levantó la tapa que cubría la cajita negra, mostrando un hermoso anillo de plata.

Cubría su boca, mientras las lágrimas en sus ojos le obstruían seguri mirando los ojazos azules frente a ella. Todo el mundo quedó sorprendido a su al rededor.

— Princesa, pasar un año sin ti a mi lado, me hizo dar cuenta, que no puedo vivir sin ti. Tu eres con la que quiero pasar mi vida entera. Me haces feliz, y yo quiero que me hagas el honor de ser mi esposa. Julissa, ¿quieres casarte conmigo?— Él habló con nerviosismo.

Ella asintió frenéticamente con la cabeza, — Sí

— ¿Sí?— Se puso de pie con una enorme sonrisa.

— ¡Sí!— gritó mientras Niall le deslizaba el anillo en el dedo. Después envolvió sus brazos alrededor de su cuello y tiró de él en un  apasionado beso, haciendo que todos a su alrededor se pusieran a vitorear y unos cuantos a besar a sus seres queridos. Los dos se apartaron, descansando su frente sobre la suya.

— No puedo esperar para hacer una familia contigo, princesa. Estoy tan contento de haberte encontrado.— Él le dio un abrazo y ambos no podían ser más feliz de lo que ya eran.

One Shots de Niall HoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora