LittleForeverYoung no se porque no se pudieron dedicar los anteriores.
— Hey, Victoria, ya que estás buscando ahí; ¿puedes conseguirme un refresco, por favor?.— Mi hermano me preguntó mientras yo estaba buscando en el refrigerador algo de beber para mí.
Saqué dos Coca-Cola y le llevé uno a mi hermano y abrí el otro para mí, después tomé asiento en el sofá.
— Hey, ¿dónde está el mío?— El amigo de mi hermano estaba ordenándome con una mirada arrogante.
— Nunca lo pediste y tampoco soy tu criada.
Siempre buscó maneras de hacer que me vuelva loca, pero yo trataba de no crear problemas con él, ya que era el mejor amigo de mi hermano.
— Vic, por favor sea agradable y busca a Niall algo de beber— Rodé los ojos y fui por otra lata para él.
— Gracias, nena.— Dijo y me guiñó un ojo mientras le entregaba la bebida. Sin hacerle caso fui a vuelva a sentarse. — Deberías dejar de resistirte a mí porque sé lo que sientes.
Sentí que empezaba a ruborizarme. Odiaba admitirlo, pero Niall era sin duda uno de mis grandes enamoramientos desde que le conocía.
Desde que lo vi con su hermoso cabello rubio y sus ojos azules penetrantes fue que me enamoré de él. Su acento irlandés me hizo sentir débil las rodillas y la forma en que mostraba su sonrisa del millón de dólares fue la gota que derramó el vaso.
Para ser sincera, la razón por la que lo trataba con tanta frialdad era porque tenía una novia y yo sabía que lo mío con él no podía ser.
— ¿Te estoy haciendo sonrojar?—, preguntó sonriendo ampliamente y fue entonces cuando le espeté.
— No, ni en tus sueños. ¿Por qué iba a sonrojarme por ti? Ni siquiera me gustas.—, rodé los ojos pero sentí mi cara cada vez más caliente, así que sólo me alejé y subí a mi habitación.
Apreté los oídos contra mi puerta cuando oí Niall y a mi hermano hablando de mí.
— Niall, ya sabes cómo se siente acerca de eso...— Mi hermano comenzó a hablar y luego Niall lo interrumpió.
— Lo siento, lo siento. ¿Podría ir a hablar con ella?
— Sí, si quieres.
Hubo unos segundos de silencio antes de que pudiera oir al rubio hablar.
— ¿Puedes estar seguro de que le gusto?
— Hombre, ella habla de ti todo el tiempo con sus pequeñas amigas tontas.— oí risas por ambos y me sorprendió que Liam escuchara esas conversaciones.
Oí pasos que se acercaban a mi puerta y rápidamente fui a mi cama y encendí mi portátil tratando de encontrar algo que me cubirera de mi curiosidad, hasta que tocaron la puerta.
— ¿Quién es?,— Pregunté sabiendo que era Niall. Qué patética.
— Ah, soy yo, Niall. ¿Podemos hablar?
— Como sea.— menciones mientras la puerta se abrió revelando a Niall.— ¿Qué quieres?—, Pregunté manteniendo la mirada en la pantalla de mi ordenador portátil ya que si lo miraba, no podría tener la mirada fija.
— Yo quería hablar.— Dijo sentado en mi cama al otro lado de donde estaba.
— ¿Sobre qué?
— Quiero disculparme ante todo por ser un tonto contigo y también preguntar si quieres ser mi novia.
Cuándo mencionó lo último; la fachada frívola que tenía se había desvanecido.— ¿Yo te gusto?— Dije en el tono más suave que he hablado con él.
— Sí, mucho. Y la verdad es que rompí con mi novia porque no podía dejar de pensar en ti. Siempre me has gustado.— me dijo mientras cerraba mi ordenador portátil y me acercó a él.
Me agarró la barbilla y se inclinó para besarme. Sonreí y luego de un par de besos más; nos dirigimos a la sala, con mi hermano.
— Aww hace cinco minutos que ambos eran enemigos y ahora salen con esto.— mencionó Liam cuando vio nuestros dedos entrelazados mientras caminábamos juntos.
—Sabía que pasaría porque— hizo una pequeña pausa mientras me señalaba con una sonrisa traviesa.—hablas siempre de él con tus pequeñas amigas tontas, ¿no es verdad?— Le sonreí, pero le di una mirada de advertencia. Él simplemente se encogió de hombros.
— Bueno, me alegro de que ambos trataran sus diferencias pero eviten crear su nido del amor cuando estoy cerca.— hizo una mueca de horror ante nuestra risa.
— No te prometo nada, Liam.— mencionó Niall para sonreír y besarme de nuevo.