EL ÁNGEL DEL AMOR.

Capítulo 3

Poncho la seguía admirando...era la mujer más hermosa que había visto en toda su vida. Era tan natural...su sonrisa era fascinante y Poncho no podía creer que después de lo que había sufrido por culpa de Claudia sintiera esa atracción por esa chica desconocida...

-¡No Poncho, deja de babear por esa chava... tienes que dejar de mirarla! no sabes ni su nombre...se dijo... Pero es que es tan bella  ¡no Poncho! primero debes de olvidar y dejar de amar a Claudia.

Mientras tanto...Annie y su papá decidían que hacer...

-Annie: ya papá déjala así...al rato o mañana que venga Peter por ella...no creo que se la roben o la desvalijen.

-Está bien hija...pero espera y le llamo a Peter para que venga por nosotros...dijo Henry.

-¡¡Papá la casa está a unas cuantas cuadras de aquí!!...además prefiero llegar caminando...es tan bonito el día que no lo quiero seguir desperdiciando ¿vienes? dijo la chica y comenzó a caminar...

-Henry: sí hija, tienes razón, tú siempre viéndole lo bueno a las cosas negativas.

Poncho miraba como se iban alejando poco a poco... hasta que desaparecieron...un sentimiento de tristeza lo invadió, hace unos cuantos minutos que la conocía y sentía la necesidad de verla otra vez.

Poncho estaba sumergido entre sus pensamientos y no se daba cuenta que Chris ya estaba ahí.

-Chris: ¡Tierra llamando a Poncho! ¡Tierra llamando a Poncho!

Hasta que Poncho escuchó y por un zape que su primo le dio...reaccionó...

Poncho: ¡Qué pasa wey! no era necesario que me pegaras ¡eh!

Chris: ¡utaa!Pues te hablaba y no me respondías...estoy como 5 minutos hablándote y tú ni me contestabas ¡anda ya! hay que entrar a la casa...te ayudo con una de tus maletas.

-Poncho: si gracias...

Ya una vez entrados a la casa, Chris le enseñó cual sería su cuarto...ahí dejaron las maletas...y Poncho estaba inseguro en preguntarle algo a su primo...

-Poncho: Chris? (un poco nervioso)

-Chris: ¿dime?

Dudando en preguntar pero armándose de valor y haciendo una pregunta indirecta dijo:

- ¿Oye y quién era el señor con el que hablaste?

Chris: ¡Ahh! Es Henry Von Uckerman ¿por?

Poncho no sabía que decir...o mejor dicho no sabía que preguntar para sacarle más información a su primo y que éste le dijera quien era la chava que lo había cautivado.

-¿Y qué es vecino tuyo? preguntó Poncho...esperando a que por fin Christian le dijera más cosas...

-Chris: vecino que digamos no, pero conoce a mi mamá y pues son amigos, sabes él es un empresario muy famoso y vive cerca de aquí, en los condominios que están a unas cuadras.

Chris iba a terminar de contestar a la pregunta de Poncho...pero como casi en todas las ocasiones se soltó hablando...

-Chris: Ahí por cierto, tiene un hijo de nuestra misma edad...se llama Christopher pero él no se encuentra aquí, está estudiando en España, él estudia lo mismo que tú y yo.

-Ahh y qué decir de su guapa hija, en ese momento a Poncho se le iluminó el rostro y Chris siguió hablando. -Ella tiene 20 años y estudia en la Ibero, Anahí es una gran persona además de que es muy guapa ya la conocerás.

Pensando Poncho ¡con que se llama Anahí!

Poncho sonrió y por el momento era lo único que quería saber, así que cambió la conversación para que no se viera tan obvio el querer saber más de Anahí.

-Poncho: Oye Chris ¿ahora sí ya podremos comer?

-Chris: Claro que sí.

A unas cuantas cuadras de ahí, Annie y su padre habían llegado a su casa, abrieron la puerta y Peter los fue a recibir.

-Peter: Que bueno que ya llegaron ¡niña el joven Max la esta esperando desde hace un buen tiempo! está en su jardín.

-Annie: Gracias Peter ahora mismo voy con Max... dejó sus cosas en la sala y se marchó hacia donde estaba su amigo.

-Annie: !Hola Max!! Dándole un beso en la mejilla.

-Max: Hola principessa vine a saludarte y claro a visitarte...pero me encontré con que no estabas.

-Annie: ¡pobrecito! disculpa la espera...

-Max: era una broma Annie...no tengo nada que perdonarte.

-Annie: esta bien, cuéntame entonces  ¿ya listo para regresar a la uni?

-Max: Pues si...pero antes de eso tengo que pensar en ir a trabajar...jejeje.

-Annie: Si verdad y ¿a qué hora entras?

-Max: Pues dentro de una hora, así que me falta poco para irme y ¿ustedes a dónde fueron?

-Annie: Pues a lo mismo de todos los domingos, a la terapia pero nos retrasamos un poco por el tráfico que hay y porque papá se detuvo a platicar con Christian  ¿tú crees? se quedó afuera de su casa porque dejó las llaves adentro.

-Max: ¡eso solo le podía pasar a él!

-Annie: ¿Sabes? le comentó a mi papá que un primo suyo venía a estudiar a la Ibero también; y va a estar en tu grupo.....así que lo tendrás de compañero...

-Max: ¡Pues si es de simpático como Chris bienvenido sea!

Terminado de decir esto Annie no se había percatado de que Max traía algo escondido entre sus manos.

-Max: Principessa te traje algo.

-Annie: y ¿qué es Max?

-Es una cosa hermosa pero menos hermosa que tú...contestó él.

Annie: Ya haces que me sonroje amigo mío...

-Max: ¡Está bien! y de entre sus manos sacó una rosa roja, una de las flores favoritas de Annie.

Annie: Max que hermosa está, ¡gracias!... en ese momento Annie lo abraza y le da otro beso en la mejilla y sonriéndole pícaramente le pregunta:

-Pero ¿seguro que la trajiste?

-Creo que me sorprendiste, bueno no la traje,  la corte de tus rosales, pero lo que cuenta es la intención, además quiero que ésta (señalando la rosa y agarrándole las manos a Annie y acercándose más a ella) la lleves a tu habitación y este cerca de tí.

-Max: Annie sabes que te sigo amando con todo mi corazón y así será para el resto de mi vida, te suplico que me des otra oportunidad, quiero hacerte feliz.

-Annie: Max pero si soy feliz! tengo una familia muy especial, tengo a los mejores amigos del mundo, que más le puedo pedir a la vida.

-Max: Amor...que sólo un hombre puede darte; un hombre que viva sólo para tí.... que te cuide, que te ame, que te respete y que te defienda de la personas que te quieran hacer daño,  ese hombre puedo ser yo Anahí, déjame intentarlo ¿sí?

Annie no sabía que decir, Max la había agarrado por sorpresa ante tal declaración de amor, sólo observaba como Max se iba acercando más y más a ella, sus labios estaban a punto de rosarse cuando alguien interrumpió...

-Disculpe mi niña....dijo Peter, la niña Dulce está al teléfono y quiere hablar con usted...

Annie y Max un poco avergonzados se separaron y Max dijo: Principessa no me tienes que contestar hoy, piénsalo y mañana en la uni me dices, me voy porque apenas voy a llegar al trabajo.

Max se despidió con un beso que llego cerca de los labios de Annie, ella lo despidió con su bella sonrisa y le dijo: -oye gracias por el tiempo que me das.

-Max: Tienes 12 horas a partir de este momento, le dijo adiós con la mano y se fue.

-Peter: Mi niña la señorita Dul la espera en la línea.

Annie: Hay sí ya se me había olvidado me pasas el teléfono por favor...

Peter se alejo y Annie se quedo en su jardín estaba contenta y se la pasaba oliendo la rosa que Max le había dado.

Annie: Bueno?