Llegué a casa a las 3:00 en punto, mi padre estaría contento de eso, y me dejaría salir otra vez. Saqué las llaves de mi bolsillo y sólo les hice un gesto con la mano a Harry y Mariah que ya se iban. Abrí la puerta y divisé una tenue luz en el salón. Caminé despacio y vi a papá sentado en el sofá, viendo la televisión.
-Hola papá- lo saludé mientras dejaba mi chaqueta en el perchero.
-Hola cielo, así me gusta, que cumplas tu palabra- me miró y sonreía a la vez- tienes mi permiso para volver a salir cuando quieras- oh, perfecto.
-Gracias- dije nerviosa.
-Siéntate, y explícame que tal fue la noche- me dijo prestándome atención.
-Fue estupenda, me la pasé muy bien- miré mis dedos y me acordé de la sonrisa de Louis… esa sonrisa.
-¿Quiénes estaban?- tenía dudas si decirle algo de Louis.
-Mariah, dos chicas que no conocía pero fueron simpáticas, Harry…- seguro que adivinaba los otros dos chicos que faltaban.
-Louis y Niall, ¿verdad?- levantó una ceja- ¿tenéis algo tú y Louis?
-¡No!- abrí los ojos- claro que no…
-¿Te gusta?
-Ahora más que antes…
-No quiero que sufras por un chico, (TN)- acarició mi mejilla.
-Yo tampoco quiero hacerlo, pero supongo que alguna vez me pasará, ¿no crees?- me levanté del sofá, necesitaba dormir y estar a solas.
-Espero que no, mi niña- suspiró- ¿te vas a dormir ya?- preguntó mientras cogía el mando de la tele, y la apagaba.
-Sí- bostecé- estoy muy cansada. Buenas noches, papá- subí las escaleras corriendo y entré a mi habitación. Me tiré en la cama y me puse a pensar. Louis… y más Louis… espera un momento, recuerdo que Louis le dijo “No, yo me quedo un rato más, no quiero ir a casa aún, ya sabes…” ¿Por qué no quería ir a su casa? ¿Aún sus padres estaban casados? O… ¿se habrían divorciad? Eso tendría que averiguarlo, y qué mejor, que… ¿pasando tiempo con él?
“Toc-Toc-Toc”
Abrí los ojos lentamente, miré a mi alrededor y estaba en mi habitación, con la ropa de ayer puesta y encima de la cama, muerta de frío ya que no me había dentro de el edredón.
“Toc-Toc-Toc”
-Pasa- bostecé y me refregué los ojos.
-Mariah te está esperando en la puerta- ¿Mariah?
-¿Qué hace ella en la puerta?- dije confusa.
-Esperándote- dijo Mike con tono obvio.
-Eso ya me lo has dicho, tonto- me senté en la cama y volví a bostezar- ¿Qué hora es?- pregunté despreocupada.
-Las 9- se recargó en el marco de la puerta.
-¿Las 9? ¡Pero si es muy temprano aún!- me levanté de la cama con fastidio.
-Yo que sé, baja y no tardes o si no, se va a ir- cerró la puerta y yo bufé. ¿Qué le pasaba a esta chica?
Salí al pasillo y entré al baño, me miré al espejo y tenía unas ojeras impresionantes. Genial. Me lavé la cara y me puse base para aliviar un poco las ojeras, aunque creo que era misión imposible. Con la misma ropa de ayer, bueno, me puse otro chaleco, bajé las escaleras gruñendo. Llegué a la puerta y la abrí de golpe y empecé a hablar sola.
-Mariah, ¿eres tonta o que te pasa? Son las 9, ¡de la mañana! ¿Me quieres mata o…- paré de hablar y también de respirar al verlo ahí.
-Buenos días a ti también, (TN)- dijo Mariah riendo.
-¿Qué hacéis aquí?- pregunté mientras miraba a Mariah, Harry y Louis.
-Te venía a recoger para acompañarlos al entrenamiento, pensaba que querías ir…- dijo ella mirando al suelo.
-Parece que me conocieras de ayer, sabes que odio levantarme temprano- gruñí y cogí mi chaqueta mientras cerraba la puerta de casa de un portazo- ¿a que esperamos, a que llueva?- dije de mala gana y empezamos a caminar. Iba mirando el suelo, escuchando las voces de ellos tres mientras hablaba. ¿Por qué me hacia esto? Yo no quería estar con Louis ahora, me acaba de ver recién despertada y enfadada… Esta no se la perdono.
-Hola- escuché la alegre voz de Louis.
-Hola- dije seria.
-Alegra esa cara- dijo riendo.
-Odio que me despierten temprano, ¿sabías?- gruñí.
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