Maxi - Capítulo 1: Convivencia.

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-Oh, no. No lo harás. -Puse mi mano en su pecho y le sonreí. El chico castaño me miró con incredulidad, pude notar que se sentía intimidado, pero frunció el ceño en cuanto le impedí ir en busca de su amigo.

Todos notamos la tensión en la sala en cuanto llegamos, no esperábamos conocer al rival de Owen en estas circunstancias, pero resultaba obvio de quien se trataba. Yo esperaba que fuera algún enclenque con las rodillas raspadas, pero el chico que discutía con Owen era alto, corpulento y bien parecido. Esperaba que eso no influyera en la elección de Kahli.

-¿Qué? ¿Quién demonios eres tú? -Alejó mi mano de él con un movimiento rápido.

-Me llamo Maxi, soy amigo de Owen, y también me gustaría seguirlo, pero creo que esos dos tienen algunos asuntos que arreglar. -Hablé con la mayor calma que me fue posible.

-Claro que... Puedes intentar seguirlos, si te atreves. -Ambos nos giramos para mirar a Marcus, que se encontraba recargado en la puerta con expresión irónica, desafiándolo. Rodé los ojos.

-¡Joder Marcus! -Le lancé una mirada de advertencia antes de volver mi atención al amigo de Kahli-. Perdona, no buscamos problemas, venimos aquí por Kahli. -Aseguré. El chico pareció meditarlo un segundo, y asintió.

-Tienes razón. Jesse puede cuidarse sólo, lo importante es saber si Kahli está bien. -Me tendió la mano-. Dann.

-Maxi. -Repetí al tiempo que tomaba su mano-. Ellos son Carl, Alex, y el cavernícola es Marcus. -Aclaré.

-Calla Max. ¿En dónde está Kahli? -Quiso saber Alex.

-La están revisando, creo que sigue inconsciente. -Nos dijo Dann, parecía preocupado. Joder, esto no era bueno.

-¿Inconsciente? ¿Qué le ocurrió? -Pregunté.

-Fue en el juego, un idiota la lanzó contra el muro de la pista. Quería lesionarla. Perdió el casco y su cabeza golpeó el hielo. -Fruncí el ceño.

-Hijo de puta. -Marcus perdió la paciencia y llevo las manos a su cabello-. ¿Cuánto tiempo tiene de que sucedió eso? 

-La pista está a unas cuadras de aquí. ¿Quince? Quizá veinte minutos, Owen la trajo mientras nosotros nos quitábamos el equipo. -Informó.

-¿Él estaba ahí?

-Sí, llegó a la pista con Kahl, aunque él estaba en las gradas cuando todo sucedió.

-Debió haber golpeado a ese bastardo. -Los chicos me miraron sorprendidos en cuanto dije eso. Generalmente yo era el más tranquilo de los vikingos, pero justo ahora, estaba bastante molesto.

-No lo hizo, llegó directo a por Kahli. Pero Jesse lo golpeó.

-No creo que haya sido suficiente -aseguré. Kahli se había convertido rápidamente, en una de mis mejores amigas. O la mejor, considerando el hecho de que yo no tenía muchas amigas. Esperaba que se encontrara bien.

-Vale, de igual manera, creo que sólo nos queda esperar -comentó Carl, antes de sentarse. Dann, Alex, y yo, lo imitamos, pero Marcus se recargó en una pared a mi lado. Noté que Dann nos miraba con una ceja levantada.

-¿Ocurre algo? -Intenté sonar amable. Él negó con la cabeza y sonrió.

-Me preguntaba,  ¿quién será el próximo en necesitar asistencia médica al entrar por esa puerta? ¿Gecko o Vikingo? -Me eché a reír.

-Esperemos que ninguno -dije con sinceridad-. Aunque Owen es quizá la persona más impulsiva que conozco. No apostaría a favor de su autocontrol. -Me disculpé con una mueca-. No le agrada para nada tu amigo.

-Eso es porque está celoso. -Se encogió de hombros-. Jesse también lo está, y tampoco puede presumir de inteligencia ahora. Suele ser bastante sensato, pero teniendo en cuenta el asunto de Kahli, cualquier cosa puede pasar.

-¿Te refieres al accidente o a que ambos quieren estar con ella? -Preguntó Alex, sin tacto alguno. Todos rompimos a reír, todos menos Marcus, quien nos miraba molesto-. Vale, vale, espero que puedan arreglar sus diferencias sin recurrir a la violencia. -Se disculpó.

Geckos y VikingosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora