Momentos [Dylmas]

Dylan y sus respuestas.

La misma tarde después de mandarle el correo a Dylan escucha unos golpes en la puerta de la habitación del hotel. Está sentado en el sillón, abrigado con una manta y una taza de chocolate caliente, preparado para poner Netflix. Suspira resignado y mira el móvil antes de levantarse. No tiene ningún mensaje, quizás sea personal del hotel. Abre la puerta con el pelo revuelto y el pijama ya puesto. Lo primero que ve es un ramo de girasoles, lo segundo los ojos pardos de Dylan.

- ¿Dyl?

- Si lo he malinterpretado, hazme parar antes de que la metedura de pata sea demasiado grande, pero si no, escúchame hasta el final - carraspea, un poco, tomando aire.- Busqué una página en Internet sobre el significado de las flores, pero las tres que mencionaste no definen el punto exacto en el que me siento con respecto a ti así que: girasoles porque son amarillos como el sol que eres para mí y hacia el que siempre quiero mirar - se sonroja, porque es lo más cursi que ha hecho en su vida.- No estarás solo en el futuro, Thomas, porque dudo ser el único que se haya dado cuenta de lo especial que eres a pesar del esfuerzo que pones en ser invisible. Sí, es cierto, eres tímido y a la misma vez muy sociable, algo que sólo tiene sentido porque se trata de ti, eres ese tipo de persona que sorprende con una broma y que hace reír a todos - Thomas se cruza de brazos para abrazarse a sí mismo, ya que su corazón no deja de latir con fuerza y sabe que sus mejillas también se han coloreado.- No desees ser otra persona, por favor, porque eres mi favorita. Definitivamente, me gustas lo suficiente como para haber ideado esta locura de plan durante meses y ni hablemos de llevarlo a cabo así que no es que tengas una mínima oportunidad, es que tienes la decisión en tus manos. Mi día mejora cuando llegas y se siente vacío aquí - se señala el pecho - cuando te vas - se muerde el labio, nervioso.- Quiero despertar cada mañana y que seas lo primero que veo; quiero preparar juntos el desayuno y hacer un desastre en la cocina; quiero saber que al final del día entraré en mi piso y si no estás llegarás en breve; quiero acurrucarme contra ti los días de tormenta, porque los odio, buscando tu calor corporal y que me prepares ese chocolate caliente tan especial con ligero sabor a menta; quiero ser tu primera opción y también la última; quiero gastar los segundos dándote los besos que me he guardado; quiero llenar la bañera con agua caliente y sales aromáticas para hacerte el amor lento. Por tanto, sí que conoces a alguien que está total y absolutamente, hasta las trancas y al borde de la locura, enamorado de ti - Thomas apenas puede seguir escuchando por el latido de su corazón. Dylan sostiene el ramo de girasoles con la mano izquierda y toma una de las de Thomas, deshaciendo el gesto del otro, que suspira de placer por el contacto.- No te prometo que vaya a ser perfecto porque nuestras vidas son complicadas y ajetreadas. Lo que sí te prometo es intentarlo hasta que no pueda más - tira un poco de su agarre para acercarlo a su cuerpo.- Así que - susurra contra los labios del rubio - tengo las entradas para ver Coco y descuentos en la app de McDonald's, ¿te apetece tener hoy nuestra primera cita oficial?

Y Thomas como respuesta acorta la poca distancia que aún existe entre sus labios porque él no es tan bueno con las palabras y es la única forma que tiene de demostrarle a Dylan lo mucho que significa para él. Acuna el rostro del moreno entre sus manos que están frías y un poco sudadas por los nervios, pero Dylan no se queja, sino que lame su labio inferior para que abra la boca. Siente los brazos rodeándole, quedando el ramo a su espalda, cuando la lengua de Dylan toca la suya y miles de escalofríos se reparten por su espalda, la mano del otro colándose por la camisa del pijama y tocando piel. Dylan rompe el beso, alejándose mientras muerde su labio inferior.

- Si continuamos por este camino vamos a perder la sesión de Coco, Tommy.

- Te diría que me da igual, pero muero de ganas por verla - lo besa suave.

- Lo sé, vete a prepararte.

El rubio asiente, se da la vuelta y Dylan aprovecha para dejar una palma en su culo porque yisus cuánto marca el pantalón de pijama.

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Sobredosis de azúcar, lo sé.

Qué preciosidad 😍