Quinto: eternidad.

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lo conoces. lo amas. a través de mil vidas, a través de millones de estrellas lo encontrarías, nunca lo dejarías. lo amas, hasta la muerte.

El día que se da cuenta, el mundo entero de Thomas se tambalea hasta que termina de transformarse, de cambiar, perfectamente preparado para ese nuevo dato en su vida porque no es como si no lo hubiera sospechado ya. No recuerda haber estado enamorado antes, pero es un chico inteligente y sabe que lo que siente por Newt no puede ser sólo amistad ya que, desde luego, no tiene ganas de besar a Chuck o a Minho, pero a Newt le mordería la sonrisa y se bebería el chocolate amargo de su voz. Así que... no, definitivamente, no puede ser lo mismo. Por tanto, es amor. Y joder... no se siente mejor después de haberlo averiguado. Porque ahora quiere más, quiere todo lo que Newt pueda ofrecerle. Y Thomas es directo, sincero, marear el lenguaje no fue algo hecho para él. Así que la impulsividad está en su código genético de alguna manera.

- Newt - lo llama en voz baja para no despertar a los demás.

- Dime - responde, abriendo un ojo para mirarle.

Thomas se sorprende, realmente pensó que estaba dormido, pero se mueve lo suficiente como para poder decirle lo siguiente al oído y que sólo los escuche Newt.

- Creo que te quiero.

Momentos [Dylmas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora