Momentos [Dylmas]

Tatuajes gemelos.

Hay una historia acerca de las almas gemelas humanas y es que, cuando llegas a la mayoría de edad, aparece en una parte de tu cuerpo el nombre de la persona a la que estás destinado. Todos escuchan hablar de ello cuando tienen la edad suficiente porque, si has sido bendecido por un tatuaje, es casi obligatorio vivir para poder encontrar a esa persona. 

Newt cumplió la mayoría de edad hace un año atrás y en su blanca piel no apareció ningún tatuaje, supuso que no sería tan afortunado como su hermana Sonya o sus propios padres, esas cosas no son para él, se dijo con cierta melancolía, ¿quién querría estar con una persona tan triste? Además, ya estaba lo suficientemente enamorado, un tatuaje sólo haría su vida sentimental más inestable y difícil.

Sin embargo, el 26 de agosto de ese año a las 03:00am, su piel arde por primera vez y lo despierta con sobresalto. Asustado se quita la camisa todo lo rápido que puede y se mira por debajo del pectoral derecho, donde le duele, gime al ver que se está dibujando un nombre en su piel.

- Dios... - hace la cabeza hacia atrás, pero el dolor no tarda mucho más en irse.

Seca las lágrimas de sus mejillas y respira hondo. No, por favor, ahora no. No puede lidiar con sus sentimientos sin almas gemelas de por medio, no quiere pensar en...

- Mierda - masculla, cuando se incorpora y lee el nombre que hay grabado a fuego en su piel, dividido entre la sorpresa, la satisfacción y el miedo.- Oh, mierda - se pasa las manos por el pelo pensando que no tiene por qué ser el mismo Thomas, ¿verdad? El mundo probablemente esté lleno de personas con ese mismo nombre. Lo sabe, antes de su cumpleaños comprobó las estadísticas.

Da un brinco cuando la puerta de su habitación es abierta con brusquedad y deja ver a uno de sus mejores amigos, el único con el que comparte apartamento.

- ¿Minho? - el asiático lo mira como si le hubiera salido una segunda cabeza y sosteniendo el móvil en la mano.

- Eres tú - se pasa la mano por la cara.- Bueno, no tienes un nombre muy común así que las posibilidades de que fuera otro eran bastante escasas.

- Es demasiado temprano para adivinar de qué hablas, ¿sabes?

- No, pingajo, es demasiado temprano para enterarme gracias a Thomas de que eres su alma gemela - le tira el móvil y el rubio debe hacer verdaderos malabares para no dejarlo caer, sus ojos se fijan en la foto que ocupa toda la pantalla.- Creo que también te la ha mandado a ti, ¿dónde está tu móvil?

- Sin batería - responde, con la garganta seca.- ¿Es... es Thomas? - traga saliva, solo por la visión de la piel de la pelvis de Thomas y un único lunar perdido no puede ser suficiente para encenderlo, ¿verdad? Ah, qué demonios, ni que fuera la primera vez.

- ¿Y quién si no? - masculla, molesto, dejándose caer en el puff al lado de la puerta.

De repente, Newt recuerda lo mucho que Minho odia los tatuajes de almas gemelas porque el suyo apareció cuando menos lo deseaba, volviendo toda su vida del revés. Contiene un suspiro, pero se sienta en la cama, delante de su mejor amigo.