Escena IX

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Todos creen que Thomas no siente nada más allá que curiosidad científica por todo: la brisa del mar, la amistad, por qué la pupila se dilata cuando mentimos, el amor, los colores del arco-iris, por qué los ojos se aclaran o se oscurecen depende del día, las puestas de sol, la temperatura a la que hierve el agua, el momento más bonito del mundo... Thomas tiene 21 años y no ha abandonado la edad del por qué desde que empezó a los 4 años. Así que, aunque sus amigos lo adoran, todos creen que de verdad no es capaz de sentir nada más lejos de eso.

Thomas no está muy interesado en sacarlos de su error porque le gusta su privacidad. Así que se equivocan, por supuesto. Thomas siente, siente muchísimo y sabe que más de lo normal, pero no le importa. No le importa esconderlo, no le importa disimular, no le importa ser la persona contenida que ha sido toda su vida aunque a veces deja escapar pequeños retazos de emociones, nadie le presta la suficiente atención como para descubrirlo. Nadie salvo Newt, claro, pero parece que el rubio prefiere guardar el secreto también.

La tranquilidad que siente cada vez que Newt entra en la misma habitación en la que está y que consigue mitigar su ansiedad natural; la calidez cada vez que sus pieles se rozan por casualidad aunque ya ha empezado a buscar el contacto sin importarle que Newt le descubra; la preocupación cuando el rubio llega tarde; la alegría cada vez que le llama para ir a tomar algo la tarde de los domingos; el deseo cada vez que se detiene a pensar en lo mucho que le gusta, en lo mucho que querría ser algo más; la facilidad del rubio para callar la tormenta de pensamientos que siempre inundan su mente; la excitación cuando Newt le acaricia; el miedo por estropear lo que tienen; el sobresalto cuando la voz de Newt suena en el silencio causado por haberse perdido en sus pensamientos.

- ¿En qué estás pensando? 

Están jugando a la wii en casa de Minho y es el turno de sus dos amigos por lo que Thomas espera junto con Newt. Así que tiene que girarse un poco porque mientras que él está apoyado contra el sillón, Newt está sentado en él.

- En lo que hubiera pasado si tú no hubieras nacido - admite con confianza. Minho y Teresa lo miran alarmados, Newt simplemente ladea la cabeza con curiosidad.- Quiero decir que gracias a algo tan sencillo y simple como un nacimiento estoy aquí hoy contigo. Si no hubieras nacido estaría también aquí con Teresa y Minho. Sin embargo, probablemente no estaría siendo ni la mitad de satisfactorio que es - las gafas se le resbalan de la nariz porque está sudando un poco, nervioso, las coloca en un gesto que todos conocen ya.

- ¿Piensas mucho en ello? - pregunta, descruzando las piernas, el otro asiente.

- También en lo que pasaría si murieras - la emoción se atraganta en su garganta, pero consigue hablar con claridad.

Minho a veces bromea llamándolo vulcano, pero Newt sabe que, si Thomas fuera uno sería como Spock, tan humano, tan inteligente y tan contenido.

- Pero estoy aquí, Tommy, no me voy a ir a ninguna parte - el moreno abre la poca para replicar que eso no puede prometerlo porque existen un millón de factores que escapan a su control, pero Newt se adelanta.- ¿Y si tú no hubieras nacido? ¿Qué pasaría? - Thomas no responde, aleja sus ojos de los chocolate de Newt y los posa en la pared.- ¿No lo has pensado?

- No, no es interesante - se encoge de hombros.

- Si tú no hubieras nacido, Tommy, yo no estaría aquí - responde, cayendo del sillón para pasar los brazos por los hombros de su amigo y abrazarlo.

- Vuelves a afirmar algo que no puedes saber - replica, sintiendo las mejillas calientes.

- Oh, claro que puedo.

Besa la coronilla del menor que decide callar los pensamientos que lo animan a refutar la afirmación y se deja caer contra el cuerpo de Newt, que lo abraza con más fuerza mientras Teresa y Minho vuelven al juego.

- Eres único, Tommy.

El aludido suspira.

- Y menos mal.

A lo mejor, si no lo fuera, Newt no se habría fijado en él, pero lo es. Y el rubio no mira a nadie como lo mira a él y quizás algún día junte el valor necesario para decirle que gracias a él todas sus emociones se amplifican. Sí, algún día.

Momentos [Dylmas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora