#9

288 13 2
                                    

Abres la puerta y desciendes a toda prisa las escaleras que conducen al depósito.

Mientras bajas las escaleras, se te hace un tanto sospechoso que Martínez no haya asegurado la entrada a dicho lugar a estas horas. Consideras la posibilidad de que el asesino haya sido el responsable de dejar libre el acceso hacia el sótano fin de conducirte deliberadamente allí a fin de tenderte una trampa. Y sin embargo, ya es muy tarde para volver atrás, puesto que tu perseguidor está pisándote los talones.

Numerosos paquetes repletos de papel y cartón se apilan en grandes filas a través de gigantescas estanterías metálicas. Tanteando en medio de la oscuridad, tus manos consiguen dar con lo que parece ser la puerta de uno de los casilleros pertenecientes a los trabajadores del almacén. Una rápida inspección con tus dedos te permite comprobar que no hay ningún candado puesto, por lo que podrías intentar esconderte en su interior.

¿Intentas esconderte dentro del casillero? Sí es así, lee la parte #13.

Si buscas otro escondite, lee la parte #20.

Sola con el AsesinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora