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Ha pasado un año entero desde que te mudaste a esta provincia: Los días siguen transcurriendo sin mayores problemas ni sorpresas dentro de esta pequeña comunidad... Para algunos, esta sería una existencia bastante aburrida. Pero para ti, es una vida ideal.

Y sin embargo, un día llega un visitante inesperado, quien se encuentra contigo mientras esperabas ser atendida en un café local: Se trata de un hombre joven, bastante atractivo, el cual te reconoce en seguida, a pesar de que tú no lo recuerdas a él.

El joven te explica que él trabajaba para la misma compañía en donde tú solías trabajar mientras vivías en la ciudad, aunque él no desempeñaba labores en la oficina, sino que era un estibador del depósito.

—Todos en la oficina nos preocupamos mucho en cuanto nos enteramos del accidente que sufriste. Bueno, al menos, yo si me preocupé muchísimo...

El joven no puede evitar sonrojarse al decir estas últimas palabras. Y si bien no te produce mucho agrado tener que recordar aquel viejo empleo que propició la experiencia más terrorífica por la cual tú hayas tenido que pasar en tu vida, lo cierto es que el recién llegado te parece un sujeto bastante agradable, entablando los dos una animada conversación.

—Las cosas están muy mal en la ciudad...—te explica él—.La gente parece estar más paranoica cada día, con todas las noticias de asaltos y otros crímenes que son cometidos cada día, sin que la policía pueda hacer nada para mantener las cosas bajo control. Por eso decidí renunciar al trabajo y mudarme aquí, un pueblito sencillo y hermoso...Y aunque llevó aquí solamente un día, debo decir que el lugar me encanta. Me recuerda mucho al pueblo donde yo nací y pasé mi niñez, antes de mudarme a la capital...

Luego de pasar una maravillosa tarde en compañía de aquel joven, ambos acuerdan reunirse nuevamente al siguiente fin de semana, en el mismo café donde tuvo lugar su encuentro. Ya para esa segunda cita, te alegras de oír que tu nuevo amigo ya cuenta con un nuevo empleo, en un almacén cercano a la floristería donde tú trabajas.

Conforme van pasando los meses, él y tú van volviéndose más cercanos, y tú llegas a sentirte muy atraída por él. Por fin, a un año después de haberle conocido, sientes que él es la persona ideal para ti...La persona con la que estás dispuesta a pasar el resto de tu vida. Y tal parece que él se siente de la misma manera con respecto a ti, proponiéndote matrimonio durante una tranquila mañana de febrero. Tú le das el sí de inmediato.

Tus padres están encantados con el muchacho. También tus amigos y conocidos le tienen una gran estima.

El día de la boda es todo un acontecimiento dentro de aquella pequeña comunidad. El aplauso de las personas invitadas a la ceremonia es unánime en cuanto los dos se besan.

Su nombre es Domingo Menéndez...Y estás segura que él y tú serán muy felices en los años venideros...

FIN

FIN

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Sola con el AsesinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora