#91

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—Muy bien... —dices, fingiendo seguirles el juego al asesino y a su cómplice—. ¿Eso es lo que quieren? ¿Qué mate a estos sujetos? Pues bien, eso haré...Y al primero que voy a matar será...

Le apuntas a Guzmán Sachs a la cabeza. Pero en cuanto el asesino baja la guardia, le disparas a él, matándole al instante de un tiro en la frente. Apuesto que él no se esperaba un resultado semejante para sus estúpidas pruebas.

Sin embargo, su cómplice no tarda en reaccionar, disparándote en las costillas. Luego él procede a matar a sus dos rehenes, disparándoles a la cabeza.

Ahora mismo estás desangrándote en el suelo, experimentando un dolor indescriptible a tu costado. Sientes que estás a punto de morir...

Y es entonces cuando oyes una serie de pasos muy cercanos, caminando en dirección hacia ti: El cómplice del asesino se encuentra a tu lado.

—Eres mucho más astuta de lo que me imaginaba, muchacha...—dice él, agachándose para que puedas oírlo mejor—. ¡Pensar que una chica sin experiencia usando armas ha conseguido matar a uno de mis más devotos discípulos! Sería una pérdida lamentable dejar morir a alguien capaz de lograr semejante proeza. Así que te propongo esto: Únete a mi causa y vuélvete mi discípula. Si lo haces, prometo que haré todo lo posible por salvar tu vida...

¿Aceptas la oferta del cómplice del asesino? Lee la parte #87.

Si la rechazas, lee la parte #90.

Sola con el AsesinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora