CAPITULO 156

105 10 1
                                    

Narra Vegetta: Era nuestro séptimo día viviendo en Los Ángeles, y lo único que hacía falta para tener nuestro apartamento listo era montar nuestros respectivos espacios de grabación con ordenadores, luces, micrófono, cámara y demás cables para grabar, así como la configuración de cuentas, pero de forma contraria a como habíamos estado trabajando en montar y ordenar las demás cosas para nuestro apartamento, siempre juntos; está vez cada quien lo montaría solo, cada uno en su habitación por idea de Willy, según él, así terminaríamos más rápido y podríamos luego salir a caminar por los alrededores. Había colocado y conectado todo, el problema era que llevaba tres malditas horas y el estúpido ordenador no lograba permanecer más de un minuto encendido y luego se apagaba, volvía a desconectar todo para rearmarlo para que sucediera lo mismo o simplemente no encendía, en un intento final cuando creí haberlo solucionado, diez minutos después de tener el ordenador encendido un pantallazo azul seguido de un apagón fulminante se burlaron de mí anunciando que me había equivocado, me hervía la sangre del cabreo y frustración. Maldita porquería!! expresé desconectando rápida y de manera fúrica los cables para terminar arrojándolos contra la pared.

-WOW!! tranquilo tío, exclamó Willy, quien entraba a mi habitación.

-Está mierda no funciona, le comenté cogiéndome del ceño, porque me dolía la cabeza de la misma frustración.
-Tienes que calmarte o no lograras hacer que funcione manifestó tranquilamente luego de darle un sorbo a su botella con agua.
-Me molestó un poco su comentario, porque esperaba un "no te preocupes amor, yo te ayudo", pero en lugar de eso, así como sorpresivamente apareció por mi puerta, así se fue, soltando antes un indiferente "Seguiré con lo mío". Tranquilízate, no te cabrees con él me dije, acaba de decir "seguiré con lo mío", seguramente también está teniendo dificultades para montar su ordenador. Me acosté sobre la cama con el pensamiento de descansar y relajarme diez minutos y luego continuar, habiéndolo hecho decidí ir a la cocina por una Coca Cola para refrescarme,  con bebida en mano decidí ir unos minutos a la habitación de Willy, para ver como le iba con el montaje de su mesa de grabación, encontrándolo muy feliz y divertido jugando en su ya funcional ordenador, no sé porque pero me cabreo verlo así, quizá por el hecho de habían pasado al rededor de unos doce minutos desde que él salió de mi habitación y que en lugar de ponerse a jugar hubiese pensado en que yo posiblemente seguiría trabado en mi desquicio de arreglar mi inútil ordenador, también me molestaba el hecho de que haya visto quejarme y que no se ofreciera a ayudarme, por qué yo si lo hubiese hecho. Instantáneamente recapacite, seguramente acaba de empezar a jugar me dije, de repente levantó los brazos proclamando victoria y empezó a carcajearse, yo continuaba a brazos cruzados parado al pie de la puerta viéndolo reír y burlarse de la persona con quien jugaba.

-Ocho victorias seguidas, no te aburres de perder Frank, exclamó entre risas.
-Sentí que me halaban las orejas cuando lo escuché y me di cuenta que la otra persona era Frank, me había equivocado, esas ocho victorias, significaban que llevaba un largo rato jugando con él, incluso tiempo antes que llegase a mi habitación, y en lugar de ofrecerme a mi, su novio, la ayuda que necesito, regreso aquí para jugar con Frank.
-Como si sintiera que lo observaba, volteó en mi dirección, me sonrió pero lo miré serio y me di la vuelta para irme. Al rededor de cinco minutos después llegó a mi habitación.
-Hola! expresó sonriente.
-Hola, respondí serio.
-Listo para salir a caminar un rato, preguntó.
-En verdad me pregunta eso pensé, porque yo estaba sentado en el suelo bajo la mesa rodeado de un enredo de cables, Pues obviamente no, respondí mientras levantaba los cables con una mano.
-Bueno y que esperas, ahí sentado con la Coca Cola en la mano, los cables no se van a conectar solos y el ordenador no va funcionar nunca, expresó sarcástico.   

-No es gracioso, Willy!
-Sonrió, pues date prisa, que estoy aburrido y tengo hambre.
-Que estás aburrido dices?
-Si, contestó, estirando los brazos.
-Y para el cabreo que ya me invadía, vino a hacerle compañía, el sarcasmo. Si, pude notarlo mientras jugabas en línea con Frank y te reías a carcajadas.
-Por cierto Frank, te manda saludos dijo.
-Dale las gracias y también mis saludos cuando vuelvas a jugar en línea con él.
-Denoto cierto sarcasmo y cabreo en tus palabras, que te sucede, preguntó.
-No quería iniciar una discusión, así que no iba a mencionarle que me cabreaba su indiferente comportamiento y nula ayuda. Sucede que llevo tres horas tratando de hacer que el maldito ordenador funcione, pero no, la maldita porquería no sirve, manifesté.
-Vaya! al parecer alguien hizo de la palabra "maldito" su favorita, dijo riendo. Lo miré serio, me había equivocado al pensar que era indiferente, el niño estaba en plan burla ante mi cabreo y frustración.
-Es broma dijo rectificándose al instante, pero aún entre risas, Tranquilizate, venga deja el cabreo, te ayudaré a montarlo dijo sentándose a mi lado y cogiendo un par de cables.
-Gracias, expresé suspirando para tratar de calmar mi enojo. Cinco minutos después la ayuda de Willy se había terminado.
-Estás jodido, esto no sirve dijo entre risas.
-Chaval, no te burles, y mejor ayudame.
-Es que no se como va esto!
-Como no vais a saber si ya montaste tu ordenador.
-Si pero has visto que he conectado todo como va y tampoco funciona, seguramente algo tocaste y lo dañaste.
-Pero que dices tío, no he dañado nada, manifesté estupefacto ante su acusación.
-Entonces como explicas que no funcione?!
-Pu- pue- pues yo que sé, expresé tartamudo de la indignación.   

-No grites que no estoy sordo, pidió con el seño fruncido.
-No estoy gritando, repliqué.
-Que no!?
-No!! respondí, seguido suspire profundo para tratar de calmarme porqué me di cuenta que si estaba hablando a gritos por el cabreo.
-Macho! pero no te cabrees conmigo, que yo no tengo la culpa que tu ordenador no funcione, dijo levantándose y caminando para salir de mi habitación.

-A donde vas, pregunté.

-Mi habitación.
-A qué?!
-A dormir un rato, estoy cansado.
-Y vas a dejarme aquí, sin ayuda?!
-Te he ayudado en lo que pude, manifestó indiferente mientras continuaba caminando.
-Si claro, cinco minutos en ayudarme te dejaron exhausto.
-Se dio la vuelta al pie de la puerta para mirarme. Y que quieres que haga, no puedo hacer más, eso está fuera de mis conocimientos, llama a alguien que sepa de ordenadores, manifestó serio.
-Sabes que, no voy a llamar a nadie, yo solo continuaré intentando hacer que funcione, vete a dormir, o mejor ve a jugar con Frank que para eso si tienes tiempo.

-Discuuulpaaa???!! dijo sorprendido.

-Me di la vuelta ignorándolo. En menos de tres segundos lo tenía parado a mi lado.
-Te molesta que estuve jugando con Frank, preguntó.
-Continué ignorándolo junto con su pregunta, cogiendo cables y desconectándolos para volver a empezar mi desquiciante actividad. Pasaron unos segundos y dijo:
-Venga responde.
-Yo seguía en plan "ignorarlo".
-Samuel, expresó alzando la voz.
-Quien es el que grita ahora comenté mientras volvía a verlo, él estaba a brazos cruzados mirándome serio.
-Entonces no me ignores y responde de una vez.
-No, no me molesta que estuvieses jugando con Frank, lo que si me molesta es que si tengas tiempo para el simple hecho de jugar, y quien sabe cuanto estuviste haciéndolo, para eso si has tenido tiempo, pero para ayudarme a mi, por más de cinco minutos, no lo tienes y prefieres irte.

-Y que quieres que haga?, que vuelva a desconectarlo todo y lo vuelva a conectar de la misma forma en que ya lo hice para que siga sin funcionar?, además crees que a mi no me costó trabajo montar mi ordenador, estoy cansado y aburrido de ver cables.

-Pero no te cansaste ni aburriste hace rato de ganarle a Frank, como te escuché decir, ocho veces seguidas, quiere decir que la primera vez que veniste aquí a mi habitación y soltaste el "seguiré con lo mío" expresé haciendo comillas al aire con las manos, eso era jugar con Frank, con quien ya llevabas un gran rato jugando, y luego sabiendo que yo estaba aquí abrumado por mi inútil ordenador, preferiste volver a tu habitación para jugar en línea con él, que ayudarme a mi, y si no me hubieses visto parado en tu puerta seguirías en tu habitación jugando. 

Dime una cosa, cuando me viste parado en la puerta de tu habitación, acaso por ello te acordaste de mi, o mientras jugabas si te acordabas pero te daba lo mismo, pero al verme te pasó milagrosamente por la cabeza e hizo que te dieras cuenta que tal vez, yo seguiría tratando de arreglar esta mierda, dije tirando con fuerza los cables contra el suelo, te remordió la conciencia y por eso veniste, aunque primero empezaste a burlarte y luego ya por lástima decidiste ayudarme por cinco miserables minutos o simplemente veniste a estirar las piernas como la primera vez, pregunté sarcástico y totalmente cabreado, Willy me miraba en una combinación de estupefacto y cabreado, movió los labios, pero mi fúrica verborrea no había terminado e interrumpió lo que él fuese a iniciar para decir, Ohhh espera! ahora que lo recuerdo veniste a apresurarme porque quieres salir a caminar por los alrededores, tonto Samuel, al pensar que su novio venía a ayudarle, expresé burlón, Sabes que, no me respondas nada, olvídalo, no quiero saberlo, haz lo que quieras expresé levantándome del suelo, cogí mi Coca Cola y salí de mi habitación, dejándolo ahí.

-Samuel! me llamó en tono cabreado, hice caso omiso, y salí a paso rápido del apartamento azotando la puerta. 

En cualquier parte del mundo, siempre que sea contigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora