CAPÍTULO 194

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*NARRA VEGETTA*

Le había escrito a Willy varios textos, antes de algunas llamadas a su móvil, que terminaron en el buzón de voz, y le escribí con la esperanza que me contestara como muestra de su amor y perdón, cuando encienda el móvil y lea los textos, espero que no esté tan enojado para no hacerlo, es que en ese último texto que me envió, sí estaba muy enojado conmigo, y en parte tenía razón, porque nunca somos de enojarnos por tanto tiempo, pero él piensa que yo lo hice, y no es así, joder, como te extraño Chiqui.

El día veintiséis por la tarde ya estábamos en casa, me sentía contento por haber visto y compartido con mis abuelos y demás familia.

Para mañana mi agenda era otra, mi misión era una sola, ver a mi Willy, como lo tenía planeado desde antes del viaje, solo que ahora, había una circunstancia adicional, la discusión, pero iría a su casa, lo sorprendería y le daría su regalo de navidad y saludaria a su familia, pero sobre todo haría esto por mi, porque sé que no iba a soportar tantos días sin verlo.

...................

Estaba contento por ver a mi Willy, y también nervioso por arreglar las cosas, cuando planee esta visita, nunca me imaginé que fuese en las actuales condiciones, estando cabreados uno con el otro, bueno, yo ya no lo estaba, pero él sí, solo espero que quiera hablar conmigo, y si él abre la puerta, que no me la tiré a la cara.

Toqué a la puerta varias veces, pero nadie abrió, mierda! Seguramente no hay nadie, será volver a casa, me dije, resignado y triste, y empecé a caminar.

-De pronto escuché una puerta abrirse. Samuel, eres tú, dijo la femenina voz.

-Me di la vuelta. Karol, hola, respondí contento, dirigiéndome hacia ella.

-Hola, exclamó sonriente, y nos unimos para un abrazo.

-Tío, me da muchísimo gusto verte otra vez.

-A mi también me alegra verte, oye estás más alta y más guapa.

-Gracias, pero por favor pasa. Te apetece algo de beber.

-Agua, por favor.

-Enseguida, y ponte cómodo, ahora vuelvo.

-Gracias.

..............

-Creí que no había nadie, comenté cogiendo el vaso con agua.

-Perdona que tardé en abrir, es que estaba dormida.

-Perdoname tú a mi por despertarte, expresé con vergüenza.

-No, descuida, es que estaba dormida, luego toda adormilada me levanté para ir al baño, y cuando volvía a mi habitación de tan aturdida que estaba me costó darme cuenta que tocaban a la puerta principal, así que no me despertaste, no te preocupes.

-Vale, por cierto feliz navidad.

-Gracias, igual para ti.

-Y esto es para ti, le dije sacando el regalo de la bolsa que llevaba.

-En verdad!

-Sí.

-Tío, muchas gracias, puedo abrirlo ahora.

-Claro, cuando quieras.

-Me encanta! expresó contenta, al abrir la pequeña caja y ver los dos pares de pendientes en forma de estrella, Samuel, muchas gracias, las estrellas son mis favoritas.

-En verdad?! No lo sabía!, mira que casualidad,.... es que fuimos de compras con Guille y los vi, y quise traertelos como un presente de navidad.

En cualquier parte del mundo, siempre que sea contigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora