CAPITULO 85

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Narra Willy: Es viernes en la noche no podría estar mas emocionado porque mañana veré a Vegetta, mi madre nos llamó a todos para cenar, nos sentamos a la mesa y empezamos a comer, mi padre le contaba a mi madre algo sobre su trabajo, mi hermana y yo hablábamos sobre juegos, luego mis padres dijeron mañana iremos ir al centro comercial a comprar unas cosas, hijos les gustaría acompañarnos preguntaron y así luego almorzamos en algún restaurante todos juntos, si dijo mi hermana, los acompañaremos cierto Guille dijo, lo siento no puedo exclamé, pero porque preguntó, mañana saldré, iré a visitar a Vegetta, ay no Guille ve otro día expresó, y aunque me gusta compartir tiempo con mi familia, pero tengo días de no ver a mi novio y de ninguna manera perderé de ir pensé, no puedo exclamé, estamos trabajando en una serie juntos y tenemos que discutir algunas ideas dije, como besarlo hasta quedarme sin aliento pensé, no puedes hablar sobre eso por el móvil, es necesario que vayas hasta su casa preguntó mi hermana, si Karol tengo que ir, lo siento no podré acompañarlos, hijo y a que hora saldrás preguntó mi padre, a las 8:30 de la mañana respondí, bueno tienes cuidado en el camino, lo tendré papá no te preocupes, deberías invitarlo a venir un día a casa dijo mi madre, no lo conocemos, si lo invitaré un día exclamé, así es quiero conocer al chaval por el cual me dejarás sola mañana dijo mi hermana en tono de reproche, no seas tontita le dije, ya saldré otro día con vosotros, te prometo que un día de estos, el que tú escojas saldremos solo tú y yo a donde quieras, vale exclamó, terminamos de cenar, dimos las gracias a mi madre por la deliciosa cena, mis padres fueron a ver tv, me sentía un poco culpable por dejar sola a mi hermanita el día de mañana así que le pregunté, Karol quieres jugar un rato en la consola o el pc, te remuerde la conciencia por dejarme sola y por no acompañarnos mañana cierto dijo, y no pude evitar reír porque era verdad lo que decía, lo sabía expresó por eso te ríes, claro que no exclamé, no seas mentiroso Guille, que no dije riendo, y continúas riendo pues entonces no quiero jugar contigo hasta que lo aceptes, venga esta bien dije aun riendo pero ya no te rías manifestó, bueno ya esta bien dije y la abracé, tonto dijo, ya vamos a jugar le dije, y fuimos a su habitación, pasamos dos horas jugando, luego a ella le dio sueño y yo regresé a mi habitación, antes de acostarme subí los vídeos y los dejé programados para publicarse mañana que no me encuentre en casa, luego puse la alarma del móvil para las 7:00 am, y me acosté a dormir. La alarma sonó, y mi primer pensamiento fue Vegetta, sonreí al recordarlo, no puedo esperar para verlo pensé, así que me levanté, y directamente fue al baño para ducharme, terminé y me vestí, salí de mi habitación y nadie de mi familia se había levantado aún, así que me serví para desayunar cereal de chocolate con leche, eran las 8:15 am, cuando mis padres se levantaron, creímos que ya habías salido dijo mi padre, en quince minutos me voy respondí, el reloj marcó las 8:30 am, me despedí de mis padres y salí de camino a casa de Vegetta, mi Vegetta. Cogí un taxi y le di la dirección al conductor, durante el camino le envíe un WhatsApp a Vegetta, con una foto mía y el texto *Aviso de servicio público: Este chico está enamorado de ti, en cuanto lo veas tienes que darle un beso apasionado*, y respondió *No hay otra cosa que desee más en este momento, dime que vienes en camino*, *Pronto estaré ahí amor*, y contestó *Estaré en la puerta esperándote*, quince minutos después estaba frente a la casa de Vegetta, le pagué al taxista, bajé y ahí estaba él sentado en la entrada de su casa esperándome, tal como había dicho en el mensaje, me miró y sonrió, no hay nada mas perfecto que esa sonrisa y sus hermosos ojos café pensé, caminé hacia él, me abalance y lo abracé tan fuerte como pude y él hizo lo mismo, podía sentir su respiración en mi cuello, cada vez que estoy junto Vegetta, el tiempo se detiene pues solo existimos él y yo, nadie mas, por todos los cielos como te he extrañado dijo, lo miré a los ojos y él me besó como nunca antes lo había hecho, era una mezcla de ternura, pasión y algo más fuerte que es imposible describir con palabras, nos besábamos como si nuestra vida dependiera de ello, y la verdad no me importó para nada si sus padres o alguien más nos estuviera mirando, porque no hay nada mejor que abrazar y besar a la persona que amas después de haberla extrañado tanto, lentamente terminamos el beso, me miró a los ojos, con esa mirada tan dulce como sólo él sabe hacerlo, que provoca en mi una eterna sonrisa, Vegetta te amo le dije, me sonrió, te amo Willy no tienes idea de lo mucho que deseaba tenerte entre mis brazos exclamó, y yo estar entre tus brazos así pegadito a ti expresé, ven entremos quiero que conozcas a mi padre dijo, me tomó de la mano y entramos a su casa. Sus padres estaban en la sala ambos leían el periódico, no estaba nervioso por conocer a su padre, ya que conozco a su madre y es una señora genial y seguramente él también lo sea, papá mamá les llamó, voltearon la mirada hacia nosotros y sonrieron, Willy cariño cuanto me alegra verte de nuevo dijo su madre levantándose del sofá, se dirigió hacia a mi y me abrazó, me da mucho gusto verla de nuevo manifesté, luego Vegetta dijo Willy, te presento a mi padre, papá el es mi novio Willy, su padre también se levantó del sofá y le extendí la mano, es un gusto conocerlo exclamé sonriendo, gracias a mi también me da gusto conocerte expresó con una sonrisa y estrechando mi mano, su padre también refleja ser de la misma manera que su madre, porque no nos sentamos un momento a conversar dijo su madre, y todos nos sentamos, sus padres juntos frente a Vegetta y yo en otro sofá, estuvimos platicando casi una hora sobre nuestros canales en Youtube, contándoles sobre la serie que llevamos juntos y ellos amablemente escuchaban, así como también nuestras series individuales, pero me daba la impresión que no terminaban de comprender los juegos, también conversamos sobre nuestras metas como Youtubers, y no me había equivocado su padre es tan genial como su madre, es el tipo de persona que pareciera que lo conoces de años, porque es un señor muy agradable y jovial, ahora sé porque Vegetta es de la misma forma, teníamos una conversación muy amena junto a sus padres, Vegetta me sonreía y yo a él, y cada vez que lo veo, sólo puedo estar agradecido con la vida por haberlo puesto en mi camino, sólo se que mi felicidad tiene su nombre.

En cualquier parte del mundo, siempre que sea contigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora