En cualquier parte del mundo, siempre que sea contigo.

CAPÍTULO 102

Narra Vegetta: Mis sentimientos desbordan en deseo, Willy es quien enciende mi perdición, su tierna y excitante voz al decirme que me ama y quiere que le haga el amor, es fascinante para seguir escuchándola y sólo deseo llenarlo de besos, lo dulce de sus besos en un momento intenso, su boca y la mía la combinación perfecta, sus profundos y apasionados besos aumentan mis caricias y mis manos acuden a satisfacerlo rodeando su cuerpo como cadena que simboliza ese bello instante en el que sólo es mío, me quitó la camisa y eso provocó que me dejara llevar por mis impulsos, no logro coordinar mis pensamientos, sólo sé que amo a Willy con todo mi ser y sentía el ardor por poseerlo, pero mientras nos besábamos, me perdí en lo sensual de su aliento, y fue en ese preciso momento en que entendí el real sentimiento, más que deseo es el amor que siento en esos frenéticos besos, le quité la camiseta, lo llevé hasta la cama y continuamos besándonos apasionadamente, mis manos fueron recorriendo su cuerpo, lo desnude dejando al descubierto su exquisito cuerpo que es absolutamente precioso, lentamente lo hice mio porque él es virgen y no quiero lastimarlo, de pronto lo escuche quejarse y me preocupó haberme movido muy fuerte y rápido, estás bien pregunté, si continúa respondió y continué moviéndome lentamente introduciendo mi miembro poco a poco hasta hacerlo por completo, escuchaba sus tiernos jadeos y gemidos a cada uno de mis movimientos, es una sensación incomparable de su piel y el roce de la mía, él se corrió primero, a los segundos sentí detonando una bomba de placer en mi, en un gemido pronuncié su nombre y me corrí gozosamente dentro de él, fue un momento mágico donde por primera vez nuestras almas se hicieron una misma, por primera vez sentí una verdadera entrega de amor porque había besado otras bocas y probado otros cuerpos, mas nunca como el de él, por primera vez conocí el término hacer el amor, con él no sólo lo hice, sino también lo transpire, lo sentí, lo viví, me entregué físicamente por primera vez al amor, jamás olvidaré esta experiencia porque ha sido la más maravillosa de mi vida. Abrazaba a Willy por detrás, nos cubrí con una colcha y nos quedamos dormidos luego de que hiciéramos el amor, un par de horas mas tarde desperté, pero ya no estábamos en la misma posición, Willy está de frente a mi abrazándome fuertemente, con su cara pegada a mi pecho que puedo sentir su respiración, sus piernas están entrecruzadas a las mías, madre del amor hermoso, es absolutamente maravilloso sentirlo aferrado a mi, cuanto lo amo, no hay palabras que describan lo que siento por él, es mi pequeño, mi niño, mi Willy, mi todo, mas que besarlo, mas que hacer el amor, mas que ninguna otra cosa, él me coge de la mano y eso es amor, es maravilloso tenerlo en mi vida, del tiempo que llevamos juntos cada vez que lo veo ya sea por Skype o en persona siempre hace que me ponga nervioso, emocionado y es un sentimiento muy bonito, hago y digo tonterías y él ríe conmigo, cuando estamos juntos no puedo dejar de mirarlo, amo su ojos, su boca, la forma en que habla y ríe, sus gestos, incluso cuando se cabrea y hace pucheros se ve adorable, cuando estoy con él no puedo pensar en nada, salvo en hacer cuanto puedo y sea necesario para verlo feliz, estoy enamorado locamente y sin remedio por él, porque me enamoré de su alma antes de tocar su piel. Volví a cerrar los ojos para tratar de dormir de nuevo porque no quiero separarme de la calidez de su cuerpo, a los minutos sentí los suaves labios de Willy besándome en el pecho, que provocó en mi empezar a sonreír, abrí los ojos y ese maravilloso par de ojitos chinos me miraban acompañados de esa hermosa y arrebatadora sonrisa, hola mi vida exclamé, hola mi amor, lo siento te desperté expresó, no lo hiciste desperté hace unos minutos pero te vi dormido así que volví a cerrar los ojos porque no quería dejar de estar así pegadito a ti, como te sientes, te lastimé un poco cierto pregunté preocupado, tranquilo cariño estoy bien, fue absolutamente perfecto, ha sido la experiencia mas hermosa, dulce, bella y tierna de mi vida, te amo Samuel exclamó, sonreí al escuchar sus hermosas palabras te amo Guille expresé, pero en serio no te lastimé, estás bien volví a preguntar, me siento excelente dijo sonriendo y guiñando un ojo, de nuevo besó mi pecho, subió a mi cuello, pasando por mi barbilla hasta llegar a mis labios, besándome de manera profunda, se separó del beso, hace calor exclamó mirándome provocativamente levantando sus cejas y mordiéndose el labio inferior, quieres hacerlo de nuevo preguntó sonrojado, es adorablemente sexy pensé, solo escucharlo preguntarme eso es excitante y aunque deseo con todas mis fuerzas abalanzarme sobre él y hacerle el amor hasta quedarnos sin aliento, ignore su pregunta para jugarle una broma y le dije Mmmm pues si tienes calor vamos a ducharnos, intenté levantarme de la cama pero él me detuvo cogiéndome de un brazo, ooh podríamos quedarnos aquí dijo y me besó profundamente, fue deslizando su mano por mi abdomen hasta llegar a mi miembro y empezó a masajearlo, su mano traviesa como pequeña exploradora, recorría los puntos más sensibles de mi piel, lo que me hizo soltar un jadeo, me separé del beso aunque no deseaba hacerlo y le dije cariño pero tienes calor así que vamos a la ducha, amor pero yo me refería ha.... y no lo dejé terminar de hablar, sabía a que se refería porque obviamente él también lo había dicho, pero me encanta bromear y jugar con él, ahh no no no a la ducha dije tratando de ocultar mi sonrisa, le di una nalgada y él sonrió, me solté de su agarre y levanté de la cama, pues no me quiero levantar dijo quitándose la colcha de encima, mostrando su desnudez, estirándose sobre la cama y mirándome lascivamente puso los brazos atrás de su cabeza, no pude evitar sonreír al verlo provocándome, joder es tan tierno y sexy a la vez, me di da vuelta y empecé a caminar hacia el baño, Samuel me llamó, me detuve en la puerta del baño, voltee a verlo, te prometo que te vas a divertir en la ducha dije levantando las cejas, haberlo dicho antes exclamó, se levantó rápidamente de la cama y llegó hasta mi, comenzó a besarme de esa excitante manera que me hace suspirar y me vuelve loco, lo levante a horcajadas sobre mi cintura, de mis labios pasó a mi cuello para besarlo dándome a la vez pequeñas mordidas, entramos al baño y así empezó de nuevo y gustosamente el frenesí de pasión.