—¡Sorpresa! —me dijo Jace cuando vio la cara que llevaba.
—¿Q—Qué es todo esto? —pregunté atónita cuando Jace me había hecho salir del coche.
—Tu sorpresa de cumpleaños. Aunque no la organicé yo, lamentablemente —se encogió de hombros.
—¡Diablos! —gritó Emma apareciendo de la nada entre todo el gentío—. ¡Estás preciosa! Feliz cumpleaños —me abrazó con fuerza. Tras ella venían Dylan y Mike, quienes también me felicitaron.
Había una importante cantidad de personas. Unos conocidos, y otros que veía por primera vez. Todos tenían una característica en común: el dinero. Todos parecían personas bastante adineradas y estrafalarias. Cuyo único interés era aparentar.
Mi mente estaba dando vueltas. ¿Qué rayos significaba toda esta gente?
—Melissa —oí a mis espaldas, y con la mandíbula casi tocando el suelo me di la vuelta.
—¡¿Mamá y papá?! —exclamé estupefacta.
Ya decía yo que todo esto me parecía demasiado extravagante.
—Te hemos extrañado, hija —me dijo mi padre sonriendo de medio lado—. Sobre todo, yo. No te veía hace meses. Te ves encantadora —tomó suavemente mi mano y deposito dos besos en mis mejillas.
—También te extrañé, padre —sonreí cálidamente. Me acerqué a mi madre y la abracé—. A ti también.
—Te sorprendimos, ¿verdad? —me dijo ella sonriente.
—Bastante —me reí y miré a mi costado—. Aguarden. Quiero presentarles a alguien.
OMNISCIENCIA
Helena y Dan observaron cómo Melissa se alejaba de ellos con una sonrisa. Ambos se miraron con bastante nerviosismo. Preguntándose mutuamente "¿Y ahora qué diablos hacemos?"
—Madre, padre —llegó la chica tomando la mano del castaño, el cual se moría de nervios—. Él es Jace, estamos saliendo hace un tiempo.
—Encantado de conocerlos, Sr. y Sra. Seller —estrechó la mano de ambos—. Soy Jace Collins, un gusto.
¿Collins? —pensaron ambos al mismo tiempo.
—También estamos encantados de conocerte, Jace. Hemos oído maravillas de ti —se adelantó Helena regalándole una sonrisa al muchacho.
Las dos personas estaban tratando de actuar con normalidad. Aún no era momento de darle la noticia a Melissa. Y ellos no querían estropear su día con una aniquiladora noticia como aquella. Pues sabían de sobra que decírselo en aquel momento sería lo peor.
El peso en los hombros de ambos aumentó cuando, penosamente observaron cómo su hija sonreía llena de vitalidad en nombre de Jace. El cual gentilmente tomaba las manos de la muchacha.
—Todo fue escogido por él —Emma llegó sonriente al lado de los padres de la muchacha, los cuales la miraron asombrados—. También yo puse esa misma cara. él la llevó a un ostentoso lugar, la hizo ahogarse en vestidos caros hasta que consiguiera el que le quedara mejor. Y luego la arrastró hasta las garras de maquilladores del más alto nivel.
Dan frunció el ceño observando atentamente al muchacho.
Imposible —pensó el hombre descartando la tan "descabellada" idea que había pasado por su mente.
—¿Él pagó todo? —preguntó Helena estupefacta.
—Absolutamente todo —respondió la morena.
—Él también parece venir de un lugar prometedor, ¿me equivoco?
—Para nada. Está en todo lo cierto, señor Seller —afirmó—. Jace es el hijo de los dueños de Collins's Technology Inc.
Dan se ahogó con su propia saliva al escuchar semejante cosa.
—Es imposible —dijo él mirando a Helena. Ella tenía la misma cara que él—. ¿Estás segura de lo que dices?
—¡Por supuesto que lo estoy! —se rio—. Es una de las principales cosas que construyen el perfil general de él. Lo saben la mayoría de las personas.
A Dan se le fue completamente el habla.
Maldición, no puede estar pasando esto —pensó él cuando la tensión responsable de los calores que escalaban su cuerpo se hacía presente.
MELISSA
Miré en dirección a mis padres y los vi charlando amistosamente con Emma. Fruncí un poco el ceño.
¿Desde cuándo se llevan tan bien?
—Por cierto, Jace —llamé su atención—. ¿Sabías acerca de todo esto? —enarqué una ceja en cuanto Jace se rio nervioso.
—Puede ser. Emma sólo me dijo que te sacara de casa y que tus padres vendrían. Ella se encargó del resto. Y tus padres invitaron a tu familia.
—Oh, ya veo —respondí suspirando. Realmente no lo noté, para nada.
—Oh vamos, Roja. No te enfades conmigo —Jace me abrazó y besó cortamente mis labios.
—Me mentiste —dramaticé escondiendo mi rostro en su pecho.
Jace se rio y acarició mi cabello.
—Sabes que esa nunca fue mi intención.
Alguien detrás de nosotros carraspeó toscamente haciendo que ambos nos separáramos.
Mis ojos se encontraron con unos ojos avellana. Con una mirada tan profunda que, juro por Dios que te perdías en ella.
Con una altura y una buena condición física bastante considerable, el muchacho de cabello castaño que parecía ser un par de años mayor que yo me sonrió dulcemente mientras hacía una pequeña reverencia.
—Lamento interrumpirles —anunció mirando ahora a Jace con un poco de desdén—. Vine a desearle un feliz cumpleaños, señorita Seller —Jace apretó mi mano con propiedad. De reojo pude notar como la mandíbula de él se apretaba y las miradas entre ambas personas se cruzaban llenas de odio.
—Uh, muchas gracias... Pero, ¿quién es usted? —lo miré confundida mientras sutilmente acariciaba el dorso de la mano de Jace.
—Lamento no haberme presentado. Mi nombre es Lance Carter —me ofreció delicadamente su mano—. Sus padres me invitaron a venir el día de hoy.
¿Carter? Además, ¿mis padres invitaron a esta persona? ¿Para qué?
—Un gusto —respondí dudosamente mientras estrechaba su mano.
—Bien, los dejo nuevamente. De nuevo, lamento haber interrumpido —se despidió, y antes de alejarse le echó una mirada a Jace y bufó poniéndose en marcha.
—¿Qué diablos pasa con ese imbécil? —preguntó Jace—. Es insoportable.
Esta persona, realmente era la primera vez que le veía. Pero su presencia me daba un mal presagio. Sentía que algo no estaba bien. ¿Por qué mis padres invitarían a un Carter a esta casa? No era de extrañar que muchas de las personas presentes en la reunión fueran personas de diversas compañías populares. Aun así, invitar a alguien del apellido Carter, me parecía extremadamente sospechoso. Carter's Ventures era una de las mayores competencias de la compañía de mis padres. Hasta ese entonces, se rumoreaban infinidad de cosas acerca de la relación entre ambas empresas.
Además. Se sabía que el dueño de la empresa Carter sólo tenía un hijo varón, el cual sería el heredero de la compañía.
Por lo que tenía dos teorías: Mis padres habían invitado a esta persona para aparentar una buena relación con la empresa Carter. O simplemente querían quedar en buenos términos con esta persona para que cuando heredase la compañía se acabaran los conflictos entre ambas empresas.
Lo cierto es que su presencia me ponía los pelos de punta.
Y sentía que todo lo que estaba ocurriendo tenía un trasfondo.
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Playboy, ¡Déjame en paz! (EDITANDO)
Genç Kurgu-Maldición, para de molestarme -dijo Melissa exasperada. Jace sonrió con arrogancia. Propio de él. -Oh, vamos, sólo quiero que me des un beso -susurró mientras apretaba el cuerpo de la chica contra el suyo-. Sólo uno, preciosa. -¡Ni lo sueñes! Sólo...