Sora despertó rodeada de una calidez de lo más confortable, se había quedado dormida abrazada al pecho de Kakashi. Él continuaba dormido sentado en el sofá y ella estaba prácticamente subida de lado en su regazo. Alzó la mirada y lo contempló con atención, perdiéndose en ese hermoso rostro. Al tener Kakashi los ojos cerrados, comprobó que la cicatriz de su ojo también rasgaba la fina piel de su párpado, aún no sabía la historia detrás de esa marca, pero intuía que iba a ser aún más triste que la de la máscara. Suspiró con tristeza, tras el ruego de Kakashi de que lo abrazara y se quedara en sus brazos toda la noche, Sora había percibido lo profundamente sólo y perdido que se sentía el shinobi. Ya no tenía ninguna duda en cuánto a qué hombre realmente era el que se escondía tras su coraza, estaba convencida que el peliplata había elegido vivir siendo indiferente hacia los demás por tener miedo a relacionarse e incluso poner a la gente cercana a él en peligro. Suspiró de nuevo mirándole con cariño y volvió a reposar su cabeza en el pecho de su guardaespaldas, sabía que ya no podría dormir más, tras la siesta en la piscina y el sueño en los brazos del peliplata se notaba de lo más descansada. No obstante, quería seguir disfrutando de las sensaciones que le producía estar acurrucada sobre el peliplata.De pronto notó como Kakashi se movía con brusquedad, gimiendo en sueños, ella lo miró y observó como su piel comenzaba a perlarse de sudor. Sora notó cómo la respiración del peliplata se aceleraba de manera alarmante. Iba a intentar despertarlo con suavidad, posando su mano en su rostro cuando él comenzó a hablar:
—Rin —gimió casi en un sollozo—... ¡Rin.. ! —exclamó de nuevo removiéndose inquieto.
—Kakashi —le dijo Sora posando su mano con suavidad en su hombro—... Tranquilo, sólo es una pesadilla.
El peliplata siguió moviéndose en sueños, Sora lo miraba con preocupación, el rostro del shinobi denotaba dolor y pesar... Tenía que despertarlo enseguida o cuando lo hiciera por si sólo lo haría de lo más asustado. Le agarró por los hombros y lo sacudió con un poco más de fuerza.
—Perdóname... Rin —gimió él en sueños—. Obito, no pude...
—¡Kakashi! —gritó Sora dándole una fuerte sacudida—. ¡Despierta!
Para alivio de la joven el shinobi abrió los ojos. La miró sin verla, sus ojos estaban muy abiertos y su cara mostraba un espanto que hizo que Sora se estremeciera, era la primera vez que veía a Kakashi asustado. Esa pesadilla debía haber sido aterradora para conseguir que un hombre tan calmado como el peliplata se mostrara tan afectado.
—Kakashi... - le habló Sora con suavidad.
El peliplata la miró de nuevo con los ojos vacíos y se incorporó con rapidez, su pecho subía y bajaba a un ritmo acelerado a la vez que respiraba casi entre jadeos. Se volteó con brusquedad y se dirigió a la cocina con rapidez. Sora se quedó parada, hubiera querido abrazarlo e intentar tranquilizarlo, pero él actuaba de una manera tan extraña que su inseguridad, no le permitió hacerlo. ¿Y si se molestaba por su intromisión? Finalmente lo siguió a la cocina.
Sora cruzó la puerta y miró a Kakashi, su protector, el hombre más fuerte y poderoso que había conocido jamás:
Él se encontraba de espaldas, tenía una mano introducida en la corriente del grifo de agua fría y sus hombros se convulsionaban en un gesto inequívoco, estaba llorando.
La joven sintió cómo su corazón se encogía al ver así al peliplata.
Al observar a Kakashi en una situación tan vulnerable, Sora perdió cualquier atisbo de inseguridad: Se acercó a él, se colocó delante del shinobi y paró el grifo con suavidad.
Kakashi la miró sin comprender, con los ojos inundados en llanto, ella sacó su mano del fregadero con delicadeza y la acercó a su pecho, situándola justo a la altura de su corazón mientras que con su otra mano envolvía a Kakashi en un fuerte y reconfortante abrazo. Notó qué tras su gesto, él relajaba un poco su tenso cuerpo y le besó en la curva del cuello con suavidad.
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Kakashi mi protector
FanfictionSora despierta en un mundo desconocido, un mundo Ninja al borde de la guerra. Ella sabe que su presencia allí no es casual, ha visto ese mundo en sus sueños y, misteriosamente a lo largo del pasado varios miembros de su familia han viajado allí. Kak...