One Shots | Marvel

Steve Rogers(22)

Sólo necesito una noche

Para muchas personas el amor es perfecto. Para muchas personas el amor es correspondido. Para muchas personas el amor es una maravilla.

Pero para Daphne Romanoff nunca fue así.

No experimentó lo hermoso de un amor adolescente, no tuvo el calor del amor de un familiar que no fuese su hermana, creció siendo fría debido a que reprimieron sus sentimientos sin piedad alguna. Al pasar un tiempo su vida estuvo relativamente bien desde el momento en el que su horrible pasado y el de su hermana mayor quedaron atrás al unirse a la iniciativa Vengadores. Logró volverse más abierta, más risueña, más soñadora, recuperó en cierta parte lo que era, vivió la vida que añoraba durante un par de años, tenía gente que la quería y se preocupaba por ella y en esos mismos años terminó enamorandose perdidamente de Aaron Jhonson, un chico rubio y guapo que conoció en un café. Estuvieron un muy largo tiempo juntos y a la pelirroja nunca se le había visto tan feliz como a lo largo de su "perfecta" relación, pero no todo siempre es perfecto aunque lo quieras y desees en lo más profundo de tu corazón. De un momento a otro ella sintió la relación apagarse, las noches volverse frías y vacías, las conversaciones monótonas y sin interés, las caricias casi nulas. No comprendía el porque, o eso al menos hasta que se enteró de la existencia de otra chica en la vida de Aaron ¿cómo lo descubrió? No fue nada difícil para una ex-espía rusa experta en el área de misiones sigilosas y en cubierta. Los encontró juntos en la misma cama y no dudó ni un segundo en dejarlo de la manera más civilizada que pudo a pesar que le doliera en el alma. Le habían enseñado a ser fuerte, no demostrar sus emociones ante el mundo, pero cuando estuvo de vuelta al complejo, con la puerta de la habitación cerrada y el mundo sin la vista en ella le fue inevitable quebrar en llanto.

-No puedes confiar en nadie- le decía Blake, un hombre de treinta años a una solitaria Daphne con tan solo quince años en una habitación blanca por completo y con espejos en ciertos puntos estratégicos de esta. Ella soltaba una par de lágrimas silenciosas.

-Pero yo...

-¡Comprendelo!- gritó dando una fuerte cachetada a la chica que la hizo voltear el rostro- ¡Nadie está para ti, nadie quiere verte bien, hasta tu hermana en un momento dado preferiría salvar su vida antes que la tuya!

-¡No es cierto!- gritó Daphne con una voz firme a pesar del llanto. El hombre la tomó fuertemente de los hombros arrastrandola hasta el frente de un enorme espejo quedando ambos reflejados en él.

-Estás en una habitación, un mafioso multimillonario que se acuesta con miles de mujeres al mes es tu objetivo ¿confiarías en el, el amor resolvería algo en ese caso?- Daphne ni siquiera separó los labios ante esa pregunta- ¡Está muy claro que no! ¡Es esto lo que te va a ayudar!- le acarició el rostro y luego bajó las manos por el cuello, cerca de los senos, la marcada cintura de la chica y hasta las caderas. Ella tenía un cuerpo espectacular que no la hacia parecer de su edad y un rostro sumamente angelical le hacía juego- es lo que tienes, es lo que impresiona. El amor no es real, la confianza que des la van a aprovechar para mentirte, lastimarte, traicionarte. Tu ganales y mienteles primero Romanoff, se lista, audaz, precavida, planea cada movimiento y no fallarás jamás.