One Shots | Marvel

Tom Holland(21)

Besos y flores.

Robert verdaderamente ya debería comenzar a asimilar que era hombre muerto.

Tanto Tom Holland como Julie Downey estaban considerando un homicidio por la situación que se presentaba. Lo único que les paseaba por la mente a los jóvenes actores era que si nunca hubiesen hecho caso al "Vamos chicos ¿Qué pueden perder si van al casting? Leí el guión y es una película estupenda. Ustedes encajaran perfectamente con el papel" de Robert nada de esto les estaría pasando. Y si, encajaban muy pero muy bien ya que el papel en que dos mejores amigos que comienzan a experimentar sensaciones y situaciones diferentes juntos y se dan cuenta de que están perdidamente enamorados les caía como anillo al dedo.

Pero con Julie y Tom la única diferencia al papel que interpretaban era que temían profundamente revelar ese amor que se tenían por temor a no ser correspondidos.

Pero ahora si se vendría a exponer el verdadero problema, el cual no era el apasionado beso que debían darse en la escena siguiente, si no el hecho de tener que acabar casi desnudos en una cama mientras sus personajes Elizabeth y Christian se confesaban su amor incondicional en el proceso. A ambos chicos no les habían comentado jamás de esa escena, iban dándole solo las partes del guion que debían de estudiarse (cortesía de Tom y su poca capacidad de ser discreto) y cuando les llegaron con esa sorpresa en el viernes de la semana anterior los chicos quedaron totalmente en blanco.

En tiempo presente Julie ya no podía siquiera estudiar sus líneas, estaba recostada en el sofá de su camerino con una almohada cubriéndole el rostro mientras asimilaba lo que ocurriría con su mejor amigo en pocos minutos. Pero mientras estaba sumida en sus pensamientos de cómo escapar de esa situación su teléfono comenzó a sonar con el ringtone especial de su padre al que ella no había contactado ni visto desde el día de la entrega del guión ya que había estado todo el fin de semana en casa de Tom. Hecha una fiera tomó el celular y contestó la dichosa llamada.

R: ¿Cómo está mi prince...?

J: ¿¡Lo sabías!?- preguntó sin dejarlo si quiera saludar.

R: ¿Saber qué?- creía saber a que se refería su hija pero decidió hacerse el desentendido.

J: ¡No me vengas con mentiras papá! ¿¡Lo sabías!?

R: No te dejaré leer más mis guiones, ahora usas mis líneas contra mi señorita.

J: Estoy hablando enserio.

R: Es que el mocoso y tú tienen que darse cuenta ya de una vez de ciertas cosas princesa y pensé que un par de besitos los animarían a confesarse, todo lo hice por ustedes- se excusaba el adulto. Julie volteó los ojos dando un pesado suspiro.

J: Si y también ayudara bastante que me vea casi desnuda ¿no?

R: Te ha visto en traje de baño ¿Cuál es la diferencia?

J: ¿Sabes qué? Olvídalo, al igual que olvida mis pasteles por que jamás te prepararé otro.

R: Sabes que me amas y me lo seguirás preparando, no puedes estar enojada conmigo ni cinco minutos. Vendrás a lanzarte a mis brazos cuando sean noviecitos gracias a mi.

D: A veces te detesto- soltó una leve risa. Si en algo tenía razón su padre era en que no podía estar enojada con él.

R: En cambio yo te amo siempre aunque estés insoportable- un fuerte timbrazo sonó en el set donde Julie se encontraba dando a entender que ya era hora de grabar.

J: Ya debo irme.

R: Mas tarde me cuentas como salió todo.

J: Si es que vivo para contártelo, adiós mal padre- luego de escuchar la despedida de su padre y de colgar la llamada salió del camerino respirando hondo mostrando la mejor sonrisa que podía. Vio que Tom ya se encontraba allí y al cruzar sus miradas ambos entendieron que la incomodidad era compartida.