Enfrentamiento cap 48

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Ay Dios mío estos capítulos vienen fuertes y buenos. Agarrense que tiraremos dos aves a desplumarse.

No se vayan sin comentar esto, que viene ardiente.

.....



Abby puso su mejor rostro de confusión, arrugó su entrecejos e iba a decir algo, pero ladeó su cabeza sin poder articular una sola palabra.

-¿Te sorprendes, no? -inquirió-. Es normal en Erick cuando se enamora, suele ser demasiado estúpido o demasiado inteligente.

Abby tenía ambas mejillas con teñido rojo, sentía ese picor en ellas. Bajó la cabeza enseguida intentando buscar dentro de ella algo que decir.

-Oh, no... no lo sabía, yo... pensé que eras tú -dijo dudosa-. Pero si es así, le dice que le agradezco. -se mostró nerviosa mientras jugaba con el tiro de su cartera. Daniel la miró y pudo ver la timidez en ella, esa que nunca había visto.

-Lamentablemente no me corresponde a mi agradecerle, deberías hacerlo tú, sabemos que quieres -instó sonriendo.

-Oh no, no podría... yo, bueno, tu debes saber lo que pasó así que... -no encontró palabras para decir, estaba nerviosa.

-Erick te ama, sé lo que te hizo y no lo apoyo, yo estoy contigo Abby, sé que tu mejor decisión fue haberte ido de su casa, porque así le diste la lección que ese pendejo necesitaba. Si Erick nunca luchó por ti es porque él sentía que no estaba enamorado y que tú merecía su desprecio si un día llegaba a enamorarte de él, simplemente no era el momento. Ahora, puedes tomarte el tiempo que quieras y pensar en qué necesitas tú, no en lo que necesiten los demás.

Abby por primera vez se sintió apoyada de la manera correcta, y ese Consejo de Daniel le dejó muy abierta la mente. Ella no se decidía al completo que quería, pero sí sabía que muy en el fondo quedaba una partícula amorosa con el nombre de Erick. Esa partícula podría expandirse, pero por el momento estaba muy pequeña y oculta.

-Gracias, me hace sentir mejor escuchar a alguien que si puede ver lo que hice de una manera correcta, sin juzgarme. Siempre seguiré pensando que eres un gran hombre y mereces una gran mujer.

-Gracias preciosa, por el momento estoy bien así, pero no soy de estar bloqueando mi corazón, si me enamoro pues me enamoro; por más que yo sufra, el amor es mi motor de vida, es mi inspiración.

Abby se acercó y lo abrazó al instante agradeciendo su trato con ella.

-Espero al menos que seamos amigos -murmuró-. Sería genial.

-Claro que si, no tengo problemas -respondió el moreno dándole un beso en la frente. Abby se alejó sin poder dejar de sonreír.

-Le agradeceré cuando salga del trabajo, quizás él esté en su casa, pero no le digas nada, ¿si?

Daniel sonrió.

-Hazlo, él sale en el mismo horario de siempre.

Abby se alejó hasta así poder marcharse y sonrió de alguna manera. Tenía que agradecerle, pero, ¿por qué no escribirle? ¿Por qué ir a su casa?

-¿Es que lo quiero ver? -se preguntó así misma-. Estoy loca en realidad, no sé que quiero.

Salió por la puerta dispuesta a llegar al negocio y ponerse al día.

Erick estaba en su oficina lanzando papeles en un bote de basura, era su "deporte" Favorito. Pronto Aldo había entrado por su cuenta y más atrás Jordy, eran inseparables.

-¡No mamen, pendejos! ¿no pueden tocar mi puta puerta antes de entrar? -gritó Erick molesto.

-Ya bájale dos a tu furia, estúpido -respondió Jordy sentándose.

Enseñame A Ser Tu Hombre (Libro2) Terminado✔ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora