Enseñame A Ser Tu Hombre (Libro2) Terminado✔

Un Erick diferente cap 10

Gracias mis amores por haberme comentando y ayudarme con la inspiración. Gracias a ustedes ya me siento activa para seguir escribiendo, y les regalo este capítulo.

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Abby salió corriendo luego de haberse vestido con un jeans un t'shirt rosado y un abrigo gris, besó a su padre y apurada cerró la puerta. Sentía algo de felicidad, no sabía si era por los besos de Daniel o por algo más que ella aún desconocía. Esta vez fue directo a cobrar el dinero que se había ganado en la semana.
Cuando llegó a la oficina, se encontró con Louisa quién también iba a cobrar.

-Buenos días, Louisa -saludó Abby con una notable sonrisa.

-Buenos días -respondió la morena, quién esta vez si sonreía. Estaba feliz de la ayuda que le daría Erick.

-Ojalá todo esto sea rápido, necesito el dinero -murmuró Abby soplando sus manos, sentía las manos heladas, y había invidado sus guantes.

-Pues yo también. Sabes, quería decirte que el señor Erick no es tan...

Enseguida alguién interrumpió, vociferando:

-¡Siguiente!

Abby quedó extrañada por lo que ella quería decirle, pero tampoco se sorprendía. Aseguraba que ella le diría que Erick también la acosa.

Louisa cobró olvidando la conversación y luego fue Abby quién pasó a cobrar. Si no fuese porque el gobierno le quitaba parte de lo que ganaba, hubiese recibido un total de mil dólares, pero no, solo recibió seiscientos setenta dólares. Al menos no se quejaba, al mes podía obtener una pequeña compra y algo de medicamentos para su padre.

Luego de salir de allí, ambas decidieron pagar un Uber, y así llegar más rápido. Fue entonces cuando Abby decidió preguntar:

-¿Como la pasaste ayer? Pensé que hoy entraría al trabajo después de las dos de la tarde.

Louisa sonrió sabiendo a que iría allá, no precisamente a trabajar. Quería poder decirle la razón, pero no sabia si a Erick le gustaría la idea. Pues ella sabe que tanto Abby como él no se llevan bien.

-Sólo voy porque Erick me lo pidió.

Esas palabras hicieron sentir a Abby una fuerte bofetada. Sintió algo de envidia o quizás celos. Porque ella sabía que Erick nunca había tratado mal a Louisa, en cambio a ella si. ¿Por qué Erick era tan malo con ella?. Él se hubiese ahorrado tantos insultos y bofetadas si la hubiese tratado bien.

-Entiendo.

Todo se tornó silencioso, la tensión florecía en el auto y por ello, solo se silenciaron hasta haber llegado a la casa de Erick. Ambas bajaron y entraron a la casa.

Abby se vistió y enseguida fue a poner el café, la cual teniendo una máquina ella prefería colarlo con una cafetera tipo grecas, así el café mantenía una esencia única. Y por eso es que ella tenía a Erick tan en sus manos, como por debajo de sus pies. Porque la propia madre de Erick, nunca había dejado de darle su cafecito en grecas.
Abby puso los panes a tostar, y se asustó cuando vió a Louisa a su lado.

-Abby, el desayuno no es solo para Erick.

Abby fruncio el ceño y recordó a las muchachas que en la noche anterior se besaban con él, y giró sus ojos enseguida.

-Ya sé, durmió con las dos estúpidas.

Louisa puro percibir sus celos y solo respondió:

-Exacto, pero también su hermano menor quién llegó ayer.