Bueno, el siguiente es otro capítulo y luego el epílogo. Ya tengo mi idea del final y siento que no hay mucho por agregar, así que este capítulo será algo largo.
Canción: que me alcance la vida- sin bandera
*Le pido a Dios que me alcance la vida
Y me de tiempo para regresar
Aunque sea tan solo un poco
De lo mucho que me das
Le pido a Dios que me alcance la vida
Para decirte todo lo que siento gracias a tu amor"...
Noche en velas, casi ninguno pudo conciliar el sueño. Erick, pensó tanto en su hijo y en Abby, ya planeaba su vida con ellos, pero miraba a Abby y sabía que en ella había un profundo dolor, que quizás tardaría en aceptar ese nuevo acontecimiento. Lamentó una vez más la situación en que ambos estaban, y al ponerse de nuevo en sus zapatos, sintió un dolor inexplicable, la entendía lo suficiente como para sufrir lo mismo que ella.
¿En qué momento se había borrado su sonrisa? ¿Cuando fue que todo cambió tan de repente? ¿Como podía hacerla feliz?
Erick acarició su cabello y le dio un beso suspirando su dolor. Abby abrió los ojos a sabiendas de que él no la vería, pues ella le estaba dando la espalda. Le dolía mucho el hecho de pensar que nunca tendría la oportunidad de ser madre, o que tenga que adoptar o simplemente ser madrastra del hijo de Erick. Al fin y al cabo, ya él tenía un hijo, no extrañaría tener otro más, él estaba feliz, entonces... ¿Ella también debía serlo?
Abby se hacía tantas preguntas que solo le llenaba la mente de confusiones. Decidió sonreír desde que amaneciera, ser feliz junto a él y apoyarlo como él lo había hecho con ella. Prometió estar a su lado y olvidarse de la tonta idea de pensar en que algún día podría tener un hijo.
Ya no deseaba un hijo o...
Se planteó borrar su dolor como si ella pudiera hacerlo. Solo quería que Erick se sintiera completo, ya tenía su hijo, ya la tenía a ella, no quería que nada le faltase.
Ella pensaba que la felicidad solo dependía de hacer feliz al otro, olvidándose que ella debía incluirse.
Se giró y se encontró con los ojos de su amado, sonrió al mismo tiempo que él y acarició su mejilla.
-Te amo -susurraron al unísono.
Unos segundos de silencio bastó para que Abby diera el paso de preguntarle:
-¿Eres feliz?
Erick soltó un suspiro y le besó su frente.
-Yo he sido feliz desde el día en que te conocí hasta ahora, nada podría arruinarme esta emoción de cada noche abrazarte y despertar a tu lado. Es hermoso sentir que día a día me enamoro de ti y que te amo más que ayer, y estoy seguro que mañana te amaré más que hoy -susurró logrando que Abby se emocionara.
-Si eres feliz, yo también lo soy -susurró, pero en vista de eso Erick negó aclarando:
-No, si tú y yo somos felices, esta relación se basará en amor y felicidad, pero si yo lo estoy y tú no, esto no podría balancearse. Mi vida no tendría sentido si tú estás sufriendo mientras yo sonrío. Prometeme que cuando sientas que ya no puedes más, acudirás a mi y me lo dirás para así yo buscar otra manera de hacerte feliz.
Abby negó con una vaga sonrisa.
-Serás el primero en saberlo, y juntos buscaremos una solución -prometió.
Ella lo había prometido, sin embargo...
....
A primera hora, Erick acudió al hospital y junto a Emely esperó paciente que todo saliera bien en la operación. En sus manos llevaba un balón de fútbol envuelto en un envoltorio transparente. Esperaba que le gustara a su hijo, y si no le gustaba, pues le enseñaría a jugar béisbol.
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Enseñame A Ser Tu Hombre (Libro2) Terminado✔
Romance(Libro paralelo, puede contener spoirler de Enseñame a seducir, no lo leas los dos a la vez. Si el primero no te interesa, puedes continuar con este) El idiota más grande de "Enseñame a seducir" llega a contar su historia. (Segundo libro) Erick O...