Francisco quería decirle algo a Alejandro, era evidente que estaba demás allí, pero debía permitirle que hablara de su padre biológico? ¿ por qué lo está haciendo ahora?
Dulce: Francisco mi amor, finalmente has despertado.
Francisco: Si amor, estaba hablando con nuestro hijo.
Dulce: Tienes que estar tranquilo, lo más duro ha pasado...
Francisco: si..si...
Golpean la puerta e ingresa el Doctor Hernán...
Dr. Hernán: Como se siente Francisco?
Francisco: Pues bien, me siento bien, me duele un poco el pecho pero no es nada.
Dr. Hernán: ¿El pecho?
Francisco: Sí, me cuesta un poco respirar, pero no es nada.
Dr. Hernán: Igualmente lo controlaremos ¿sí?. Necesita descansar, pues ha sido mucha lucha la que ha tenido su organismo.
Francisco: Está bien.
Dulce: Francisco, yo llevaré a Alejandro con Ani para poder volver y estar contigo
Francisco: No es necesario Dulce, ve y descansa, sé que has estado al pendiente y a mi lado siempre.
Dulce: ¿como lo sabes?
Francisco: Pues siento tu presencia y sé como eres amor. Por favor vé y descansa, hazlo por mi y por nuestro hijo.
Alejandro: Por favor mamá, ven descansa con nosotros.
Dulce: Está bien, lo haré.
Tanto Alejandro como yo nos despedimos de Francisco. El panorama era bueno, me sentía optimista por primera vez.
Estuve pensando que luego de esta terrible pesadilla voy a tomarme un tiempo de descanso para dedicarme a mi familia... Siempre he estado al servicio de los demás pero nunca al 100% al servicio de las personas que han estado a mi lado, mi familia. Quiero viajar con ellos, cumplir todo aquello que he postergado siempre, quiero vivir junto a ellos!.
Mientras el taxi nos trasladaba al apartamento podía imaginar al arco iris amaneciendo luego de la tormenta... Mi vida estaba hecha, nuestros caminos trazados, pues ya había hecho mucho por mi vocación de servicio pero muy poco por mi querida familia, aquella que pude formar gracias a un buen hombre como Francisco.
Cenamos plácidamente con Ani, el pequeño Manu y Alejandro. Tanto Ale como Manu se fueron a jugar a la habitación de Ale y, mientras tomábamos un café Ani y yo pudimos platicar en privado...
Anahi: O sea que Francisco algo quiere decirle a Ale sobre su padre...
Dulce: Pues si, algo quiere decirle y no sé que, pero tampoco me atrevo a decirle que quiere decirle no en su estado.
Anahí: Creo que Francisco está haciendo el trabajo que deberías haber hecho tú.
Dulce: Lo siento Ani, aun me duele las palabras de Christopher.
Anahí: Christopher no es el mismo de antes Dulce y tal vez contigo todo se ha terminado pero con Alejandro sabes que no.
Dulce: Christopher no lo sabe.
Anahí: No, no lo sabe y mi mentira lo tendrá entretenido por un tiempo. Lamento haberle mentido pero fue lo único que se me ocurrió para que no se viniera para acá. Además creo que eres tú la que tiene que hablar con él, son cuestiones muy delicadas.
Dulce: Y te lo agradezco amiga.
Anahí: Christopher se va a encambronar conmigo por semejante mentira. Pero por tí y mi sobrino hago lo que sea.
Dulce: Gracias amiga.
Anahí: De nada. Algún día deberás hablar Dulce, porque esto es algo que no has resuelto y cada día que pasa es un día menos que tienes tu derecho a decirle la verdad, algún día tu tiempo de elección expirará y la situación se presentará ante tus narices.
Dulce: Lo sé, tienes razón. Es solo que siento que no se lo merece.
Anahí: Tú sabrás. Bueno amiga, voy a buscar a Manu para ir de mi madre a descansar.
Dulce: Quieres quedarte?
Anahí: No amiga, gracias, mañana por la mañana debo ir a hacer unas compras con mamá.
Ambas nos levantamos para ir al dormitorio y encontrarnos con la escena mas tierna, Manu y Alejandro dormían abrazados. Anahí toma a Manu y yo le llevo su bolso...la acompaño hasta la puerta y espero que tome el taxi.
Anahí: Hasta mañana Dul.
Dulce: Avísame cuando llegues. -Beso a Manu que sigue dormido en los brazos de Ani.
Anahí: Está bien.
Subo al apartamento, lavo lo trastos y observo por la ventana el paisaje de la Ciudad de México. ¿en que momento me convertí en esta mujer? ¿Como se me ha escurrido el tiempo como arena entre los dedos?... No puedo vivir con este rencor que me carcome, Christopher y yo nos hemos hecho mucho daño y de corazón lo único que le deseo es que sea feliz. Miro el paisaje y a la luna, la luna que muchas veces ha sido testigo de nuestro amor y digo...
"Te perdono Chris, te perdono. El amor es así, todo lo perdona, y espero que algún día perdones mi cobardía, espero que algún día pueda atreverme a decirte la verdad..."
Me encuentro en silencio observando la vista desde mi ventana y solamente me des concentra el mensaje de Ani a mi móvil quien me avisa que ya a llegado de su mamá.
Camino hacia el cuarto de Ale y lo observo, es increíble el parecido que tiene a Christopher, cada día que pasa se va convirtiendo en ese jovencito que conocí y del que locamente me enamoré. Me acerco y lo cubro con la manta y acaricio su pelo, vaya! hasta el mismo color tienen, sé que si Christopher lo vé podrá verse reflejado en Ale. De repente Ale con los ojos cerrados dice...
"Mamá, ¿quien es mi papá?"
Un escalofrío me recorre el cuerpo, lo observo y puedo distinguir que está hablando entre dormido.
Dulce: Tu padre se llama Chris y prometo hijo que algún día lo conocerás.
Ale sonrie y repite suamente "Chris"...
Lo beso y me dirijo a mi habitación...Me recuesto pensando en las palabras de Francisco y así me duermo entre sollozos...
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Bastó con mirarte
RomanceDicen que la mirada es el reflejo del alma, de aquello que realmente sentimos. mi corazón late cada vez mas lento pero sigue ardiendo por él