CAPITULO 78

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De pronto se siente un golpe tenue en la puerta del baño...

Señora Dulce!!! ¿está ahí?

Dulce: Fiuuuu, sí!! Rita!!! -shhh es Rita la señora que limpia el apartamento y cocina- Le dijo en voz baja a Chris...

Rita: Perdone que entré la la llave de emergencia pero imaginé que estaría durmiendo, llamé varias veces y al no responder me tomé el atrevimiento...

Dulce: Rita, no hay problema! eres parte de la familia.

Rita: Señora comienzo a limpiar el comedor y la sala verdad?

Dulce: Si Rita, comienza por ahí, gracias.

Los pasos de Rita se alejan...

Christopher: Si era Ale seguramente ya estaría muerto...

Ambos sonreímos, Ale es bien celoso pero también debe estar muchísimo mas sensible de lo común y seguramente todo lo va a llevar al extremo...Christopher se acercó a mi nuevamente y con sus manos me tomó de la cintura para nuevamente besarme pero yo interrumpo ese beso que ya comenzaba a gustarme..

Dulce: ¿Qué haces?

Christopher: ¿Tú que crees?

Dulce: ¿Acaso no oyes que Rita está en la sala?

Christopher: Sí y tu y yo encerrados en el baño de tu habitación...

Sus manos acariciaban mis curvas que se marcaban sobre la toalla, pero sus manos no se quedaron quietas y comenzaron a recorrer mis piernas acariciándolas y aumentando mi deseo ...

Christopher: Ay Dulce, como me gustaría que pudieras verte de la manera que yo te veo, te deseo, te deseo con locura...

Y así volvimos a comernos los labios, nuestras lenguas jugaban entre sí, se acariciaban y la suya recorría mi boca...Christopher detiene el beso y me desanuda la toalla cayendo esta al piso...

Christopher: Ven...

Christopher me tomó de la mano haciendo que mis manos se apoyaran sobre el lavado, el se colocó detrás mío y pude observar como su toalla también caía al piso...Sus manos rozaban mis pezones haciendo que los mismos se erectaran y un dulce cosquilleo me recorriera el estomago y bajara lentamente hacia mi sexo... 

Por el espejo del baño podía vernos del pecho para arriba, el rostro de Christopher con sus ojos entreabiertos besando mi cuello suavemente y yo poniendo mi trasero mas pegado a su sexo y rozándolo para provocarlo mas y mas...

Christopher: Por Dios Dulce,  me estás matando...

Dulce: Tú también con lo que haces con tus manos en mis pechos...

Nuestros roces iban creciendo, nuestras pieles conectaban, cada vez más, ¿será que nunca podremos calmar esta pasión?

Christopher: Lo siento Dulce, no aguanto más, necesito estar dentro de tí ...

Sus dedos bajaron sobre mis muslos y se adentraron a mi ano ...

Dulce: Oye nunca nunca lo he hecho por ahí..

Christopher: Seré cuidadoso amor, yo no te voy a lastimar..

Christopher abrió mis muslos y suavemente fue  metiendo un dedo luego otro y así lubricando mi ano se agacho un poco y con su miembro comenzó a penetrarme...

Un dolor un poco molesto que hizo que apenas me quejara pero él al comenzar a moverse suavemente hizo que me gustara y que fomentara más su ingreso en mi cuerpo...Christopher detecto esa señal y comenzó a moverse más intensamente y a gemir suavemente sobre  mi oído y mientras lo hacíamos abrimos los ojos y nos miramos por el espejo...

Adoro sentirlo gemir y que entrecierre sus ojos un poco para entregarse al placer y por el otro para no olvidar que soy yo quien lo provoca.

Christopher: Dime ¿eres mía?

Dulce: Se, sí.

Dudé un poco en responderle pues lo único que deseaba es que sigamos así y en lo posible que se anime a darme más duro pues con el siento que me entrego y no tengo ya más ni miedo ni vergüenza...

Dulce: y.. yyy. ¿tú eres mío?

Christopher: Soy todo tuyo, todo...

Y así suavemente y sin hacer demasiado ruido gemimos y suspiramos al unisono...

Christopher: Me vuelves loco, me vuelves loco Dulce...

Y cuanto más el decía eso yo más lo invitaba a este juego donde el tiempo pareciera que se hubiese congelado y hoy se reanudara como siempre fue, como siempre ha sido y como siempre será...Para qué negarlo, para que negarle una oportunidad al destino si ya todo lo que no debimos hacer lo hemos hecho después de todo...

Te sigo amando Christopher... Te sigo amando... - Pensé.



Bastó con mirarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora