Nos despedimos del tabernero y de su hija, yo creo que después de que pisáramos la salida ellos ya nos tomaron por muertos.
-No puedo creer que de verdad quieras descender hasta allá, podemos decir que la vendieron ya y que no se puede hacer nada, incluso falsificarla, esos idiotas aristócratas apenas distinguen de una gema con potencial para hextech de una piedra con pintura fosforescente.- Comenté mientras íbamos a la parte más baja del entresuelo.
-¿Crees que no pensé en eso? Joder que sí, pero sé que Caitlyn sabrá que le mentimos, no quiero que se dirija a mí como si fuera una maldita subordinada más, ¿qué se cree?- Se escuchó cómo el metal de sus puños crujía por la fuerza con la que los cerraba.
-¿Entonces me has arrastrado hasta acá por algo personal? Sé que Caitlyn no nos ha hablado en un tiempo pero se le pasará, yo la conozco.- Mi amistad de hace años me hacía sentir muy confiado.
-Eso crees tú, ha cambiado mucho desde que se volvió sheriff, desde que Jinx nos dejó en esa posición su trato con nosotros ha cambiado, no sé si lo has notado. Y a mí no me gusta que me trate distinto...- Su mirada pronto se volvió determinada.
-¿Distinto? ¿Qué? ¿Eres más que la pacificadora de Piltóver?- Pregunté juguetonamente.
-Es complicado.- Sus mejillas se tornaron rojas.- Pero eso no importa de momento, tenemos que seguir.- ¿Qué? Eso me dejó bastante confundido.
Por fin llegamos a la parte más baja, lugar donde están los teleféricos que llevan al sumidero de Zaun, un hombre con más accesorios hextech que humanos nos vio y detuvo antes de que entráramos. 7
-Es peligroso estar por aquí a estas horas, el crimen sale aquí y no tiene miedo en dejar algunos cuantos cadáveres piltillos como escarmiento. Además de que últimamente se rumora que hay algo peor que ellos rondando por allá abajo..- El miedo al decir esto último se notaba fuertemente en su mirada.
-NO creemos en leyendas callejeras, lo siento, apártate o te aparto.- Vi mostró su enorme puño y el hombre sin dudarlo se movió.
La luz del entresuelo se iba apagando por el smog, las nuevas luces que se vislumbraban era más verdes y brillantes. Cuando por fin bajamos del teleférico pude sentir el aire espeso que nos rodeaba.
-Joder, el aire aquí está tan impuro, ya veo por qué por aquí sólo viven las personas que ya no tienen otro mejor lugar dónde vivir.- Mencioné.
-Cállate y trata de preguntarle a ese oportunista de allá si sabe algo acerca de la estatuilla.- Mencionó Vi con tono imperioso.
Con la conversación que tuve con aquél huérfano me enteré de que habría una venta con los barones alquímicos. La idea de tomar un poco de dinero de esto me entró por la cabeza y sonreí, no pude evitar darle un saco con monedas de oro al niño y pedirle que dijera que Jarro Plumaluz iba a ir a la reunión a vender mercancías.
Le comenté mi plan a Vi y ella sonrió.
-Entonces he de dejártelo todo a ti, Ez. Te estaré esperando aquí mismo. No vaya a ser que el teleférico nos quiera abandonar y quedemos aquí atrapados.- Perfecto, estaba más que solo.
El chico volvió rápidamente y me dijo que lo siguiera, pasamos por pasillos completamente estrechos e incluso entre tuberías. Por fin llegamos a una reunión donde se encontraban la baronesa Vekveteen Lenare y el barón Wencher Spindlow, dos personas bastante peligrosas de Zaun. Estaban sentados, casi juntos. Y varios ladrones y asaltantes estaban reunidos mostrando las mercancías.
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Los viajes de Ezreal
FanfictionNo te imaginarías mis viajes alrededor de toda Runaterra, lo que vi en el Vacío, cómo sobreviví a la locura en el desierto de Shurima... ¡No por nada soy el Explorador Pródigo! Postdata: ¡Taric y yo somos amigos! Antes que nada intentaré escribir es...