Los viajes de Ezreal

Capítulo 40:Espera...

Desperté con un dolor de cabeza terrible, los demás seguían dormidos. El sol apenas comenzaba a rozar los árboles y el frío matutino se comenzaba a disipar. Se sentía un ambiente húmedo por la lluvia del día anterior. Sentía algo diferente en mi pecho, la idea de querer traer de regreso los recuerdos de Lux con la daga se había ido. Ahora quería tratar de conocerla como era ahora. Quería saber qué demonios sucedía con Demacia y el resto del mundo. Tenía que regresar.

Sin embargo me detuve a ver el horizonte desde la cima del Placidium, era una vista espectacular al amanecer, Xayah, Rakan e Irelia se unieron para contemplar el amanecer.

-Estas vistas me recuerdan la razón por la que peleo.- Dijeron los tres al mismo tiempo. Irelia estaba divagando, finalmente me vio a los ojos y dijo:

-Es hora de que regreses a casa Ezreal, tu pelea no está en Jonia.- Su voz, su sonrisa dolida llegaron a mi pecho.- Debes ayudar a Demacia, debes ver qué demonios está pasando allá. No creo que sólo nosotros hayamos soñado con Fiddlesticks....-

-¿Hablan de ese jodido espantapájaros aterrador?- Rakan se unió a la conversación.- Hermano esa pesadilla fue de locos. ¡Tuve que abrazar a Xayah para dormir más tranquilo!-

-Cariño, tú siempre me abrazas al dormir...- Mencionó Xayah algo avergonzada.

-¡Sí! Pero sentía más necesidad de hacerlo en ese momento, ¡hasta tú me abrazaste!- Respondió el vastaya.

-¿Entonces todos tuvimos la misma pesadilla? No parece normal...- Mencioné.

-Necesitas hallar la respuesta, y me temo que no se encuentra aquí, con nosotros.- Irelia se levantaba suavemente del risco.

-Nosotros podemos llevarlo.-Mencionó Rakan.- ¿Viste la cantidad de gente que te recibió al entrar a Navori? Te necesitan, si todos tuvieron un sueño similar han de estar espantados y necesitan a su líder, Xan Irelia.- La mirada de Rakan se veía seria, sorprendentemente.- Necesito devolverle el favor de ayudarme a llevarle la cena a mi chica...- Hizo una breve pausa.- Miella, si prometo llegar antes del anochecer, ¿te quedarás a recibir un poco más de cuidados? Se nota en tu mirada que detestas estar aquí, no estamos acostumbrados. Pero en cuanto llegue nos vamos. ¿Qué te parece? Tendré una aventura más con Ezreal y regreso.- Rakan comenzaba a sonreír de nuevo.

-Pero los puertos, digas lo que digas, están cercanos al territorio que Noxus ha reclamado suyo. Pocas veces hemos ido a atacar sus fuertes, ¿sabes bien por qué?- La mirada de Xayah, más que molesta, mostraba preocupación.-Es porque están muy armados y no perdonan a los que han hecho destrozos...- La vastaya tomó la mano de su pareja.-

-Y nosotros somos los que hemos causado los destrozos... Lo sé cariño, pero, ¿cuándo nos han conseguido atrapar? Voy a estar bien.- Me vio directamente.-Sólo voy a asegurarme que nuestro compañero llegue a salvo a alguno de los barcos piltillos. Sabes que no pueden meterse abiertamente con el comercio.- La mirada de Xayah se veía más tranquila. Supongo que a mí también me relajaría saber que mi pareja que parece distraída todo el tiempo sí presta atención a las cosas más importantes.

Xayah lo llevó hacia sí, y lo besó largamente. Irelia y yo tuvimos que voltear la mirada, ella me abrazó de repente.

-Gracias, me has ayudado a recordar lo que hago. Y espero que si el destino nos vuelve a hacer encontrarnos, podamos compartir nuestras experiencias, además de que aprendas a bailar mejor.- Soltó una pequeña risa.

Yo continué abrazándola hasta que Rakan  me interrumpió. Era hora de continuar con el viaje que había empezado hace unos años.

"Y pensar que todo empezó con esa aventura en la alcantarilla con Caitlyn" Pensaba mientras abandonaba el templo junto a Rakan.