Capítulo 26: De vuelta a la acción.

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Fue complicado explicarles lo que sucedió a todos los que nos vieron en esa posición. En primera porque no se creían que Jinx había burlado toda la seguridad que resguardaba a Vi, en segunda y cito: "Eres tú, creo que puedes seducir a cualquier mujer que te encuentres"- guardia de Píltóver. (Creo que tiene razón)

Caitlyn se distanció de nosotros unos días, supongo que la noticia no le agradó del todo; pero la vida continúa y si tu mejor amiga está celosa porque se enteró que estabas con su acompañante en una cama de hospital pues... lidias con ello, supongo.

Seguía escribiendo artículos en contra de arqueólogos fanfarrones cuando escuché que alguien tocaba la puerta de la mansión, me sorprendí porque la noche ya estaba muy avanzada.

Era Vi.

-Necesito de tu ayuda.- No había ni terminado la oración y entró imperiosamente.

-¿Qué sucede? ¿Se te perdió alguna pieza de museo?- Por alguna razón no puedo evitar lanzar comentarios estúpidos.

-Algo así, nos enteramos de que un zaunita le robó un artículo de colección a un burgués y me mandaron a mí a solucionar el problema, pero no sé identificar objetos tan estúpidos. Necesito que vengas a Zaun conmigo.-

-¿Sin más? Estaba escribiendo y...- Nunca me dejan hablar, me tiró del brazo y me sacó a la calle.

En unas horas llegamos caminando a la frontera entre Piltóver y Zaun, básicamente teníamos tres posibles lugares para encontrar la pieza: El Malecón, donde la clase alta de Zaun vive y come; El Entresuelo: la parte industrial y donde casi todos habitan y por último el Sumidero: Es un ambiente oscuro y tóxico donde desgraciadamente algunos tienes que trabajar y arriesgar sus vidas.

Tomamos las escaleras hacia el Malecón.

-¿Crees que esté aquí? Hay demasiada gente a pesar de la hora que es...- Mencionó Vi mientras quitaba a la gente con sus enormes manos hextech.

-¿Te dijeron si ese objeto era Hextech o tenía que ver con magia?- Temía la respuesta.

-Se supone era alguna especie de reliquia mágica shurimana.- La respuesta hizo que se me revolviera el estómago.

-No está aquí arriba en ese caso, si quieres vender algo robado y que probablemente vaya a ser buscado debes irte más abajo...-

-¿Te refieres al Entresuelo?- Me preguntó molesta.

-Si tenemos suerte y el que la robó no estaba tan necesitado, sí. Si no... deben estarla contrabandeando en el Sumidero. Y no sé si hay que temerle a los aristócratas piltovianos o a los barones químicos- Contesté, en mi cabeza tenía alguna especie de combinación entre nervios y ganas de aventura, me estaba cansando de sólo discutir con arqueólogos.

-¿Tendremos que bajar hasta allá y poner nuestras vidas en riesgo por una estúpida figurita?- Vi comenzaba a  irritarse más. Pero por fin suspiró y su mirada cambió.- Menos mal que conozco este lugar.- Sonrió.- Vamos, creo saber quién nos puede dar alguna pista.-

Descendimos cada vez más hasta llegar a las calles artificialmente iluminadas del Entresuelo, el aire se sentía más contaminado y espeso, además de que había una especie de neblina creada por los gases de las fábricas.

Por fin llegamos a una taberna que estaba llena. Me sorprendió mucho ver el uso tan cotidiano de la tecnología hextech, claro, es mucho menos elegante y refinada que la de Piltóver, pero es muy funcional. Había personas con una o varias extremidades mecánicas, cuerpos completos o algunas ligeras modificaciones en las manos o en los pies para poder ser más eficientes en los trabajos.

Nos acercamos a la barra, no pude evitar sonreírle a una mesera que no tenía ninguna modificación hextech. Hasta que una jarra golpeó secamente la madera de la barra y el tabernero, un hombre fornido y con barba de candado me miraba furiosamente.

-Quítale los ojos de encima a mi hija.- Me gruñó.

-Oye, es sólo una sonrisa, mírala, también me sonríe de vuelta.-

-Debes ser un hijo de puta muy valiente o un piltillo que no sabe dónde se encuentra...- El sujeto comenzaba a ponerse algo molesto.

De repente un puño hextech cayó entre nuestros rostros e hizo que el tabernero mirara furioso a la persona que nos interrumpió, pronto su rostro cambió y sonrió de oreja a oreja.

-¡¿Qué haces aquí?!- El hombre se salió de la barra y fue directo a abrazar a Vi.

-Tenía que visitarte, jefe.- Sonrió y le devolvió el gesto. Mientras tanto la mesera comenzó a servir las bebidas.

-Tenía tanto tiempo sin verte, ¡mírate! ya nadie se atrevería a meterse contigo.- Comenzaban a hablar como si no hubiese nadie escuchándolos.

Después de haber estado escuchando la conversación durante un largo tiempo, haber hablado con la mesera y ver cómo todas las personas pagaban  y se iban, por fin Vi hizo la pregunta importante.

-¿Nos puedes decir dónde podemos hallar esta pieza?- Vi tenía una maldita fotografía del objeto y no se le ocurrió mostrármela...

-Seguramente vale una fortuna, y creo que no sería la primera vez que un barón químico envía a un oportunista a robar cosas de valor de algún aristócrata.- Hizo una breve pausa, como si estuviera analizando la situación.- No has de estar pensando en ir al Sumidero, ¿verdad? Ese lugar se ha vuelto un completo infierno, sobre todo por los callejones grises...-

-¿Qué hay con ellos? Sé que ahí se suele concentrar toda la escoria de Zaun pero no son tan peligrosos.- Mencionó Vi.

-Hay algo rondando las calles bajas del Entresuelo y el Sumidero, muchas personas han muerto de manera brutal, dicen que es la mismísima  Furia de Zaun encarnada la que ha provocado estas muertes.-

Oh mierda, aquí vamos de nuevo...

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Hola a tod@s, disculpen por la tardanza en escribir nuevos caps, la universidad me agarró por sorpresa y he tenido que ir a algunos cursos de inducción 9w9 estoy jodidamente cansado pero no quiero dejar de actualizar por ningún motivo, gracias a todos los que me leen por esperar y por seguir aquí apoyando. Les mando todas las energías que me quedan a aquellos que están por volver a clases y felicitaciones a los que acaban de salir.

Los quiero a todos.

Los viajes de EzrealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora