Me miró a los ojos y cambió de actitud, parecía estar analizándome de pies a cabeza. Ella seguía usando aquella combinación shurimana/noxiana tan particular, su vestimenta la hacía destacar de entre el resto de aventureros y comerciantes.
-Tú pareces de Shurima, dime, ¿qué tal es Bel'Zhun?- El nombre de aquella ciudad me hizo sentir demasiadas emociones.- Dicen que es ideal para el comercio.-
-¿Cómo supiste que soy de Shurima?- Estaba asombrada.
-Tu vestimenta y tu forma de hablar te delatan.-La hice a un lado para poder salir del lugar, supe que había dicho de más.
-¿En serio? Por que también tengo algo qué decirle...- Gracilmente se volvió a parar frente a mí, sus hermosos ojos esmeralda brillaban fuertemente.
-No creo que una... viajera tenga algo que decirme.- No le importó, de hecho comenzó a guiarme hacia una pared, sin que me diera cuenta me hizo caer en su baile.
-Me resultas atractivamente familiar...- Comentó.- Me recuerdas a alguien que me hizo salir de Shurima y comenzar una vida nueva.-
-¿Sí?-Pregunté con nerviosismo.- Seguramente habrá sido alguien demasiado...-
-Apuesto.- Se acercó a mí.- Valiente.- Retrocedí un poco más, pero una columna me detuvo.-
Se lanzó a mi cuello y me besó. Tenía años que no nos veíamos.
-¿Eres "Jarro Plumaluz" o Ezreal en estos momentos?- Susurró a mi oído, casi mordiéndome el lóbulo, seguía preso entre su cuerpo y la pared. - En cuanto vi tus ojos sentí que eras tú. Aunque te ves tan... diferente.-
-Pareciera que intentas seducirme, Alish, toda la gente de este banco nos está mirando.- Intenté hacerla a un lado.
Un hombre corpulento interrumpió, para mi suerte.
-Disculpen, ese tipo de acercamientos son más comunes en el Wyvern Dorado. Están interrumpiendo transacciones demasiado importantes.- Una rápida inspección a este hombre me hizo saber que era un miembro de la Legión.
-Disculpa, me emocioné un poco al ver a un conocido.- Alish se alejó lentamente de mí.- Gracias por recomendarnos el Wyvern Dorado, pero no creo que tengamos el oro suficiente...-
El soldado se soltó a reír.
-¿Me estás diciendo que estabas encima de este muchacho sin saber quién es él?- Me señaló rudamente.- ¡Es Jarro Plumaluz! Llegó en un basilisco sin cuernos y obtuvo una fortuna en cuanto pisó este lugar!-
La cara de Alish palideció enormemente.
-¿T... tienes acceso al Wyvern Dorado?.- Su sorpresa era demasiada.
-Sí, ¿qué tiene de sorprendente?- Pregunté.
.¿Que qué tiene de sorprendente?- El legionario pronto se frotó la cara en señal de frustración.- No puedo creer que esté tratando con dos idiotas.- Nos miró con fastidio.
-Lo que él quiere decir, Jarro.- Me guiñó el ojo, en señal de entender que ese era mi nombre ahora.- Es que el Wyvern Dorado es para la élite noxiana. Sólo las personas más importantes y ricas pueden entrar a negociar y a disfrutar de los lujos que puede ofrecer.-
-Oh, entonces, si ese es el caso...- Comencé a sentir demasiadas miradas sobre mí, la idea de pasar como incógnito había quedado pisoteada.- Es hora de que mi amiga y yo nos vayamos a un sitio más privado. Con permiso.-
![](https://img.wattpad.com/cover/64285593-288-k504727.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Los viajes de Ezreal
FanfictionNo te imaginarías mis viajes alrededor de toda Runaterra, lo que vi en el Vacío, cómo sobreviví a la locura en el desierto de Shurima... ¡No por nada soy el Explorador Pródigo! Postdata: ¡Taric y yo somos amigos! Antes que nada intentaré escribir es...