Capítulo 53 - Under pressure

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Varios segundos pasaron con Juliana pacientemente esperando a que Valentina recapitulara su discurso, segundos de intenso contacto visual. De las medidas de tiempo más pequeñas que existen pero que se sintieron como siglos para Valentina. El nudo en su garganta, producto del natural miedo a perder a la única persona en su vida que la llenaba de luz y calor no la dejaba pensar con mucha claridad y mucho menos elaborar un discurso coherente, cosas que nunca le resultaron naturales de todas formas, mucho menos con lo que sentía que estaba poniendo en juego.

"Amor..." Apenas susurró Juliana intentado, con bastante éxito, captar la atención de su novia. La morena sonrió desbordando ternura como no lo había hecho hasta el momento y estrechó aún más su agarre en esas preciosas manos que estaba sosteniendo, acariciandolas suavemente. "Morrita... sabes que puedes confiar en mí verdad?" Agregó desprendiendo toda la calidez que era capaz de transmitir en ese instante.

Valentina instintivamente comenzó a relajarse apenas se sumergió en esos profundos mares color café, ese territorio que ya le resultaba tan familiar y sin embargo del que le faltaba tanto por explorar. Todo con Juliana le había parecido fácil hasta ese momento, hasta las cosas que siempre le resultaron complejas la morena se ocupó de hacerselas sencillas. Cosas como la cercanía, la intimidad, dejar entrar a otra persona, permitirse sentir una y mil cosas por alguien más. Todas cosas que no solo no estaba dispuesta a perder, ya no concebía estar deprivada de ellas.

"Juls... pues yo... necesito contarte algo... " Valentina tímidamente concedió, quitando esos hermosos ojos de cielo de los de su morena. Intuitivamente posó su mirada en sus manos entrelazadas y su corazón se derritió tantito para luego volver a estrujarse.

"Qué pasa amor?" Juliana volvió a insistir ya comenzando a preocuparse. Valentina estaba acariciando esas manos que tanto calor le transmitían y que sentía le habían dado tanto en tan corto tiempo, desde las melodías más hermosas que había escuchado en su vida hasta el placer más intenso que era capaz de experimentar. Se llevó las manos de Juliana aún entrelazadas con las propias a sus labios y depositó un sentido beso en cada una.

La rubia respiró hondo, como cuando se está al tanto de que se percibirá dolor, y volvió al contacto visual. Juliana aún seguía en la espera de algún tipo de explicación al brusco cambio de clima en ese inmenso sofá.

"Es que tengo que explicarte algunas cosas... especialmente sobre mi familia y pues... ya tu sabes cuanto me cuesta decir las cosas..." Y que tu me oigas como quiero y necesito que me oigas... Valentina por obvios motivos no verbalizó esas últimas palabras dándole el tiempo justo a Juliana para interrumpirla.

"Val es que la neta... no tienes que apresurarte... yo no... pues realmente yo no necesito que..." Juliana estaba luchando por lograr que el vocabulario adecuado escapara sus bonitos labios y que su novia no malinterpretara sus intenciones.

"Tu eres lo mejor que me pasó en la vida Juls..." Valentina soltó esas palabras interrumpiendo a su cocinera, palabras que provenían desde el centro mismo de sus sentimientos y sin siquiera intentar disimular todo lo que la morena le provocaba.

Los ojos de Juliana nuevamente se inundaron de ternura extrema, y cómo evitarlo si la mujer que poco a poco se iba transformando en el amor de su vida le dedicaba esas palabras, con el tono de voz más dulce del mundo y esos ojitos de un celeste cristalino llenos de amor.

"Sabes que siento lo mismo y tanto más por ti Valentina Carvajal..." Apenas susurró la morena inclinándose con una única dirección ya trazada, pues esos labios ya se habían convertido en su centro gravitacional casi tanto como su dueña.

Valentina supo de inmediato lo que seguiría a continuación y no pudo encontrar un sólo átomo en todo su ser capaz de resistirse a su cocinera. Sabía que tenía que hablar, sabía que disponía de muy poco tiempo para aclararle a su morena exactamente quién era y a qué se sometería Juliana por el simple hecho de existir en el mundo Carvajal.

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