14.

664 67 19
                                    

— Mamá... —susurró, esperando a que la mujer le prestase atención para continuar—. ¿Puedo hablar contigo?

— Habla —se sentó en su cama y el chico entró, cerrando la puerta—. Apúrate, que no tarda en venir tu padre y no querrá verte aquí.

— Claro... Ah, no quiero que me sientas en tu contra o algo, solo quiero saber... ¿qué opinas realmente de Jungkook?

— ¿A qué te refieres?

— Por Dios, ya sé que tú nunca aceptarías un hijo gay. ¿Por qué tratas a Yoongi como si fuese tu propio hijo? No lo entiendo.

— Ah —rió suavemente—. Los gays son solo chicos confundidos, sé que se le va a pasar.

— Mamá, tiene 20 años. Eso lo usan con chicos de 12, tal vez, pero Jungkook sabe muy bien lo que quiere.

— Ajá, ya le darán ganas de tener hijos algún día y buscará una chica, no te preocupes —sonrió.

— ¿Y si eso no pasa?

— Va a pasar.

— Se ve tan feliz con Yoongi, no creo que quisiera dejarlo por no poder tener hijos. Existe la adopción, ¿sabes?

— Pero nadie quiere adoptar, Seokjin. No sabes qué clase de genes tendrá ese niño, podría ser hijo de un asesino y...

— Estás diciendo estupideces —le interrumpió, no quería escuchar aquel tonto pero tristemente común discurso.

— No puedes hablarme así.

— Jungkook no dejará a Yoongi y si vine a hablar contigo, es porque está más que claro que no lo dejarías ser; solo digo, no voy a permitir que le quites a tu propio hijo lo que más quiere, ¿bien?

— Tú lo dijiste, es mi hijo y yo sé lo que hago, es por su bien.

— Tiene 20 años.

— Sigue siendo mi hijo. Mis amigas dicen que tengo un corazón enorme por aceptar un hijo gay, debería haberlo echado de mi casa, pero lo sigo teniendo conmigo mientras se da cuenta de su error. Además, tú sabes, tenerlos aquí evita que intenten hacer algo ese par de pervertidos, no soporto la idea de que Jungkook pudo haber hecho algo así con él mientras no estaban bajo mi supervisión.

— ¿Te estás escuchando? —hablaba tan dolido, pues no encontraba la más mínima pizca del dolor que su madre expresaba mientras Jungkook no estaba. No entendía cómo es que aquella mujer había vuelto a ser así, tan insensible, luego de haberlo recuperado. ¿Solo le importó cuando lo perdió?

— Es la verdad.

— ¿No ansiabas tenerlo de vuelta?

— Lo quería solo, no con él.

— Me dijiste mil veces que vivías esperándolo, creí que lo querrías sin importar algo como eso.

— Lo esperaba como alguien renovado, más enfocado a sus estudios y sin tantas salidas inútiles con ese par de chicos que nunca le dejaban. ¿Sabes? Estoy segura de que solo estaba con ellos por sus... idioteces de chico gay. Para aprovecharse de mi confianza y hacer... cosas con ellos. Estoy tan asqueada.

— Jungkookie merece ser feliz, aunque eso signifique no cumplir con tus deseos. Deja de verlo como si se acostase con todo hombre que conoce.

— Seokjin, dime, ¿tu quieres crecer y ver que tu hermano se quede estancado en una relación homosexual? Será una burla, la oveja negra de la familia.

— Quiero crecer y ver que sigue sonriendo tan brillante como lo hace ahora.

— No necesita a ese chico para sonreir.

Disasterology 윤국 YoonKook • Donde viven las historias. Descúbrelo ahora