Sentí sus brazos alejarse de mi cuerpo, salió de la habitación sin emitir ninguna palabra.
¿Me había pasado?
Si.
Salí de la cama y baje las escaleras que daban al living, no había rastros de él por ningún lado y fue ahí cuando entendí que solo estaba aquí porque había discutido con los chicos los cuales ahora están estresados por su regreso.
Y si me había molestado con él porque se puso celoso de mi mejor amigo y cuando una chica que entrena en su agencia lo coqueteaba descaradamente me había molestado pero me dijo que no tenía porque, supuestamente yo había mal interpretado las cosas.
Bien, no me pareció eso, porque el si puede celarme y yo no. Me parecía muy injusto, además hoy había tenido un problema en el trabajo por mi salud y estaba molesta por no hacer bien mi trabajo pero yo tampoco debí tratarlo así cuando el buscaba un poco de cariño en mi y lo mandé por lo molesta que estaba.
Lo llame pero no contestaba, llame a uno de los miembros pero no me dieron noticias de él.
Mis lágrimas comenzaron a aparecer cuando el reloj marco media noche porque no pude perdonarlo y ya, fue una pelea tonta.
Estaba acostada en la cama pendiente de mi teléfono y la hora del reloj.
La puerta de mi habitación se abrió y entonces pude ver su cabellera ahora castaña, podía ver sus pecas gracias a la luz de luna. Solo fueron unas horas pero pareciese que no lo hubiera visto en días.
— Perdón, pensé que estabas dormida — cogio su pijama, una almohada y una cobija — Buenas noches.
— Félix espera — me miró confuso y cuando prendi mi lámpara pude ver qué tenía los ojos hinchados — Bebé, ¿Has llorado?
Asintió con un puchero en sus labios.
— Estas molesta conmigo por mi torpe actitud esa vez y estaba en todo tu derecho de ponerte celosa pero tampoco quería que pensarás que ella me gusta porque no es así. Si me di cuenta de cómo me coqueteaba pero lo ignoraba, enserio. No creí que la discusión de ese día seguia hasta hoy. Lo siento tanto.
— Mi pequeño gato bobo, yo también lamento todo, pero mírate ¡Eres guapísimo!
— Rio — y tú hermosa — sonríe
— Ese no es el punto, enserio lo siento. Yo debía estar ahí para ti decirte que fue una discusión con los chicos por todo el estrés que se cargan y que todo se resolverá pero en lugar de eso te grite y pedí que me soltarás cuando lo único baje buscabas en mi era acurrucarte como siempre lo haces. Perdón, lo siento mucho.
— Hermosa — beso mi mano — fue una pelea tonta
— Lo fue, perdón me siento terrible por esto.
— Tranquila.
— ¿Por qué llorabas?
— Porque también me sentí mal, la discusión con los chicos y también la discusión que tuve contigo, mi enojo se esfumó y me desahogue llorando porque por ambas partes fue una tonta pelea.
Me acerque a él y besé su mejilla.
No iba a mentir, todavía me sentía mal por eso.
Pase mis brazos por su torso y me pegue a él como un osito panda abrazando a su Bambú.
Me rodeo con su brazos y beso mi cabeza, durante días había extrañado esto, porque si, hace día que no nos veíamos y hoy que vino lo trate tan mal.
— Perdóname
— Ya paso, tranquila.
— baby Lix . Te quiero mucho.
— No utilices ese apodo, es muy... Meloso
— lo mire mal — Lee Félix te quiero mucho
— Me quedó con el baby Lix
Rei.
Me acerque a su rostro y besé cortamente sus labios. Creando un beso tierno entre ambos. Se sentía tan bien.
Halo mi labio inferior y termino el beso riendo.
Fui tan mala con él que durante toda la noche pasamos abrazados y dándonos mimos para que nos durmieramos pero solo terminabamos riendo. Y me gustaba porque con el lo tenía todo. Cariño y mucha felicidad porque Félix puede aparentar ser rudo pero en realidad es una persona muy sensible y amorosa. Algo que hasta ahora no me ha molestado.
Por el simple hecho de ser mi pequeño gato bobo.
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Vieron a Félix con el cabello negro, es bellísimo.
Espero que les haya gustado creo que me salió muy dulce el episodio perdón. Jeje nos leemos el próximo. Voten y denle mucho amor. Gracias 💖🥰
