El Primer Paso Para Sanar

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Toque el timbre y me abrió Conrad.

Que hago aqui?

-diga?

-buenas tardes Shinobu, un gusto hablarte hermanito

Suspiré pesado.

-sucede algo?

-ah, quería invitarte a comer aprovechando que papá ha llegado anoche, para ponernos al día... Mira, se que no somos muy cercanos pero desapareciste medio semestre y no sabemos nada de ti. Ven a comer prepararé un festín... Me la debes hermano, papá y You estaban necios en ponerte el satisfactorio pero los convencí de que admitan tu trabajo... Se lo importante que es para ti.

-....

-shinobu?

-eh... A que hora?

-Joven Shinobu! Bienvenido a casa.

-ha pasado un tiempo Conrad- dije sonriendo.

-Lorelei se pondrá muy contenta...y tu... Tu padre también--mintió

-con permiso-dije fríamente y entre.

-hola hijo-dijo mi padre bajando las escaleras y Risako entró al vestíbulo sonriendo.

Es un ambiente  sombrío.

Pasamos al comedor y nos sentamos a comer.

-qué tal va tu tesis?

-bien, solo un par de correcciones más y estará listo--dije con la mirada en la comida.

-estas seguro de que terminaras a tiempo?

-si, tendré el trabajo listo y continuaré mis estudios allí.

Risako y mi padre se miraron un segundo.

-shinobu hay algo que te queríamos preguntar...

No les mire y seguí comiendo.

-porque te molesta tanto mi compromiso con You?

Me quedé congelado un segundo.

Me encogi de hombros.

-hijo, responde.

No dije nada.

-hermano... Actúas como si te gustara You... Eso es gracioso-dijo divertida con un tono inocente- eran tan cercanos que, me extraño que te enfadaras tanto por el compromiso... - dijo y lanzó una risa tímida.

Oh hermana si tan solo supieras.

-no, no me gustan los viejos... No se me dan esos fetiches--dije en tono burlesco recordando las palabras de Takano.

Mi padre lanzó una carcajada un poco fingida y Risako Lucía incomoda.

-nada en especial...nos llevamos... Relativamente bien pero, Aunque no me lo creas, me preocupa mucho que se trate solo de un juego para Miyagi-kyoju, sabes en que condiciones terminaron... Yo te aconsejo que tengas tus precauciones, nee-san- dije terminando mi bocado.

Ella sonrió igual de incomoda y agradeció que me "preocupara" por ella.

-porque te ausentaste después del compromiso?

-no se los dije pero, tuve una relación que no me hizo nada bien, una ruptura algo difícil y tuve problemas... Lamento haber actuado de esa forma--dije con frialdad.

Mi padre meneo la cabeza y me dedico otra de esas falsas sonrisas.

-hijo ninguna mujer merece que sufras de esa forma...

Para Volver A AmarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora