15.- Respuesta

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— ¿Q...qué estás haciendo? — Pregunto con cara de póker sintiendo tu mano dentro de su short.

— No te referías a esto, ¿verdad? — Él negó volviéndose un tómate, que te trague la tierra.

— ¿Podrías quitar tu mano, sucia degenerada? — te pidió amablemente, cada segundo tocandolo aumentaba su temperatura corporal como agua hirviendo.

— ¡PERDÓN, PERDÓN, PERDÓN! — casi haces una reverencia, muy en el fondo querías hacerlo de todos modos. — ¿A qué tipo de tocar te refieres entonces?

—  Ah, es que, cuando te conocí me acariciaste la cabeza con mucho cariño porque pagué tu deuda y... pensé que si hacía más cosas buenas por ti me darías más de "eso". — reveló con pena cubriéndose el rostro — pero no importa lo que haga, no puedo ganarme nada de afecto de tu parte. Esa es la verdad, no quise decirtelo porque era muy vergonzoso para mí y dirías que soy un pervertido.

Todo el tiempo habías estado evitandolo para no generar más heridas en tu corazón, a causa de eso, le provocaste una herida al único chico que se había fijado en tí, tienes el talento del papel higiénico, siempre la cagas.

— Oh, Killua... a mí me dió mucha vergüenza ese día. — era sorprendente saber que él te siguió hasta tu casa, se metió bajo tu cama, te pidió ser su novia y te salvó de un agresor sólo por una caricia — pensé que había hecho el ridículo pero... la verdad siempre tengo ganas de volver a mimarte, tonto. — lo abrazaste fuerte logrando hacer que sus lágrimas terminaran de salir — Eres como un gatito, perdón por no decirlo antes, no sabía que buscabas el cariño de alguien, si no lo dices, no adivino, enserio, soy muy tonta a veces.

— Entonces, lo que dijiste hace rato, ¿aún quieres que me vaya?

— La verdad... nunca he querido que te vayas. Las cosas no son lo mismo sin compañía. Y... ya tengo una respuesta a tu pregunta.

— ¿Cuál pregunta? — cuestionó desconcertado, no recordó haberte hecho una pregunta reciente, entonces le provocaste lo más parecido a un infarto con tu respuesta.

— Sí quiero ser tu novia.

— Ah, sí... eso era broma.

Tu sonrisa se borró dando más miedo que una mirada asesina.

— Hijo de la gran...

Ese compa ya está muerto.

Alto ahí, gatito [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora