74.- Aprobación

1.3K 193 89
                                    

Empuñó sus manos y reunió todas sus fuerzas emocionales para no quebrarse en llanto nuevamente. Aunque deseaba desaparecer de inmediato, sus piernas y su corazón se rehusaban. Había estado buscándote por tantos días y se aseguró de que estuvieras a salvo, pero al verte correr peligro empezó a dudar en lo que quería al principio.

Por suerte, había alguien que lo hizo entrar en razón.

— Un Zoldyck cumple su palabra. — reprendió tu madre al albino. — nos pediste algo a cambio de salvarla y te damos nuestra aprobación.

Killua pensaba que no le darían importancia a esas palabras una vez que estuvieras con ellos, sin embargo, al mirarlos de frente, descubrió que siempre estuvieron concientes de ello.

— Cambié de opinión, fué un arrebato egoísta, no tienen que hacer nada por mi, sólo asegúrense de que sea felíz. — pidió con un obvio tono doloso que te hizo enojar.

— ¿Es que no lo entiendes? — cuestionabas rompiendo con el nudo en tu garganta — desde el día en que llegaste a mi vida, por si no te diste cuenta, ya era felíz, ¡no me pidas que me vaya y continúe siéndolo cuando tú eras parte importante de eso! y para que sepas, ¡tampoco quiero que ser tu esposa sea una mentira! ¡ya lo dijiste! ¡asumiré la responsabilidad! ¡quiero meterme en problemas mil veces con tal de estar contigo! lo repetiría de nuevo si pudiera porque vales cada maldito minuto, ¡¿oíste?! ¡TE AMO KILLUA ZOLDYCK!

Caíste de rodillas al ver que no reaccionaba, su rostro cabizbajo impedía que vieras su expresión, tus lágrimas nublaban la vista y de repente ya no lo viste frente a ti. Había desaparecido, como si no le importaran tus súplicas.

Te limpiaste las lágrimas pero cada vez salían más, pero tu corazón casi se detiene al escuchar su voz tan cerca de tu oído.

— ¿Tienes acaso una mínima idea de lo que me estás pidiendo? — su respiración era suave y su expresión un tanto amenazante, parecía molesto, hasta que dijo lo siguiente — despídete, nos vamos a casa.

Tardaste en entenderlo, miraste a tus padres, ellos asintieron, lo sabían, aquello sólo era un acto para asegurarse de que estuvieras de acuerdo y quedó más que claro.

Killua prometió salvarte y protegerte a cambio de la aprobación de tus padres.

Para casarte con él.

— Y por si las dudas, — levantó tu mentón para darte un suave beso, el cuál había estado ansioso por darte — yo te amo más.

Fin de temporada 2

Alto ahí, gatito [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora