62.- Enfrentando miedos

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Llevaste al pequeño a tu habitación, acariciándolo mientras este yacía dormido por la anestesia.

— Voy a ir por tu padre a su trabajo, ya vuelvo, ¿sí? — dijo tu madre palmeando tus hombros antes de irse.

Una vez que ella se alejó en el auto, decidiste aprovechar la oportunidad. Te dirigiste a recoger el objeto que dejaste en el suelo, revisaste bien el pasillo y no aparecía.

— ¿Buscabas esto? — llamó tu hermano mostrandote el cuchillo de cocina que ahora estaba en sus manos. — Cruzaste la línea y adivina qué, la policía ya viene por ti. — reveló riéndose satisfecho.

Era cuestión de tiempo para que ese idiota sacara la lengua a relucir, pero ya no serías considerada, esta vez la ibas a cortar.

— Gracias por hacerme el favor, querido hermano — sonreiste acercándote a él sin temor, tus ojos casi irradiaban la sed sanguinaria que te dominaba — pero olvidaste llamar también a los forenses.

Lejos de ahí, en lo alto de la montaña más temida, un empoderado asesino, abrió todas las puertas de la entrada principal.

Previamente los guardias y mayordomos avisaron a la familia de su llegada, por lo cuál, al entrar a la mansión, todos estaban reunidos para recibirlo.

— Bienvenido a casa, Killua. — dijo Silva Zoldyck, su autoridad principal.

— ¡¡¡Oooohh!!! mi pequeño Killua, ¡¡has vuelto a casa!! ¡estabamos tan preocupados de que no pudieras regresar! — decía Kikyo, su madre, que era más escandalosa y dramática que  la tuya.

— Bienvenido, hermano. — dijeron al mismo tiempo Illumi, Milluki y Kalluto, rindiendo honores a su regreso.

Todo parecía arreglado como si fuese una ceremonia, Silva llamó a Killua para hablar en privado.

Él esperaba ser recibido con un fuerte castigo, con regaños y desprecio. Al igual que tú, se llevó una sorpresa al ver que no era como pensó.

Cuando las puertas se cerraron y en el salón interior no había nadie más que ellos. Silva le ofreció sentarse en un amplio sofá y a continuación tomó lugar a su lado.

— Felicidades, Killua.

— ¿Eh?

— Tomaste la decisión correcta al volver, eso significa que reconsideraste la propuesta que te hice. — dijo Silva orgulloso.

— Propuesta... ¿lo que dijo mi hermano? — recordó Killua el momento en que Illumi le dijo algo que olvidó.

— Así es, tomarás mi lugar muy pronto y como cabeza de los Zoldyck, deberás continuar con el legado asegurando la sangre de nuestra familia para las futuras generaciones.

— ¿Cabeza... de familia? — repitió incrédulo completando la frase de Illumi, ahora su memoria se había restaurado.

"Dijo que eres el siguiente a la cabeza, si vuelves significa que aceptaste el cargo"

— Sin embargo, hay una sola condición para que puedas comenzar a dirigir tu posición — comentó Silva con seriedad haciendo que su hijo tragara saliva.

Killua sonrió incrédulo ante lo que escuchaba, recibió aquella noticia como una nueva esperanza y una señal de que podría volver a verte.

— debes buscar una novia para casarte.

Alto ahí, gatito [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora