𝑺𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝑬𝒓𝒆𝒔 𝑻𝒖́.|𝙷𝚊𝚛𝚛𝚢.𝙿|+18

Capitulo 8

Narra Harry

Sali de la tina con Karol enredada en mi cintura, salí de el baño hasta la recamara de Karol, entre besos y caricias, cuando llegue la baje cerré la puerta detrás de ella quedando a centímetros de sus libios, en verdad me volvía loco viéndola desnuda encima de mi me trate de controlar pero diablos no puedo, me beso me tenia agarrado de la nuca yo tenia mía manos a cada lado de ella, no duraron mucho allí bajaron a su desnuda cintura, se colgó de nuevo en mi, y la lleve a la cama sin dejar de besarnos, la deje con quedado en la cama, ella quedo recostada y yo estaba en el borde de la cama tenia sus piernas enredadas en mi cintura. Nuestros sexos chocaban y los dos mordíamos nuestros labios para amortiguar el gemido.

- Ha-Harry A-Ah- gimió cuando mis labios rozaron su cuello, bese su clavicular con calma y delicadeza sentía como se estremecía ante mi toque, sus labios se estaban entre abiertos pero no emitida ningún gemido.

Mis besos bajaron con calma dejando un camino húmedo de besos desde su clavícula hasta el comienzo de sus pechos, ella jugaba con mi cabello y de ves en cuando soltaba gemidos agudos. La mire a los ojos esperando su aprobación, ella lo entendió y solo asintió, lleve uno de sus pezones a mi boca saboreándolo ella gemía sin control alguno lo que hacia que me excitara más, los probaba los saboreaba, en algún momento del que no me di cuenta quede abajo de Karol, vaya sorpresa me lleve, tenia sus piernas a cada lado de mi automáticamente puse mis manos en sus piernas, tenia una mirada dominante, entonces lo entendí hoy quería ser la dominante.

- No creo que lo puedas manejar- dije burlonamente, ella río por lo bajo agarro mis manos las cruzo y las puso detrás de mi, yo reí por lo bajo no lo podría controlar trate de quitar mis mano pero estaban atadas, me miro burlonamente que a hecho, tenia una expresión de confundido, ella quito las manos y trate de zafarme pero no podía esta llena de sorpresas.

- Que decías- dijo parándose de mi, yo sonreí no debí de retarla, agarro una toalla y se seco seguíamos mojados.

- Que piensas hacer- pregunte pícaramente, ella volteo y río, se fue de la recamara yo quede confundido escuche otra puerta abriéndose y unos pasos apurados de regreso, traía una poción, que rayos era eso me esta asustando.

- Tranquilo no es nada malo- dijo mirándome, creo que vio mi cara se terror después de su comunicado relaje mi expresión.

- Mi hermano lo usa, me lo a recomendado, nunca creí que lo usaría, es gracioso sabes mi hermano recomendándome cosas sexuales- dijo graciosa a lo que sonreí.

- Esto es una poción que hace que dupliques el placer, el orgasmo es tan fuerte que puedes llegar a olvidar tu propio nombre, seria una pena que perdieras el conocimiento- dijo divertida, o no lo quería probar en mi no, no, no, yo trate de desatarme pero no podía.

- No te atreverías- dije retándola de nuevo, no fue buena idea.

- Cuanto quieres perder- dijo acercándose a la orilla de la cama.

Fue a mi pies y los ato, genial esto esta mejorando.

- Hoy querido Harry no sacaras tu lado dominante, hoy no, hoy serás sumiso, hoy serás MI sumiso- dijo recalcando el mi, claro que estaba excitado pero también tenia miedo, pero que la pregunta aquí es porque no.

- Entonces que esperas- dije abriendo mi boca ella se acerco y la derramo en mi boca tenia un sabor a fresa, mi cuerpo se sintió más excitado, tenia mas calor sentía la necesidad de tocarme o tocarla ella se tomo la otra mitad, vi como sus pupilas se dilataban.

Ella se volvió a sentar en mi beso mi cuello, su toque se sentía tan bien, no podía hablar mis gemidos se llevaban las palabras, quería desatarme y tocarla que se corriera en mi boca, quería saborearla, esta maldita cuerda me molestaba no me podía desatar, ella bajo sus besos no podía dejar de sentir placer hasta lo podía sentir en como apenas sus labios rozaban mi piel, me estaba matando no poder tocarla, llego a mi longitud, empezó lamiéndola de abajo hasta abajo.

- A-Ah Por- Por favor Karol no m-me agás es-esto- dije entre gemidos como pude, ella escupio en su mano y empezó a acariciar mi longitud yo hacia mi cabeza hacia atrás hundiéndola en la almohada, mordí mi labio tan fuerte que pensé que me lo abriría, lo metió a su boca esa fue mi perdición mi labio sangraba y gemidos incontrolables salían de mi, me limpie la sangre pasando por la herida mi lengua.

- A-AH KA-KAROL POR-PORFAVOR TE- TE LO RUEGO- dije gimiendo, ella paro, lo saco de su boca subió hasta mi cara.

- Dilo de nuevo- dijo empezando a besar mi cuello.

- por- por favor quiero estar dentro de t-ti- dije jadeando. Ella bajo de arriba de mi fue a un pie lo desato su tacto me estremecía esa poción si que funcionaba, desato el otro, fue hacia mi se subió encima y se estiro para desatarme las manos dejando sus pechos casi en mi cara, dios me va a matar, cuando me desato automáticamente toque a Karol de todas partes todo su cuerpo ella suspiraba o gemía ante el toque, llego un momento en él que loa dos deseábamos lo mismo, me paso un condón me lo rápidamente, agarre mi longitud entre mi mano colocándolo en la entrada de Karol gemimos los dos, y entre en ella despacio los dos gemimos hasta el mínimo toque sentíamos placer, el placer era mucho más fuerte, empezó a mover sus caderas yo la ayudaba poniendo mis manos en sus caderas y moviéndola, gemíamos por cada movimiento embestida o asta caricia, era lo mejor que me a pasado el placer se sentía como se duplicaba, tomare esa poción mas seguido, solo no podía dejar de gemir no podía hablar, ella era mi perdición, lo único que se escuchaba en la casa era la cama chocando con la pared y nuestros gemidos, después de unos minutos dimos nuestras ultimas envestidas, y una ola de placer inexplicable me invadió mis pies se estiraron mi cabeza fue hacia atrás gimiendo el nombre de Karol, no podía pedir más, hasta ahora el mejor orgasmo que e tenido.

Me quede un rato dentro de ella la poción terminaba cuando llegabas al clímax ya se había acabado el efecto, salí de ella lentamente, le temblaban las piernas uno de mis sueños húmedos se parecía a esto, me sentí orgulloso por alguna razón, ella se acostó a mi lado, quite el condón lleno de mis líquidos, ella tenia su entre pierna mojada muy mojada las sabanas estaban mojadas las seque con un hechizo me recosté alado de Karol nos tape con la colcha eran las 4 de la tarde cuando llegamos a la recamara de la ducha eran las 2 por dios dos horas, no le tome importancia Karol se recostó en mi pecho y yo le acariciaba su cabeza, dios cuanto la amo solo Merlín lo sabrá, y nos dormimos.

Porque se quedaron calladas a verdad, espero que les este gustando y por favor, sobre la maldición lo sabrán pronto.

De escritor a lector, Karol.

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