Capítulo. 10

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La rusa volvió.

Luego de que Jordan cayera desmayada en los brazos de su amado, Bucky la llevó a su apartamento, con ayuda de Sam la acostaron en el sofá.

—Bucky, los condones existen, ¿sabes?— Natasha decía mientras estaba de pie frente el cuerpo de su amiga.

—Los fantasma no son reales, los fantasmas no son reales.— Susurraba James para él, trataba de convencerse de lo que decía.

Wilson veía atento a la pelirroja, hasta que sintió que Taylor empezaba a despertar. —Al fin, no está muerta. Así que ya me puedo ir.— Dijo y se levantó.

Jordan se removía en el sofá y se quejaba. —Uy, que feo sueño.— Susurró la mujer, tocándose la cabeza.

—Hola, Jordan.— Saludó Nat con una gran sonrisa y diversión, cuando la castaña la miró.

—¡Maldita sea!— La ojiverde gritó y se escondió en los brazos de Bucky. —Dime que estoy loca.— Pidió.

—No, yo también la veo.— Habló James viendo a la pelirroja. —¿Cómo llegaste aquí?—

—Jordan me trajo, me necesita y yo la necesito.— Confesó Romanoff.

Taylor salió de los brazos de James y caminó hacia Nat. —¿En serio eres tú?—

—Si, anciana. Soy yo.— Sonrió la pelirroja abriendo sus brazos.

Jordan golpeó a Nat justo en la nariz por impulso. —¡¿Por qué carajos saltaste por ese risco, Romanoff?!— Reclamó.

Natasha se tocó la nariz, sangraba. —¡Para traerte a James, idiota!—

La castaña pestañeó varias veces al verla sangrar y corrió para abrazar a su amiga. —Ay, si eres tú. Te extrañé tanto.—

—De verdad necesitas psicólogo, esos impulsos de golpear a la gente ya no son bonitos.— Natasha le recomendó abrazándola también.

—Si, como digas.— Jordan se aleja y va hacia Buck, lo abraza de nuevo. —Tengo hambre. ¡Sam! Anda a cocinar.— Ordenó ella.

—Pero esta mujer si es abusadora.— Se quejó Sam. —Te quiero, Jordan. Pero mañana hay que le con Zemo, debo arreglar el transporte. Bye.— Wilson salió de la casa rápidamente antes de que usaran magia o armas sobre él.

Bucky abrazó fuerte a su chica, sentándola sobre él. —Creo que es hora de dormir.—

—Pero yo tengo hambre.— Taylor hizo un puchero.

—Iré a prepararte algo entonces.— James besó los labios de su chica y la dejó sobre el sofá, caminó hacia la cocina.

Natasha lo vió irse con atención y luego corrió hacia Jordan, se sentó junto a ella. —¿Ya te lo cogiste?—

—Ujum y pienso hacerlo hoy de nuevo, así que desaparecete.— La castaña chasquea los dedos frente a la cara de la rusa en broma. —¿Qué haces aquí?— Preguntó ya más seria.

—Solo te diré que no seré la primera aparición.— Romanoff se pone de pie. —Iré a dormir. Ah, si vas a tener sexo con James, no hagas tanto ruido.— Se burla, yéndose a otra habitación, específicamente a la que tenía una cama sin usar.

James entró con un plato de pollo frito luego de que la rusa se fue. —¿Qué se hizo?—

—Se fue a dormir y me dejó muy confundida.— Dijo Jordan viendo a la televisión apagada. —Esa no es mi Nat, Bucky.—

GOD IS A WOMAN  ||Bucky Barnes||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora