GOD IS A WOMAN ||Bucky Barnes||

Capítulo. 55

Tina.

Ya en Washington D.C, el nuevo equipo que tenía como misión destruir C.A.O.S, se instaló en el antiguo apartamento de Steve y Jordan.

—La tía Jordan tiene casas en todos lados.— Comentó J.C entrando al apartamento, tras Naiara.

—Supongo que son sus planes de contingencias.— Habló Woods viendo el lugar. —Es lindo.— 

Bucky miró hacia la ventana y sonrió recordando uno de sus momentos con la ojiverde de la que estaba enamorado.

—¿Vives aquí?— Bucky preguntó entrando tras ella y siguiéndola muy de cerca, estaba bastante serio.

Jordan lo ve y sonríe un poco, James parecía un perrito que buscaba cariño  pero él no se daba cuenta de que su mirada gritaba eso. —Si, aquí vivo. Ten.— Le extiende una pila de ropa y un bolso. —Ayudame a guardar eso, es para ti. No puedes andar con la misma ropa siempre.—

Bucky frunce el ceño y se sienta a guardar lo que ella le dió. —Me gusta esta ropa.—

—Pues pareces vagabundo.— Suelta una risita la ojiverde. —Oye, quita esa cara de desconfianza. No te haré nada.— La mujer toma su pasaporte y dinero, para luego echarlo en otro bolso.

—No te conozco, así que debo estar alerta.— Bucky dice, levantándose de donde estaba sentado y caminando por la habitación. —¿De quién es esa ropa? No creo que uses ropa de hombre.—

Jordan carga un arma, misma que guardó tras su espalda. —Creeme si quisiera lastimarte, lo habría hecho en aquel callejón oscuro que vimos.— Informa la mujer. —Y la ropa es de Steve, dejó de quedarle hace mucho, me dijo que la regalara y eso hice. Es nueva, por si te lo preguntas.—

—¿Por qué me ayudas? Quiero la verdad, solo te pido eso.— Bucky la mira con curiosidad, mientras ella empacaba otro bolso con su ropa.

—Porque sé lo que es no tener a nadie que te apoye cuando lidias con tus demonios internos.— Jordan hablaba mientras se acercaba a él, su mirada denotaba sinceridad. —Sé que tienes muchas dudas sobre dónde estas, quién soy, quién eres tú y mucho miedo también, pero si me dejas entrar, será más fácil para ti dejar de sentirte tan mal.—

Bucky asiente y se quita la gorra que llevaba para colocársela a ella, como aceptación a lo que le propuso.

—¡Hey! James. Tierra llamando a Bucky.— Taylor chasqueaba los dedos frente al rostro de su amado, haciéndolo salieron de sus pensamientos. —¿Es qué piensas?—

James ensanchó su sonrisa y abrazó a la mujer con fuerza, sorprendiéndola. —Gracias.— Susurró.

Jordan también lo abrazo con algo de duda. —De nada.— Contestó con un tono de pregunta, separándose lo suficiente para poder ver los hermosos ojos azules frente a ella. —Hey, ya va. ¿Por qué me agradeces?—

—Por estar conmigo cuando sentía que el mundo se derrumbaba a mi alrededor.— Respondió Bucky.

—Shh.— La ojiverde le colocó un dedo en los labios a él, sintiendo sus ojos picar por las lágrimas que querían salir.  —Deja eso para los votos matrimoniales, si dices algo más ahora me echaré a llorar.—