GOD IS A WOMAN ||Bucky Barnes||

Capítulo. 44

Que bonita son las noches en la Habana.

Jordan mientras caminaba tras Bucky, tomándose de la mano, hacia el hotel. Pensaba en el hombre que estaba frente a ella y lo sexy que era. Ambos caminaban a paso acelerado.  Taylor tiró del brazo del ojiazul, dejándolos frente a frente y en un gesto atrevido, bastante atrevido, la ojiverde envolvió sus labios alrededor del pulgar de Barnes y como si de una paleta se tratase, empezó succionar y lamer, sin quitarle la mirada de los ojos del soldado.

Bucky solo pudo soltar un jadeo al verla jugar con su pulgar. —Carson.— Susurró. Sin evitarlo, empezó a imaginar a su mujer, arrodillada frente a él haciendo lo mismo con su boca pero en la parte más secreta de su cuerpo, la cual terminaba a despertar.

Jordan soltó el dedo de James haciendo un 'pop' con sus labios. —Amo como andas vestido, te queda tan bien el blanco.— Comentó ella abrazándolo por el cuello.

El castaño cerró sus ojos unos segundos, su pantalón ya empezaba apretarle. Al abrirlos, no le dió tiempo de hablar, ya que Jordan abalanzó a sus labios, besándolo con salvajismo y lujuria pura. Bucky solo pudo tomarla de la nuca, continuando ese juego entre sus labios.

El chico mordió el labio de la mujer haciéndola jadear, cosa que le permitió introducir su lengua y explorar su cavidad bucal. Los dos se devoraban como si fuera la primera vez, como si toda la vida hubiesen estado hambrientos del otro, se podría decir que los labios de ambos eran como agua salada para el otro. Mientras más tomaban, más sed les daba.

Jordan se alejó del beso mordiendo el labio de Buck algo fuerte, dejándole una marca. Barnes pasó su lengua por la marca que ella había dejado y sonrió con perversidad, aún la tenia fuertemente tomada de la nuca.

—Vamos a la habitación, ahora.— Ordena la neoyorquina, tomando a James de la camisa y arrastrándolo hacia dentro del hotel.

Bucky reía y la seguía bien de cerca, algunas veces se alejaba para verle el trasero.

Ambos llegan al ascensor, entrando en él y se controlan un poco, tratando de respirar. Había personas y menos mal, porque sino lo harían ahí. Cuando el ascensor abrió sus puertas en el piso donde estaban hospedados, ambos salieron de él apurados. James tomó los muslos de Jordan, enredándolos en su cintura para luego besarla con fervor. Mismo que eran su adicción desde la primera vez que los besó.

El sargento sin saber como lo hizo, llegó a la puerta de su habitación donde recostó a la chica, mientras buscaba la tarjeta que abría la misma. Le era difícil concentrarse en su labor, ya que Jordan le besaba el cuello y se rozaba con su ya bastante grande erección.

—Bonita, necesito concentrarme.— Bucky dice bastante agitado, mientras seguía buscando la llave en sus bolsillos.

Jordan ríe y le muerde el cuello. —Yo solo estoy tratando de no caerme.— Dice con inocencia fingida.

—Ajá.— Bucky logra encontrar la llave pero antes de entrar a la habitación, mueve sus caderas fuertemente, rozando su intimidad contra la de su futura esposa. Haciéndola gemir fuerte. —Ahora yo estoy tratando de que tú no te caigas.— Dice pícaro.

—Mierda, dame esa llave.— Jordan se baja de los brazos del hombre y le quita la llave, para abrir la puerta. Mientras, Bucky desabrochaba su correa, más los botones de su pantalón y acerca el trasero de la mujer a él.

Cuando la chica logra abrir la puerta, ambos entran a la habitación e inmediatamente se desnudan entre besos y mordidas.

—Eres tan hermoso.— Halagó Jordan besando las mejillas del hombre.

Bucky carga el cuerpo desnudo de la castaña y lo tira a la cama, trepa por ella hasta llegar a los pechos de la chica, los cuales devora sin piedad inmediatamente. Jordan solo pudo soltar un chillido al sentir una mordida en su pezón. Barnes chupaba, lamía y apretaba los pechos de la chica con fuerza.

Jordan no pudo resistir por mucho más tiempo no tener el miembro de su amado dentro de ella, así que lo dejó boca arriba en la cama y de golpe se sentó sobre la virilidad del hombre. Gimiendo por el placer que eso le causó. Bucky solo pudo alzar su cabeza un poco y colocar sus manos en la cintura de la mujer para empezar moverla con rapidez, ambos estaban desesperados por sentir esas exquisitas sensaciones que causa el tener sexo.

—¡Mierda!— Gritaba Jordan saltando fuertemente sobre Bucky, estaba completamente cegada por el placer y las hormonas.

James gemía ronco, mientras apretaba el trasero de la chica haciéndola caer más fuerte sobre su miembro. Jordan se inclinó hacia el hombre, dándole un beso fuerte y lleno de deseo. Bucky se lo siguió completamente embobado con sus movimientos, luego de un momento, tomó fuerzas para dejarla bajo su cuerpo y moverse mucho más fuerte que antes. Jordan soltó un grito.

Ambos continuaron moviéndose por un largo rato hasta que sus cuerpos se dejaron llevar por el placer y la locura del clímax tan maravilloso de su acto. James al culminar, cayó al lado de Jordan.

—Creo que me hiciste otro niño.— Habló Carson agitada.

Bucky soltó una carcajada. —No me molestaría.— Dijo para luego abrazándola y dejándola sobre su pecho.

—Claro como a ti no te crecerá la panza, me quieres hacer diez bebés.— Rezongó ella.

—Debemos asegurarnos de que nuestro legado perdure bastantes años.— James llenó de besos la cara de su mujer.

—¿Y por eso quieres diez bebés? Pues no, con dos ya es suficiente.— Jordan rió al ver el puchero que hizo el hombre de 107 años, mismo que besa. —Ya, vámonos a dormir.—

—Si, mi cielo.— Bucky los arropó bien. —Te amo, Jordan.—

—Yo también te amo, James.— Susurró ella para luego bostezar.

—Pareces un oso, solo duermes y comes.— Se burló James.

—Esa es la buena vida.— Contestó Taylor para luego cerrar los ojos y rápidamente quedarse dormida.

Bucky se quedó admirándola unos segundos e imaginando como serían sus hijos, soñando despierto con la sonrisa de estos y el color de sus ojos. Reproduciendo momentos en su cabeza sobre las cosas que haría cuando ellos nacieran y sin poder creer el inmenso amor que sentía por dos seres que aún ni habían nacido.

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Holaaa, aquí el nuevo capítulo de hoy. Espero que les haya gustado.

Mañana veremos un pequeño fragmento de como seria Bucky de papá.

Los amo mucho aunque no los conozca.

#Angie. ❤