GOD IS A WOMAN ||Bucky Barnes||

Capítulo. 8

La contemplación del alma.

Ya en la noche, unos oficiales iban con Bucky por los pasillos, ya que alguien lo sacó de la prisión. La psiquiatra del soldado llegó al sitio.

—Sam. Oí mucho de ti. Soy la psiquiatra de James, Dra. Raynor.— Se presenta la señora.

Wilson se levantó de su silla y se acercó a la mujer. —Mucho gusto, gracias por ayudar.—

Taylor se levantó tras él y vió a la doctora. —Ah, no puede ser. ¿Es enserio?—

—También es un gusto verte, Jordan.— Saludó la doctora que la evaluó sola una vez antes de que se firmara el acuerdo.

—No soy Jordan. ¿Van a sacar a Bucky de una maldita vez o lo tengo que ir a buscar?— Preguntó la de ahora ojos violetas.

—Un gusto conocerte Queen. Ahora, yo no fui la de la ayuda.— Contestó Raynor a Sam.

—¡Christina!— Se escuchó la voz de John, mismo firmaba autógrafos. —Que bueno verte otra vez.—

Jordan rueda los ojos. —¿A quién mato primero? Oh si, al que tiene el escudo. ¿Con lapicero o con cucharilla? No lo sé, ¿qué importa?— Dijo la chica, asustando un poco al moreno a su lado.

—¿Lo conoces?— Preguntó Sam en un chillido aún asustado.

—Si, hicimos operaciones de campo juntos.— Christina saludo a Walker.

—Oí que trabajabas con Bucky y quise intervenir. Ni Jordan ni él tendrán que seguir ese horario y reglas que les impusieron.— Explicó John mirando a la teniente.

—Sigue mirándome y te sacaré los dos ojos, más la lengua.— Amenazó Queen.

Raynor regaña con la mirada a Jordan. —Aún no terminamos, ¿quién lo autorizó?— Preguntó ella confundida.

Walker hizo señas hacia él.

—Oh, genial. Si esperas un gracias, pues morirás antes. Solo te informo, eh.— Jordan lo señaló.

Bucky sale, acompañado de los oficiales y observa el lugar, luego a su "Jordan". La mujer caminó hacia él y por su mirada, él hombre supo que no era completamente la Jordan que conocía.

—Hola, tú.— Saludó Barnes.

—¿Cómo que 'Hola, tú'? ¿Qué te pasa? Soy tu prometida también, no salgo mucho pero si sé que pasa a mi alrededor, eh.— Queen reclama y le da un manotazo en el brazo de vibranium al hombre.

—Ya, ya. No te alteres, muñeca.— Susurró Bucky divertido. Era demasiado raro cuando estaba con ella, al hablarle su mal humor cambiaba pero cuando se callaba, volvía a tener cara de perro rabioso.

—Son muy valiosos para detenerlos.— Walker señaló a los ex-soldados, mientras hablaba con su amiga. —Haz lo que tengas que hacer y envíamelos, tenemos asuntos pendientes. Y contigo, Wilson. Estaré afuera.—

Christina ve a la pareja de ancianos. —James, para poder liberarte debemos una sesión. Sam y Jordan, ustedes también.—