E N T U P I E L |B O R R A D O R|

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Bruno.

Y justo como lo pensé, Morgan y Alessandro son novios.
Es obvio tonto, los dos son extremadamente guapos y tienen ese algo que los hace ver bien.
Y yo solo estoy aqui, existiendo.

Y está bien, pero juraba que Morgan podría darme una oportunidad y poder conocernos más, ser novios y si no, ser amigos.
Pero sencillamente todo se esfumó.

-¿Que tienes Bru?

-¿Sabías que Morgan y Alessandro son novios?.

Caroline asintió y Lizzy se quedó con la boca abierta, lo sabía desde antes que yo.

-¿Y porque no me dijiste nada?.

-¿Para que querías que te lo dijera?.

-Para no ilusionarme tontamente.

-Tu lo acabas de decir, te ilusionaste tontamente. ¿No te diste cuenta desde la cena?.

-Es cierto, muy cierto. Alessandro se comporto muy extraño cuando te vio llegar con Morgan.

-Ese día desaparecieron un buen rato y después llegaron como si nada.

-¡Ay!, Que tonto soy. En fin no puedo hacer nada y nisiquiera pienso intentarlo.

-Tomalo con calma, Alessandro es mayor que Morgan y que nosotros por muchos años. ¿Crees que la tomara en serio?.

Lizzy hizo la cagada de su vida cuando menciono eso, le aventé varios cojines.

-Deja de decir tonterías, debe tomarla en serio. ¿Has visto a Morgan?. Es hermosa, realmente sería un estupido si la caga.

-Valeee, perdón. Solo hay que esperar a que no la cagué, ¿Si lo hace te vas aprovechar?.

-No lo sé, sería difícil para Morgan, no me aprovecharía de eso, ni de ella.

-Bueno ya, Morgan está feliz con Alessandro, dejemos de pensar así y dejarlos ser felices.

Caroline se levantó de la cama y se puso en medio de la habitación, muchas veces ella era la más madura de los tres y lo agradecía porque Lizzy siempre me llevaba a la locura con sus cosas.

-Ya vamos a dormir, mañana tenemos clases y no podemos parecer zombies y sobre todo tu Lizzy que te duermes a las cuatro de la madrugada como si no tuviéramos cosas más importantes que hacer.

-Bajale a tu control caroline, no eres mi mamá.

-No lo es, ningún de las dos. Pero yo estoy a cargo de ustedes y sobre todo porque está casa no es de nosotros y tenemos que respetar, así que vamos a dormir y listo.

Las dos refunfuñaron y salieron de mi habitación para irse a la suya.

*

Desperté más temprano de lo normal y baje hacer el desayuno para todos. Recordé que Morgan menciono lo mucho que le gustaba en batido de fresa, así que le prepare uno.
Cuando tuve todo listo, subí a ducharme para poder irnos al colegio.

No tarde mucho en estar listo y al bajar la vi acomodando su cabello frente al espejo del pasillo.
Se veía realmente hermosa, su cabello largo y ondulado me hizo caer en un éxtasis y no poder despegar mi vista de ella.

-Holaaaa Bruno, ¿Estás ahí?.

-Ho-hola, perdón, recordé algunas cosas.

-No te preocupes, ¿Cómo dormiste?.

-Muy bien, ¿Y tú?.

-Igual, bien. Con respecto a lo que pasó ayer por la noche, lamento mucho lo que viste.