E N T U P I E L |B O R R A D O R|

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Alessandro

En cuanto puse un pie en el aeropuerto le marque a papá, se tardó demasiado en contestar y después de tres llamadas por fin escuche su voz.

-Padre, jamás pensé que podrías mentirme.

-No se de que hablas.

-Si sabes, estoy en Italia junto con mamá.

-Iré a buscarte, donde siempre, adiós.

Me colgó, no dijo nada más. Sonaba extraño, como si algo hubiera pasado y mi mente comenzaba a maquinar miles de escenarios hasta que la detuve en seco y me concentre en otras miles de cosas menos mortificantes.

Después de una hora mi padre se acercó a nosotros, abrazo a mamá y a mi me tomo de las manos.

-Iremos a otro lugar antes que a casa.

-¿Esta todo bien?

-En realidad no, Morgan tuvo un accidente.

-¡¿Qué?!, ¡¿como esta ella?!, ¿PORQUE DEMONIOS SEGUIMOS AQUÍ?

Tome todas las maletas como pude y camine más rápido que ellos, llegando al auto guarde y aventé todo como pude. Mi padre manejo lo más rápido que pudo y entrando al estacionamiento del hospital corrí escaleras arriba.

Estaban sus padres, Enzo, las gemelas y un tipo que no reconocía, tal vez su nuevo novio.
Me acerque a sus padres y los abrace, ellos me recibieron con cariño y aunque esto me hubiera gustado en otra situación, no era posible.

-¿Como esta ella?

-Esta grave hijo, esta en estado de coma.

Sus palabras retumbaron en mi cabezas millones de veces en cuestión de segundos, caí de rodillas sobre el piso llorando.
Mi nena no tendría porque estar pasando por esto, no tendría porque estar en ese estado.

-Levántate cariño, Morgan saldrá de esto.

Mi madre me tomó de las manos y con suma delicadeza me llevo al sofá, Enzo se sentó a un lado de mi y me dio unas cuantas palmadas en la espalda.

-Tenemos mucho de que hablar, acompáñame.

Ambos nos pusimos de pie y salimos de la sala, dimos unos cuantos pasos y nos detuvimos.

-¿Que es lo que realmente sucedió?

-Morgan la paso muy mal desde que te fuiste, descuido demasiado su salud y todo eso le provocó anemia, pero grave. Cuando la llevamos al doctor creíamos que estaba embarazada, tenía mareos y algunas veces vomitaba, pero todo eso eran síntomas. El doctor el mando dieta en horas exactas y nos suplico que no tuviera sustos, impresiones fuertes o algo que la desestabilizará.
Hasta hace unas horas, Bruno se presento en su cada y con todo el cinismo del mundo le pregunto por ti y claramente ella reaccionó. Se fue encima de él diciéndole miles de cosas, Bruno estaba apunto de irse pero sus padres sé interpusieron y ella contó lo que sucedió.
Después de eso se desvaneció en sus brazos y aunque intentamos reanimarla, no funcionó.

-¿Y donde esta ese idiota?

-Se fue en cuanto llegamos al hospital, supongo que los padres de Morgan ya están tomando acciones legales.

-¿Quien ese tipo que esta en la sala?

-Es Martin, el chico que se encargo de hacer famosa a Morgan.

-¿Solo es eso?

-¿Quieres que sea más?

-No.

-Entonces no hables de más Alessandro, fuiste un cobarde.

-No lo fui, pensé en el bienestar de ambos.

-Esta situación dice todo lo contrario.

-Pero ya estoy aquí.

-No sabemos si ya es demasiado tarde, Morgan se veía muy decidida al dejar de mencionar tu nombre.

-Estoy igual de convencido que ella de recuperarla, si ya no me ama, me iré de su vida sin arruinarla más.

-Espero ambos sean sabios.

Aguardamos un poco más fuera de la sala y entramos, sus padres estaban desconsolados. Mi madre estaba sentada en un rincón y Enzo abrazando a una de las gemelas muy acaramelado.
El ambiente estaba triste y tensó, mi corazón no dejaba de ir a mil por hora al igual que mis nervios, mis manos temblaban y mi cabeza dolía.

-¿Familiares de la señorita Rizzoto?

-¡Nosotros!

Inmediatamente todos nos pusimos de pie y nos acercamos al doctor, su cara no decía malas cosas, pero su boca, no sabíamos.

-La señorita ya se encuentra estable, esta fuera de peligro.

Todos soltamos el aire acumulado y nos abrazamos unos a otros.

-Entro en estado de coma debido al shock tan fuerte que recibió, esperemos que mejore en tres días.

-Muchas gracias doctor, ¿podemos hacer algo más?

-Por el momento no es necesario, deberían de ir a sus casas a descansar.

-Lo haremos, gracias.

-Hasta luego.

El doctor se fue y nosotros salimos detrás de él.

-Yo me quedaré a cuidarla, no tengo problema.

Enzo habló mucho más rápido que yo y aunque estuvieron a nada de aceptar, me interpuse.

-Ustedes deberían de descansar, yo la puedo cuidar.

-¿Estás seguro?, acabas de llegar de viaje y te ves cansado.

-No tengo problema, yo la cuidó.

-De acuerdo, estaremos pendientes del celular, cuídate y avísanos cualquier cosa.

-Por supuesto, descansen.

Despedí a todos y le di las llaves de mi departamento a mi madre.
Entre de nuevo al hospital y subí hasta el cuarto que nos indico el doctor 117-A MORGAN RIZZOTO
Mi estomago se hizo chiquito en cuanto abrí la puerta y visualice su cuerpo, estaba conectada a varios cables, su piel estaba demasiado pálida y se veía muchísimo más delgada.

-Hola nena, ya estoy de regreso.

Acomode un mechón de cabello detrás de su oreja izquierda y plante un pequeño beso en su frente.

-Hoy me quedaré a cuidarte, tienes que despertar pronto porque tenemos muchas cosas de que hablar.

Me senté en el pequeño sofá a un lado de su cama y la observe durante unos minutos, después de eso el sueño me venció por completo.

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unos mas, espero les guste.
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Ig: raaquellr7