Tengo razón

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—El tiene razón—Entro al búnker con mi uniforme de mesera y un par de bocadillos.

—¿Qué haces aquí?—Oliver pregunta con enfado al verme entrar y bajar las escaleras.

—Vengo a ayudar—Hablo obvia dándole un bocadillo a John que los acepta con gusto.

—No puedes estar aquí.

—Me agrada.

—Gracias John—Le sonrío—Oliver me vas a querer aquí a la hora de decirle a John que su mentor es malo—Diggle deja de sonreír.

—Ustedes no saben eso—Dice enojado dejando a un lado la comida y golpeando la mesa—El me enseñó lo que se—Dice frustrado.

—Las personas cambian, debes aceptarlo—Me sorprende la frialdad con la que habla Oliver.

—Hablo el que se niega creer que su madre es una criminal—Ambos me miran con el ceño fruncido.

—¿Qué?—Cuestiona Oliver con enfado e intriga.

—Nada—Hablo rápidamente—Tengo que irme—Subo con prisa las escaleras.

Salgo del búnker y con cuidado me cercioró de que no hay nadie cerca. Camino con normalidad a la barra y vuelvo a mi trabajo.

—Tommy—Llamo su atención al verlo pasar con precaución y ansias—Tommy—Vuelvo a llamar, el pelinegro se detiene y se acerca a mí—¿Estás bien?—Pregunto mientras limpio la barra.

—Cenare con mi padre y Laurel—Comienza—Quiero que todo sea perfecto, ella realmente me gus...

—Gusta—Termino por el, no lo iba a negar me decepcionó oír aquello, llegué a creer que Tommy sentía algo por mi ante su coqueto pero como la misma Laurel Lance dijo el no era un hombre de una sola chica.

—Camille.

—Esta bien Tommy—Lo tranquilizo—Tu y yo solo somos buenos amigos.

—¡Wow!—Se acerca más a mi—Nunca he tenido una amiga—Confiesa con felicidad.

—¿Y Oliver?—Cuestiono.

—El es mi hermano—Explica—Tu eres mi primera amiga, la primera persona que no mira a Tommy Marlyn el gran millonario si no al torpe Tommy.

—Diras idiota Tommy Merly—Bromeo—Es hora de decirte la verdad solo quiero tu amistad por tu dinero.

—Lastima, ya no tengo más dinero—Sonrie.

El me guiña un ojo y sale del bar a los segundos miro a Oliver y John que aún discutían.

—Parecen pareja de recién casados—Digo con burla—No digo que todos los matrimonios sean infelices pero por lo que yo viví es lo único que se.

—No tengo ánimos de bromear Camille—Me toma por sorpresa el ánimo de John siempre ha sido amable pero en este momento era evidente su enfado.

—Sera mejor que cuando vuelvas y miren que yo tengo razón—Oliver alza su ceja—¡Bien! Qué Oliver y yo teníamos razón más te vale pedirme disculpas con una deliciosa hamburguesa—John solo sale del bar y Oliver duda en seguirlo pero lo hace.

(...)

—No me agrada este sofá—Me quejo intentando encontrar una posición cómoda en el sofá.

—Es lo que tenemos Camille—Roy suena cansado.

—Algún día compraremos uno nuevo—Aseguro dejando caer mi rostro en sus piernas.

El solo bufa con gracias como si eso nunca fuese a pasar.

—¿Y Thea?—Pregunto intentando no quedar dormida con el suave masaje que Roy hace en mi cabeza.

—No la he visto—Dice como si nada—Solo la miro como amiga, realmente estoy interesado en alguien más.

—La afortunada es...

—Eso es lo gracioso—Me inclinó un poco para verlo—Lo que pasa es que nunca había sentido algo como eso.

—Wow.

—Si fuese otra chica no dudaría y se lo diría pero con ella es diferente—Lo miro confusa, que yo supiera no había nadie más en la vida de Roy que Thea—Creo que la quiero.

—Díselo—Animo.

—Ella me ve como un amigo—Noto una pizca de decepción.

—¿Se lo haz dicho?—Cuestiono sentandome a un lado de el.

—Camille yo...

Roy se queda callado al escuchar como tocan la puerta.

—¡Te toca!—Cambia de tema y se pone de pie para ir a la pequeña cocina.

Me pongo de pie y sin ánimos me encamino para abrirla, sonrío al ver John de pie sujetando una bolsa del Big Belly Burger con una expresión que reflejaba un "tenías razón".
Le regaló una media sonrisa y me hago a un lado para que el pase.

—Resulta que tú y Oliver tenían razón—Dice desanimado.

—Lo siento—Confieso, sabía que ese sujeto significaba mucho para John y aunque no lo conociera tanto como a Roy lo quería, era uno de mis personajes favoritos.

—Quiero que estés de mi lado—Se cruza de brazos.

—¿Qué?—Pregunto divertida—Oliver te contó que soy vidente—Afirmo—Quieres decir que seré tu respuesta a todo.

—No—Niega con una sonrisa—Quiero decir que confío en ti.

GOLD EYES ~Oliver Queen~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora