Ignoro a toda costa a Tommy, sabía que estaba mal pero no podría verlo a la cara saber que moriría y no hacer nada para salvar a mi amigo a alguien que me ayudó y se preocupo por mi.
Miro a Tommy tambalearse por el bar, hace unos días él decidió terminar con Laurel y no había echo nada por apoyarlo era mejor de esa manera.
—Ni lo pienses Camille.
—Maldición Asher—Chillo asustada—¿Qué diablos haces aquí?—Me quejo al mismo tiempo que me doy vuelta para verlo.
—Estoy aquí para cuidar que no lo arruines—Dice serio.
—No lo haré—Aseguro.
—Mas te vale—Me mira directo a los ojos.
Me alejo de el y me encierro en la bodega, paso mis manos por mi cabello llena de frustración. Respiro fuertemente y trato de relajarme para después de unos segundos salir de la bodega, al hacerlo me encuentro con Tommy quien me mira con enojo.
—Al fin apareces—Menciona enojado y arrastrando las palabras.
—Tommy—Hablo no muy segura—Yo...
—Sabes que es lo pero de todo—Me interrumpe—Creí que eras mi amiga—Una pizca de decepción y tristeza se cruzan por sus ojos.
—Lo soy Tommy—Argumento.
—No lo eres—Chilla—¡Pase por la peor semana de mi vida y tu me ignoraste!—Me señala.
—¡Porqué te quiero Tommy!—Exclamo y el me mira esperando a que siga hablando—Te quiero tanto y no quiero perderte.
Se acerca a mi y toma mi rostro entre sus manos para juntar sus labios con los míos, un fuerte saber a alcohol inunda mi boca, me quedo quita unos segundos. El parece notar mi incomodidad ya se separa y me abraza.
—Lo siento tanto Mila—Susurra a mi oido.
—Shhh—Intento calmarlo—Todo estará bien—Digo evitando llorar—Estarás bien, lo juro—Lo tomo por los hombros y lo miro con los ojos llorosos—Tienes que esconderte—Limpio sus mejillas—Tienes que hacerme caso, irás a la bodega y no saldrás de ahí hasta mañana—Lo guío inconscientemente a la bodega.
—¿Porqué?—Cuestiona confuso.
—Solo hazlo—Lo empujó a la bodega y cierro la puerta.
—Camille—Grita golpeando la puerta—¡Déjame salir!—Ordena, tomo las llaves del bar y cierro la puerta con seguro.
—Los siento Tommy pero no quiero perderte—Digo pegada a la puerta para que pueda escucharme—Todas las cosas que hago son para protegerlos.
(...)
—El es buena persona—Lo defiendo.
—Entonces reconoces que lo conoces—Ataca Lance.
El oficial me había seguido y ahora me interrogaba.
—Somos amigos—Admito y Lance me mira como si estuviese a punto de revelar el secreto de Oliver—A veces pinto sus uñas y el las mías—Su sonrisa se borra.
—La rubia me agrada mas—Hace una mueca.
—Opino lo mismo—Me dejo caer en la silla—El trata de hacer una diferencia, es una gran persona, si, sus métodos no son los correcto muchas veces pero ha salvado a tantas personas incluyendome, me salvó—Lo miro a los ojos—Eso lo hace un héroe ¿No?—Me pongo de pie y salgo de la oficina.