•~Capítulo.9.~•
DEDRICK
"Bueno... No pasa nada. Te rechazo y me rechazas. Venga, dale, ¿Cómo se hace?"
Desde un principio parecía ser un chico extrovertido, libre y relajado, pero cuándo me dijo eso con tanta calma no bromeaba. Él realmente está dispuesto a romper el lazo creado por la Diosa Luna e irse por su lado y eso solo si no busca volverse a ver con mi hermana pequeña.
Pero... ¿Porqué me afecta tanto?
No es una mujer y tampoco puede engendrar a mis hijos y aunque si lo fuese y si pudiera, siempre he tenido el pensamiento de que "esa mujer" me daría a mis hijos y después le daría una enorme cantidad de dinero para que desapareciera de nuestras vidas dejando a mi cuidado a nuestros hijos. Pero si así formulé mi plan y desde un principio ha quedado pisoteado, ¿Porqué no estoy bien con el tema?
Lo que me está taladrando tanto la cabeza es el hecho de que no me moleste que no sea una mujer y que tampoco me vaya a dar hijos, sino que por algún motivo no me agrada que tan fácilmente me quiera rechazar.
No soy homosexual. Es más, he estado con muchísimas mujeres, no teniendo una relación seria pero sí una sexual. Sin embargo, ¿Porqué él no me desagrada?
Para él soy un cero a la izquierda.
Nunca me he sentido así. Siempre he tenido por costumbre estar en lo alto y que todas las miradas queden fijas en mi, pero él puede permanecer una hora sentado a mi lado y distraerse con una mariposa, observando a Edelmira o hasta hablando consigo mismo y yo parezco estar ahí simplemente por estar.
Me molesta.
Pero la gota que colma el vaso es... su aroma. ¡Me molesta que los síntomas que yo padezco, él no los padece! De nuevo, repito, él puede estar sentado a mi lado durante una hora y ni siquiera mirarme, y en cierto modo porque yo para él no desprendo ningún tipo de aroma que lo seduzca, que lo atraiga o que lo haga adicto a mi.
¿Porqué quiero seducirlo? ¿Porqué quiero atraerlo? ¿Porqué quiero que se haga adicto a mi?
¿Puede ser yo me siento así por él?
No jodas, no hay pasado ni día y medio que lo conozco. Dichosas almas gemelas...
Con las manos en los bolsillos voy volviendo por el camino en el que me fui. Me estaba dando un largo paseo por el parque, habiendo dejado a Egan a cargo de Adelmira, aunque ni uno ni otro se dio cuenta de mi ida.
— ¡Hermano!— Oigo la voz de Edelmira llamarme.
Cuando miro en dirección de su llamado la veo a ella aproximándose de la mano de Egan, quién lleva un cigarrillo en la boca y en su hombro la mochila de Adelmira, con serenidad, dejándose arrastrar por ella.
— ¿Ya te has divertido suficiente? Si es así volvamos a casa.— Le digo mirando por encima la hora que marca mi reloj de muñeca.
— Pero...— Trata de replicar Edelmira, pero mi mirada la calla.
Sinceramente ahora mismo no estaba de humor, quería volver a casa y hacer mis tareas empresariales y olvidarme de este "fatídico" día. Pero claro, también está esa parte bipolar mía que se quiere quedar y hacer una y mil preguntas a Egan, claro, sería una estupidez porque el chico aquí presente tiene grabado en su frente un enorme cartel que pone "RECHACÉMONOS" y en cierto modo, no debería importarme.
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MI SALVAJE ADICCIÓN (En pausa)
WerewolfCuando un hombre o mujer lobo nace inmediatamente la Diosa Luna la empareja con un lobo y con su media naranja o alma gemela, como queráis llamarlo, a mi me da lo mismo. Cómo Alfa que soy siempre esperé encontrar a mi alma gemela, no para vivir una...