•~Capítulo.47.~•
FRIDA
"Para el hombre perfecto, tienes que ser la mujer perfecta" " Debes saber cómo consentir a un hombre" " Debes saber cuándo doblegarte si quieres atar a ese hombre" "Si eres tan cerrada ninguno te querrá" " Ser bonita no basta" "Tienes a tu lado al hombre perfecto. No dejes que te lo quiten", etc.
Todo esto se me ha sido dicho desde que soy pequeña y a día de hoy por parte de mi madre y hermanas mayores. Sin importar qué tan Alfa dominante sea, no domino ni mi propia vida. Siempre viviendo en las sombras y siguiendo órdenes.
Ahora, bajo las órdenes de mi familia iba a casarme con un hombre únicamente para que mi familia se fuese a conocer aún más a cambio de tener a sus hijos, siendo conscientes de que puede ser este contrato no dure para siempre. Yo solo asentí. Ni voz ni voto.
No conocía en persona a Dedrick, pero si lo veía en noticias, en publicidad... Y siempre estaba en boca de gente tanto importante como no. Pensé que sería el típico hombre lobo Alfa dominante de esos que tanto se ven, mostrándose siempre orgullosos, prepotentes, queriendo ser únicos y despilfarrando dinero y poder por donde sea que van, pero no. Él no es así.
Él lo único que despilfarra es elegancia, misterio y madurez. Es un hombre de pocas palabras al que no le gusta hablar mucho de él ni de su familia.
Desde muy pequeña me preguntaban cuál eres mi tipo ideal para cuando fuese mayor, pero yo que no era tonta, sabía más de sobra que respuesta esperaban por mi parte y esa era: Un hombre fuerte, trabajador, rico y Alfa. Esos cuatro adjetivos lograron que mi familia no me tachara de tonta. Sin embargo, a sus espaldas yo misma me volvía a preguntar cuál era mi tipo ideal y yo misma me decía: Alto, guapo, que me quiera y respete, que tenga una sonrisa bonita y me regale muchas flores. Básicamente, quería un príncipe.
Tonterías...
Claro, tonterías en las que ya no debería pensar y aún así pienso.
¿Y cómo no voy a pensar en ello si ahora más que nunca estoy comprometida con uno? Me estoy apresurando. No debería pensar así. Puede ser este intentando plasmar mi tipo ideal en Dedrick para engañarme a mi misma y no sufrir con este casamiento.
Mentira...
Puede ser me guste un poco su atención en mi o su educación al hablar conmigo y como sigue al pie de la letra todas mis peticiones de vernos, conocernos, quedar, ir a este sitio, luego a otro, cómo aplaza cosas de su agenda para darme tiempo, como evita hablar de nuestras familias, como se adecua a mis habladurías... Me gusta como no marca la distancia aún sabiéndose y notándose a la distancia que no quiere nada de esto.
— Buenos días, señorita Neumann.— Saluda una empleada.— ¿Busca al señor Ritcher?
Sonrío.— Así es.
— Según tengo entendido se encuentra en su recámara, ¿Quiere esperar y le voy a buscar o ...?— Pregunta.
— ¿Crees que es posible que lo busque yo?— Le pregunto.— Claro, si no es molestia.
Puedo distinguir en su rostro una mueca de incomodidad, mientras que juega con sus dedos, al parecer dudando entre sí dejarme o no.
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MI SALVAJE ADICCIÓN (En pausa)
Người sóiCuando un hombre o mujer lobo nace inmediatamente la Diosa Luna la empareja con un lobo y con su media naranja o alma gemela, como queráis llamarlo, a mi me da lo mismo. Cómo Alfa que soy siempre esperé encontrar a mi alma gemela, no para vivir una...