•~Capítulo.61.~•
EGAN
Dos azafatas nos guían a taconazos súper rápidos hacia el que sería el jet que usaríamos Angelo y yo. Los guardaespaldas cuidan de que los paparazzis no nos detengan o si quiera se atrevan a tocarnos. Hay mucho ruido entre paparazzis que chillan preguntas para ambos, cámaras que disparan flashes y gente random que nos seguía y sacaban fotos y que cada vez que los miraba chillaban como locos o parecía que les daría algo.
Yo ya ni veía bien de tantos flashes que me habían disparado y para colmo se me habían olvidado las puñeteras gafas.
Angelo y yo no habíamos hablado más después de habernos encontrado en la empresa y habernos saludado. El viaje en coche hasta el aeropuerto fue silencioso y muy incómodo. Eso me hace recordar a cuando se confesó y yo lo rechacé. Pero ni modo... Yo intenté actuar como si nada hubiese pasado, si él no puede entonces, ¿Qué hago?
Hay un momento en el que una mano rápidamente toma mi hombro y tira de mi, me volteo y es un paparazzis, enseguida empiezan una y mil preguntas. Me quedo en blanco y no sé qué hacer o qué decir, hasta que un momento a otro mi brazo es agarrado de nuevo y me obliga a caminar. Recuperó el aliento y dispuesto a agradecer al guardaespaldas lo miro, pero veo que se trata de Angelo.
— Cuando pasan estas cosas debes reaccionar rápido.— Dice.— Habrá viajes que realizarás solo, en compañía de guardaespaldas, en el momento en que ellos estén ocupados alejando a unos, otros cuantos se te acercarán. Debes tener cuidado.— Me explica.
— Está bien.— Musito.— Muchas gracias.
— No agradezcas.— Dice simple.
Seguimos hasta que llegó un punto en concreto en el que ellas ya no podían seguirnos. Llegamos a un terreno libre en el que estaba el jet, nos acercamos y enseguida nos dio la bienvenida el piloto.
[•••]
— ¿Puedo mandar un mensaje a mis seres queridos por si se cae el avión?— Le pregunto sosteniendo el móvil con fuerza, mientras me tiembla hasta el alma.— Lo pido por favor.
El piloto ríe.— No se va a caer, pero si...— Y lo interrumpo.
— No le he preguntado si se va a caer.— Me lamento causando la risa del piloto, otra vez.— Necesito mandar un mensaje, por favor.
— Vale, vale, muchacho.— Accede.— Pero date prisa. Antes de que empecemos ya tienes que tenerlo apagado o en modo avión, ¿Entendido?— Me explica.
— Sí, muchas gracias.— Agradezco casi hiperventilando.— Y por favor, conduzca este trasto bien.
— Entendido.— Ríe.
¡Malditos aviones! Nadie hubiese tenido que inventar estas zonas de tortura si nuestro querido Dios nos hubiese dado alas a todos, pero no, solo les ha dado el privilegio de unas alas a las hadas, a las harpías y las sílfides, el resto de nosotros que le den por culo, ¿No?
Me siento en uno de los asientos al lado de Angelo quien está ocupado mirando una entrevista.
— Señora Mamá, Calista y Chloe, si escucháis esto es porque ya me encuentro en este tras... avión y estoy a un solo paso de la muerte.— Empiezo el audio de WhatsApp pegando el móvil a la boca, sintiendo ganas de vomitar y temblores en todo el cuerpo.— Quería recordaros que os amo mucho y que agradezco todo lo que habéis hecho por mí desde que me conocéis. Mamá, eres la mejor madre del mundo, te admiro mucho por sacarnos adelante sola, tu comida es la mejor, y me hubiese gustado ser un mejor hijo para ti. Calista, aunque muchas veces me toques los huevos te quiero mucho, y también permíteme disculparme por lo siguiente, ¿Te acuerdas cuando buscabas tu highligther, rímel, purpurinas y polvos? Bueno, lo cierto es que jugaba a hacer experimentos con el jabón y también mezclé esas cosas, pero el resultado no fue muy bonito, de nuevo, perdóname, te quiero. Chloe, siempre has sido mi mejor amiga y siempre lo serás, recuerda que no quiero que llores en mi funeral, solo encárgate de coger mi móvil si llega a ser encontrado y borra todo el almacenamiento, memoria, archivos... ¡Todo!, te quiero.— Relato y le doy a enviar.
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MI SALVAJE ADICCIÓN (En pausa)
WerewolfCuando un hombre o mujer lobo nace inmediatamente la Diosa Luna la empareja con un lobo y con su media naranja o alma gemela, como queráis llamarlo, a mi me da lo mismo. Cómo Alfa que soy siempre esperé encontrar a mi alma gemela, no para vivir una...