•~Capítulo.57.~•
EGAN
— No me lo creo.— Musita Calista viendo los enormes armarios, estanterías y pasillos llenos de ropa.
Aquí nos encontrábamos, en una de las tiendas más famosas donde las propias agencias de modelos solían pedir la costura de según qué trajes. Nosotros, los modelos, teníamos el permiso para asistir a esta tienda y hacer compras personales antes de que siquiera saliera al público.
Claro, me fío de mis gustos, pero he decidido venir acompañado de mi hermana y de mi mejor amiga, pero claro, como siempre, me he arrepentido.
— ¡No toques eso, Chloe!— Gruño golpeando el dorso de su mano al ver sus intenciones de palpar la decoración del sitio.
El edificio, literalmente, parecía un museo, un museo de ropa y los espectadores o compradores, la mayoría, eran modelos tanto de mi misma agencia como de otras. Una que otra vez me miraban y me saludaban.
— Ojalá poder ir contigo.— Se lamenta mi hermana.
— Créeme que no quiero ir.— Confieso.— Esto de viajar me parece una mierda.
— Emm, honey, te vas a París, el país de la moda y el amor, no me jodas, Egan.— Gruñe Chloe.— Ojalá ser tú, imbécil. Además, estarás rodeado de celebridades y de gente reconocida.
Me encojo de hombros mientras sigo caminando por los pasillos y estanterías.
— ¿Un traje simple estará bien, no?— Digo cambiando de tema.
— No me creo que seas modelo y no tengas sentido de la moda.— Comenta Calista mirándome con claro disgusto.— ¿Vas a una gala de modelos básicamente porque festejan tu crecimiento en el mundo de la moda y tú quieres ir vestido como un simplón? Me avergüenzas, Meyer.— Escupe.
Ahora sí, no pude evitar reírme.
Cuánto drama, Dios mío.
— ¿Entonces qué me proponéis?— Pregunto encogiéndome de hombros.
No es que no tuviera buen gusto para la moda, es más, considero que visto muchísimos mejor que estas dos estúpidas que no han dejado de darme la lata desde que hemos llegado, pero el problema aquí es que no quiero ir a la gala y mucho menos con Angelo. No porque esté enfadado con él, sino porque es terriblemente incómodo.
— Espera y verás.— Dijeron al unísono con tono y risa malvado, de cuento de brujas.
Mientras las seguía como un perrito faldero por pasillo que iban y chillaban al ver según qué ropas o según qué modelos vistos ya en televisión o pasarela, yo, estaba en mi mundo.
El solo pensar que después también debíamos ir a otras tiendas si aquí no encontraban lo que querían para mi también en busca de zapatos, joyería... Me duele la cabeza.
Quiero aclararles que no voy queriendo brillar, que solo voy para cumplir mi papel profesional, pero luego recuerdo que les importará una mierda y se me pasa.
— E-Egan...— Titubea mi hermana mirando a mis espaldas con pánico.
— ¿Qué mierda?— Titubea también Chloe mirando a mis espaldas.
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MI SALVAJE ADICCIÓN (En pausa)
Hombres LoboCuando un hombre o mujer lobo nace inmediatamente la Diosa Luna la empareja con un lobo y con su media naranja o alma gemela, como queráis llamarlo, a mi me da lo mismo. Cómo Alfa que soy siempre esperé encontrar a mi alma gemela, no para vivir una...